ALICANTE. Con la participación de más de 250 músicos y músicas, la séptima edición del Festival Internacional de Jóvenes Orquestas (FIJO) encierra melodías que escaparán de los instrumentos a partir de este jueves 1 hasta el día 8 de julio. Una semana en la que los conciertos y el buen rollo entre músicos y orquestas comparten un mismo compás, en las tres sedes que presenta la provincia para el evento: el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA), Auditori Teulada-Moraira y el Auditorio Internacional de Torrevieja. Durante estos siete años del festival de jóvenes instrumentistas, la Orquesta de Jóvenes de la Provincia de Alicante (OJPA) siempre ha sido la anfitriona, incluyendo en esta edición una novedad: "Este es el primer año que nos van a acompañar tres orquestas de jóvenes nacionales: Tailandia, Chile y Canadá", destaca el director de esta orquesta, Francisco Maestre. Se trata de formaciones musicales que "son, prácticamente, de nivel profesional. Estamos hablando de orquestas top", apunta. "La Orquesta Nacional Juvenil de Chile viene de realizar un tour europeo, con el que ha tocado en Berlín o Madrid, además de en el norte de África. Es una orquesta con una trayectoria fantástica y está auspiciada por el Gobierno del país", cuenta el director. "A la Joven Orquesta Nacional de Tailandia ya la conocíamos del año pasado y resultó realmente un espectáculo ver cómo otras culturas interpretaron nuestra música, aunque también nos regalaron piezas tradicionales de su cultura", detalla Maestre, quien comenta con respecto a la Joven Orquesta Nacional de Canadá que "viene de hacer una gira por Estados Unidos y se estrena con nosotros en esta ocasión".
Cada año, son alrededor de 15 las orquestas que envían su propuestas para participar en este festival, de las cuales se selecciona a un número reducido de ellas: "La primera criba surge en cuanto les revelamos las fechas, que siempre suelen rondar la primera semana de agosto. Es entonces cuando se retiran ciertas formaciones porque no tienen disponibilidad y suelen quedar la mitad, de entre las que intentamos dar cabida a orquestas de cámara u orquestas españolas, para que tengan aquí su escaparate", traslada Maestre las bases de la participación. Y revela que este año se apostó por Chile, Tailandia y Canadá debido a que "las tres presentaron solicitudes de orquestas nacionales, motivo por el que decidimos darle al festival ese carácter". Son 21 orquestas las que ya han pasado por el Festival en ediciones anteriores, entre las que se encuentran la Joven Orquesta Filarmónica del Teatro Mariinsky, la Orquesta 'Ciudad de Moscú', la Joven Orquesta de Bruselas o la Orchestra Giovanile di Roma, entre otras, así como formaciones musicales españolas como la Joven Orquesta Provincial de Málaga.
Para este certamen, el cual está impulsado por la Diputación de Alicante y organizado por la OJPA, el programa se basa todo en "conciertos en los tres auditorios, donde cada orquesta presentará su repertorio", manifiesta el director. Además, fuera de las actividades oficiales también se ha "invitado a dos orquestas locales de los auditorios: por una parte, nuestra propia Orquesta de Aspirantes a la OJPA, quien actuará en el ADDA, y, por otra, la Joven Orquesta Sinfónica de Torrevieja, que tocará en el auditorio de su ciudad. Por su parte, a partir del día 2, todas las mañanas habrá ensayos de las orquestas en el ADDA. Y, evidentemente, vamos a llevar a los miembros del resto de formaciones musicales a que conozcan Alicante, con visitas programadas al MARQ o al Castillo de Santa Bárbara", expone Maestre.
La orquesta con denominación de origen alicantina sitúa, como apertura de su programa, la famosa Goyescas, de Enrique Granados, para continuar con la Sinfonía nº8 de Dvorák. "Este año, todas las orquestas hemos decidido interpretar una gran sinfonía: la 5ª Sinfonía de Mahler la presenta Canadá, la 3ª de Beethoven también estará presente... Hemos querido que, aparte de que se trate de una fiesta y haya obras conocidas, el público venga a conocer las grandes sinfonías", sostiene el director. La grandiosidad de la música llegará a los oídos del público con el concierto de clausura, en el que las cuatro orquestas se unirán en una misma. Más de 250 músicos y músicas sobre el escenario bajo la batuta del propio Francisco Maestre, quien considera que "es la parte más bonita del festival. Da mucho gusto trabajar con ellos, observar las caras, las energías de distintas culturas, ver cómo se ayudan, el buen rollo que tienen y que no hay malicia, aunque sí competitividad sana. Es la fiesta total".
Un concierto que, debido a su éxito, se trasladará a los tres auditorios los días 6, 7 y 8 de agosto en Torrevieja, Moraira y Alicante, respectivamente. El programa musical comenzará fuerte, con un guiño "a un compositor español, Manuel de Falla, con Amor Brujo, una de sus famosas piezas. Tras ella, contaremos con el concierto para violín y orquesta de Max Brunch, que va a interpretar como solista el director de la orquesta de Tailandia, un violinista muy conocido. Y, tras un pequeño descanso, retomaremos el concierto con una obra muy difícil técnicamente, que se llama Scheherezade, de Rimsky-Korsakov, una pieza basada en el cuento de Las mil y una noches, donde veremos qué pasa con esa música rusa interpretada por las orquestas de Tailandia y Chile. Y, si aplauden, tenemos preparados un par de bises", confiesa el conductor orquestal.
En este festival no existen premios ni orquestas ganadoras: "Se trata de una convivencia y queremos hacer música. Lo que destacaría es el buen rollo que hay entre los músicos y las orquestas", subraya. La iniciativa nació en 2013, cuando la OJPA se dio "cuenta, después de siete años viajando al extranjero, de que el músico quiere tocar, pero también ser reconocido", reivindica Maestre, quien menciona que "Alicante y la provincia en verano tienen poca actividad cultural". El Festival Internacional de Jóvenes Orquestas cuenta con una buena acogida por parte del público, algo que se refleja en que "las entradas están todas agotadas, excepto las del concierto de clausura que todavía no se han repartido. Había colas desde las 7:00 horas; es tradición. El público lo demanda y eso es una auténtica pasada", valora el director.