VALÉNCIA. Amigas en la ficción y en la vida real. Nicole Kidman, ganadora de un Oscar, Reese Witherspoon, dueña de otro, Laura Dern, nominada a dos en años anteriores, y la joven Shailene Woodley, una de las apuestas más seguras de Hollywood para el cine juvenil tras triunfar con la serie 'Divergente' y 'Bajo la misma estrella'. La cadena HBO ha apostado por Big Little Lies para seguir con el éxito de sus miniseries, dato indudable por su mezcla y similitud con 'Mujeres desesperadas'.
La serie nace por la novela de Liane Moriarty, creada por David E. Kelley, con la producción de Jean-Marc Vallée, el cual también dirige la serie. Sin duda es una de las series más esperadas del 2017 por contar con un reparto de estrellas. La ficción tiene un total de siete episodios que giran en torno a un misterioso asesinato. Un gran parecido con 'Pequeñas mentirosas'. Las tres mujeres protagonistas, Madeline McKenzie, Celeste Wright y Jane Chapman, serán las principales sospechosas. Y ese es el enfoque de toda la serie.
Cada actriz se vio reflejada en su personaje, de ahí a que tanto Kidman como Witherspoon eligiesen el producto sin pensarlo y se subieran al carro de 'productoras ejecutivas'. Les atrajo tanto la propuesta que el resultado de la serie, dejando a un lado la trama y toda su repercusión al estar basada en un libro, ha sido magnífico. La calidad interpretativa da un equilibrio perfecto al crimen.
Una serie llena de emociones que pretende reflejar la maternidad en cada capítulo y la comprensión que hay entre las propias mujeres. Big Little Lies comienza con un asesinato en un evento para recaudar fondos en un colegio. El asesino es un misterio así como la propia víctima, muy extraño todo. El crimen pasa a estar bajo secreto de sumario, salvo con pequeñas filtraciones. El crimen ha estado motivado por rivalidades y secretos que rodean a las tres madres protagonistas
Una carta de presentación con unas madres poderosas, guerreras, rodeadas de apariencias. Pero también con muchas inseguridades y temores que se van profundizando a medida que pasan los capítulos. Si hay algo que se le da bien es hacer reír al público y provocar que saquen sus propias conclusiones para luego acabar demostrando todo lo contrario. Adiós a tus hipótesis.
La mentira va pasando de un lado a otro. El ritmo del primer capítulo es lento pero ofrece de manera exquisita la presentación de cada personaje a través de los interrogatorios que hace la policía. De esta forma se va descubriendo los cotilleos sobre las rivalidades y afinidades en la pequeña residencia.
Sin embargo la serie puede caer un poco en los tópicos de 'Mujeres desesperadas': demasiado drama, poco misterio y comedia aburrida. Mantener el equilibrio en estos tres géneros es complicado y la audiencia lo está notando. Pero si hay algo importante que el público femenino sabe valorar es las historias sobre el control del cuerpo femenino y una mirada muy femenina en cada proyecto.
Sin lugar a dudas, Reese Witherspoon es la que más brilla, sobre todo cuando interactúa con el personaje de Laura Dern, que tiene gran parte de ayuda la banda sonora. La manera en la que ha sido realizada la banda sonora y el estilo narrativo, es totalmente correcta. Perfectas mujeres con grandes secretos que se perciben solo en los pequeños detalles.
El argumento recoge temas como el acoso escolar, la violencia de género, la maternidad, el divorcio y las diferencias sociales que separan a cada protagonista, temas por los que las actrices protagonistas se han sentido muy identificadas.