VALÈNCIA. Grupo Ribera ha llegado a un acuerdo con la aseguradora DKV para la compra de su paquete accionarial en Marina Salud, la empresa concesionaria del Hospital de Dénia del que el grupo sanitario valenciano ya poseía el 35% restante. Con esta operación, que solo está pendiente de recibir la autorización de Competencia (CNMC), Ribera adquiere el control sobre el 100% de Marina Salud y cierra definitivamente a la Generalitat la vía para recuperar la gestión pública del centro mediante la compra de las acciones de DKV.
Fuentes de Ribera Salud han confirmado la operación a Alicante Plaza sin precisar el importe mientras esté pendiente la autorización de la CNMC, que ya ha abierto el expediente para analizarla.
De esta manera, Ribera cierra definitivamente una operación para tomar la participación mayoritaria del Hospital de Dénia que ha buscado desde principios de 2016, cuando la aseguradora alemana movió ficha para salir del accionariado de Ribera Salud. El consejero delegado de la aseguradora alemana DKV, Josep Santacreu, incluso llegó a comunicarle a Consell que tenía pactado el traspaso de su participación a Ribera, pero la irrupción de la Generalitat para intentar quedarse las acciones de DKV como vía para cumplir la promesa de Ximo Puig de revertir esta concesión antes de su finalziación en 2024 impidió que se materializase el acuerdo entre las empresas.
De entrada, la Conselleria de Sanidad controlada entonces por Carmen Montón avisó de que no autorizaría la transmisión de acciones a la firma dirigida por Alberto de Rosa.
El bloqueo propició la intervención del propio presidente de DKV Seguros, Javier Vega de Seoane, para pedir personalmente a Ximo Puig que facilitase una salida.
Meses después de esa reunión, la Generalitat comunicó a la aseguradora alemana que el precio máximo que podía pagar por Marina Salud eran alrededor de 16 millones de euros más la deuda de Marina Salud con sus socios, que en ese momento ascendía a 35 millones. De los 16 millones, a DKV le correspondería el 65%, una cantidad corta en comparación con lo que le podría ofrecer su socio en el accionariado dadas las expectativas de negocio hasta el fin de la concesión en 2024.
Ese límite, impuesto porque la Ley de Patrimonio obligaba a la Generalitat a ceñirse al valor neto de la acción, redujo el interés de DKV por intentar llegar a un acuerdo con la administración y las negociaciones entraron en vía muerta. Entre otras cuestiones, DKV sostenía que el cálculo definitivo de las liquidaciones pendientes de la concesión, que acumulaban años de retraso, podrían cambiar la valoración de la empresa.
Elisa Tarazona, CEO de Ribera. Foto: KIKE TABERNER
Ribera Salud y DKV constituyeron la sociedad Marina Salud SA cuando resultaron adjudicatarios del concurso convocado por la Conselleria de Sanitat para la gestión sanitaria integral en la Marina Alta, que incluía la construcción de un nuevo hospital de agudos en Dénia y la asistencia en centros de salud integrados de Dénia, Calp y Xàbia, entre otros. Se trata de un caso particular en este tipo de gestión porque fue el primer traslado de un hospital público, el de Dénia, desde un modelo de gestión directa al modelo concesional.
La salida de DKV del accionariado de Marina Salud a falta de tres años de que finalice la concesión sitúa a Ribera como único interlocutor de la Conselleria de Sanidad para completar el pretendido traspaso de la gestión privada a la pública. Tras la tormentosa recuperación de la gestión pública del Hospital de Alzira, un asunto con el que Ribera ha llegado hasta el Supremo, el grupo sanitario y la Generalitat están ahora enfrascados en el traspaso de la gestión del Hospital de Torrevieja, que finaliza en octubre.
Para Grupo Ribera, propiedad de la norteamericana Centene Corp, la compra del Hospital de Dénia supone continuar con su política de adquisición de concesiones, donde ha pisado el acelerador en los últimos meses.
Entre sus últimas operaciones están adquisición de la totalidad del accionariado del Hospital de Molina, centro privado en la localidad de Molina de Segura en la Región de Murcia y que da cobertura a un área de influencia de 140.000 ciudadanos; el Hospital Juan Cardona de Ferrol; el Hospital Polusa de Lugo; o la compra al grupo Nosa Terra del 93% del Hospital de Povisa.