VALÈNCIA. La portavoz de Ciudadanos en Les Corts, Mari Carmen Sánchez, desveló este jueves el nuevo golpe de timón de la formación naranja para una cuestión que se le ha venido enquistando al partido de Albert Rivera: la reforma de la Ley Electoral Valenciana (LEV). Cs reflejó en su programa electoral de 2015, entre otras medidas, la rebaja del listón electoral del 5% al 3% para permitir la entrada a fuerzas con menor representación tal y como ocurre en el resto de comunidades autónomas de España.
No obstante, en el proceso de negociación de la reforma de la LEV, Ciudadanos incluyó algunas cuestiones como la circunscripción única que necesitan de la modificación del Estatuto de Autonomía. Una maniobra con mayor dilación de los plazos dado que debe ser aprobada por el Congreso y el Senado además de incluir un referéndum para su aprobación. Sin embargo, los partidos del Botànic -PSPV, Compromís y Podem- se han mostrado partidarios de los cambios en la LEV -como la citada bajada del listón- que no necesitan de una reforma estatutaria para avanzar en hacia una normativa más democrática. Un aspecto clave dado que, conviene recordar, todavía existe una modificación de la Carta Magna valenciana varada en el Congreso desde 2010.
Los motivos de este cambio de hoja de ruta de Ciudadanos no se debieron, según fuentes de esta formación, a inconveniencias estratégicas sino a la necesidad de hacer una reforma "de calado" y "no una de mínimos" para eliminar las tres demarcaciones provinciales actuales y dejar una sola de carácter autonómico de manera que se produjera una mayor proporcionalidad en la representación de las tres provincias. Un aspecto que no es rechazado de entrada por el Botànic -el PSPV tendría más reservas- pero por el que estos partidos no están dispuestos a sacrificar la reforma de la LEV que, de hecho, registraron en solitario ya en marzo tras el desmarque de Ciudadanos para comenzar a trabajar sobre la ley y que los partidos de la oposición comenzaran a presentar enmiendas en comisión.
Con estos mimbres, Ciudadanos volvió este jueves a la carga y convirtió su condición en propuesta: puso encima de la mesa una proposición de ley para reformar el artículo 23 y 24 del Estatut que cambia la circunscripción provincial por una única. Una propuesta que quiere que se apruebe en Les Corts y, posteriormente, en la Cámara Baja; y sólo cuando esto se produzca, respaldar la reforma de la LEV que plantean los partidos que sustentan el Botànic. Es decir, condicionó el resto de la reforma electoral a una previa aprobación del cambio en el Estatuto.
A lo largo del jueves, Podemos se mostró favorable a la propuesta del partido naranja, pero siempre y cuando se antepusiera la aceptación de la reforma de la LEV en Les Corts, algo que Mari Carmen Sánchez descartó calificando de "chantaje", pero que los morados entienden como imprescindible por los plazos, pues la reforma de la LEV ya está lista para ser votada en pleno, mientras que la proposición de Ciudadanos ni siquiera ha llegado a registrarse en Les Corts porque al tratarse de una reforma estatutaria requiere la rúbrica de otro grupo parlamentario.
En este punto, debe precisarse que Compromís fue el menos beligerante con la una modificación del Estatuto -que además Cs solicita por procedimiento de lectura única (sin enmiendas ni modificaciones al texto que ellos presentan porque una amplia mayoría parlaentaria está de acuerdo con lo que plantea) para agilizar su tramitación- que plantea el partido de Albert Rivera dado que siempre han reivindicado una reforma de "máximos", si bien las fuentes de la coalición consultadas por este diario no se mostraron favorables a que pudiera condicionarse el retraso de la LEV a que el Estatuto pase todos los trámites -pueden durar años- en el Congreso.
Curiosamente, Ciudadanos defiende -tras tres años de atasco de este debate en Les Corts- que sí sería posible que la Cámara Baja sacara adelante con celeridad esta cuestión. Más aún cuando desde la dirección valenciana de la formación naranja se ha obtenido el beneplácito de Madrid a poner sobre la mesa esta iniciativa. Una posibilidad que era acogida con escepticismo por los grupos del Botànic que recuerdan la paralización durante ocho años de la reforma del Estatut en el Congreso y, más aún, cuando existe el peligro real de que pueda producirse una convocatoria electoral en España lo que reiniciaría los trámites sobre la Carta Magna valenciana.
Si Compromís mantenía cierta cintura respecto a la propuesta de Podemos, desde el PSPV se mostraron más críticos y escépticos si cabe, considerando que la medida de la formación naranja se limitaba a la "búsqueda de un espacio propio diferenciado del PPCV en un debate en el que han quedado fuera de juego". En este sentido, también se preguntan por qué los naranjas han registrado ahora esta propuesta y no antes, ya que la condición sine qua non de la circunscripción única para apoyar la reforma de la LEV fue algo que pusieron encima de la mesa en febrero.
La aplicación de la circunscripción única electoral en la Comunitat Valenciana buscaría terminar con la sobrerepresentaciones de algunas demarcaciones valencianas, como sería el caso de la provincia de Castellón. Con el 11% del peso poblacional, obtiene en cada elección 24 de los 99 diputados de Les Corts, mientras que Alicante tiene 35 y València 40 con un 38% y un 51% de población total respectivamente. En término de electores, cada diputado de Castellón resulta electo por apenas 17.300 votantes, Alicante por 35.600 y en la provincia de València por 48.600. Un desequilibrio que Ciudadanos quiere corregir a través del Estatuto pero para el que los plazos corren en contra.