Ximo Puig. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. El conflicto de la Conselleria de Sanidad Universal con la Fundación Instituto Valenciano de Oncología (IVO) está más cerca de resolverse. La intervención este jueves del president Ximo Puig -adelantada por Valencia Plaza-, quien convocó en el Palau de la Generalitat por separado a dos patronos que habían votado en contra, ha abierto la posibilidad de que la Fundación cambie, en su reunión de este viernes por la tarde, la decisión de no firmar que tomó el pasado 14 de septiembre.
Además del clima de confianza con Puig, que la mayoría de los patronos -y el director general del IVO, Manuel Llombart- habían perdido en la consellera Carmen Montón, dos son las claves que han casi convencido a los dirigentes de la Fundación, a falta de recibir los documentos prometidos.
En primer lugar, la elaboración de un segundo informe de la Abogacía de la Generalitat con conclusiones diferentes a las del primero, que consideraba ilegal la modalidad de convocatoria pública mediante acción concertada en lugar de mediante concurso público. Este fue el argumento esgrimido el día 14 para rechazar el contrato. El nuevo informe está firmado por la directora general de la Abogacía, María José Rodríguez Blasco, y avala la legalidad del procedimiento elegido.
El segundo compromiso que escucharon los patronos que acudieron al Palau de la Generalitat fue que Sanidad Universal hará una interpretación favorable a la Fundación de las condiciones de acceso de nuevos pacientes al IVO. Se trata de una promesa que ya hizo Montón al presidente del Patronato, Antonio Llombart, el pasado día 20, pero la Fundación exigió que constara por escrito y Montón se negó. La consellera declaró pocos días después que modificar las condiciones del pliego podría ser ilegal.
Este es el punto más difícil de cumplir, ya que la bases de la convocatoria de acción concertada establecen de manera muy clara que el acceso de los pacientes nuevos al IVO "requerirá siempre de la remisión previa, debidamente documentada" desde los departamentos de salud de la Conselleria, con una "derivación expresa" por los facultativos especialistas relacionados con la atención oncológica", validada "por la dirección del departamento correspondiente".
En la Fundación IVO ven difícil que ningún alto cargo firme un documento cambiando estas condiciones, pero si este viernes llega el papel firmado, junto al nuevo informe de la Abogacía, están dispuestos a firmar el contrato.
La decisión la tomarán los seis miembros que quedan en el Patronato de la Fundación IVO tras la dimisión en apenas una semana de dos vocales, Javier Garín y Concepción Sánchez Palomo.
Los seis que quedan son Antonio Llombart, que el día 14 votó a favor de firmar; Antonio Noblejas, que también votó a favor, y los cuatro que votaron en contra: el vicepresidente, Tomás Trénor, marqués del Turia; el secretario, Jaime Olleros; el tesorero, Santiago Bauzá, y el vicesecretario, Vicente Fontestad.
Trénor y el empresario Vicente Fontestad fueron los patronos que acudieron este viernes a sendas citas convocadas por el president Puig. Unas reuniones que, por cierto, no figuraban en la Agenda del portal de transparencia de la Generalitat y que fueron desveladas por Valencia Plaza. En las reuniones no estuvo presente la consellera Carmen Montón, aunque será ella la que ejecute los acuerdos.
La Fundación IVO tiene de plazo hasta el lunes 2 de octubre para presentar toda la documentación que permita firmar el acuerdo de acción concertada. Si finalmente no lo hace, la convocatoria sería declarada desierta y la institución quedaría en la misma situación que está desde el 1 de enero de este año, como colaboradora de la Consellería sin contrato.
Al no haber concierto y no estar presupuestado el gasto, las facturas del IVO se acumulan en los departamentos de salud sin que en todo el ejercicio haya cobrado una sola. La deuda supera los 40 millones de euros.
Pese al conflicto y aunque no se llegara a un acuerdo, tanto desde la Generalitat como desde el IVO sostienen que la atención a los pacientes está asegurada. En el caso de los usuarios del IVO siguen siendo atendidos en la Fundación que dirige Manuel Llombart, mientras que los nuevos casos de posible cáncer detectados son gestionados por la sanidad pública y, en caso de considerarse conveniente, derivados al IVO.
