entrevista

Pedro Lacambra (Ibercaja): "Hay que huir de las emociones para no cometer errores invirtiendo"

28/01/2019 - 

VALÈNCIA. Pedro Lacambra, gestor de fondos de inversión de Renta Variable de Ibercaja, fue el ponente invitado al desayuno que celebró Valencia Plaza el martes pasado sobre la gestión 'value'. Posteriormente al interesante desayuno, el gestor del fondo de inversión Ibercaja Small Caps atendió amablemente a este diario para conocer no solo su filosofía de gestión, su visión sobre la marcha del mercado y, entre otros factores, la respuesta que está teniendo la pionera sicav Ibercaja Global International que sacaron al mercado hace tres meses

Licenciado en Derecho y en Administración de Empresas por la Universidad de Zaragoza, tiene el Master de Gestión de Carteras por el IEB y ha cursado estudios en la Université Paris Sorbonne y en la London School of Economics. Actualmente gestiona el fondo de inversión Ibercaja Small Caps, que ofrece una rentabilidad en lo que va de año del 8,13%. A continuación la charla mantenida con Lacambra:

-En primer lugar, ¿qué tal están respondiendo los clientes a la sicav Ibercaja Global International que lanzaron en octubre pasado?
-Ha generado mucho interés, si bien es cierto que las fuertes correcciones del mercado no han ayudado a la comercialización del producto. Pero no menos es que estamos en un momento en el que estas correcciones han abierto una buena oportunidad de entrada. Es un producto que la competencia no tiene y con un valor añadido importante porque estamos ante un caso especial: un gestor de fondos seleccionando a otros competidores. Apostamos por varios de mis colegas, los que consideramos que son los mejores gestores del territorio patrio. Algunos son de reconocido prestigio pero también queremos hacer de incubadora de talento, apoyando a otros no tan conocidos pero que llevan años haciendo los deberes muy bien.


-Un gestor metido a selector...
-Jajaja, así es. Mi ADN es de gestor de fondos, pero en este caso me encargo de seleccionar a estos gestores que encajan con la forma que creemos que se debe gestionar. A muchos de ellos les conozco personalmente, comparto ideas y filosofía de inversión, coincido en reuniones, visitas a compañías...  Este es el valor añadido que ofrece el producto, el profundo conocimiento tanto de los gestores como de sus carteras.

-¿Qué les llevó a lanzar dicha sicav?
-A la vista de la incertidumbre provocada por los 'populismos' cada vez eran más los clientes de la entidad que estaban preocupados por sus ahorros y empezamos a darle vueltas. Pensamos que debíamos ofrecer a nuestros mejores clientes la opción de invertir en una sicav luxemburguesa. Nos remontamos años atrás antes de que Ibercaja Global International viera la luz. Es un fondo de fondos con un gran valor añadido donde además de ser gestores somos selectores y por eso miramos a los gestores que mejor lo hacen en el territorio nacional. Se trata aproximadamente de una quincena de gestores seleccionados tanto en renta variable como en renta fija. Está claro que puede tener un mal año por las condiciones del mercado, pero cuando inviertes con los mejores los resultados acaban dando sus frutos.

-¿Qué le recomendaría a un tenedor de una sicav que está con la mosca tras la oreja por los posibles cambios regulatorios?
-Lo más importante es que se ponga en manos de una banca privada potente y solvente, que le ofrezca distintas alternativas acordes con sus intereses, como la Banca Privada de Ibercaja. Dentro de estas alternativas tenemos un abanico de posibilidades como podría ser fusionar la sicav con un fondo de inversión, una fusión trasfronteriza, disolver el vehículo...

-Cambiamos de tema, ¿por qué decidió encauzar su vida laboral por la gestión de inversiones tras empezar en el departamento de Derecho Mercantil de Garrigues?
-Estaba realmente contento en el despacho donde estaba trabajando, siempre en temas unidos a la empresa. El haber cursado dos licenciaturas (Derecho y Administración de Empresas) me permitió tener la flexibilidad para cambiar de sector cuando me llegó la oportunidad de ser gestor de fondos, algo con lo que desde pequeño había coqueteado.


-¿De pequeño?
-Jajaja. Sí. De hecho con el dinero de mi comunión invertí en fondos de inversión y posteriormente en valores, viviendo las sensaciones de ganar y perder dinero. Aceptar el nuevo reto me permitiría analizar empresas, calcular su valor intrínseco, descubrir oportunidades... Era un mundo que quería explorar y un sector con grandes barreras de entrada. Fue una oportunidad de las que se presentan una vez en la vida y que tenía que aprovechar.

-¿Qué le atrajo de Ibercaja?
-Qué me atrajo y qué me atrae podríamos decir mejor. De Ibercaja me atrajo su visión de cómo debe ser la gestión de fondos, es decir, invertir estudiando las compañías atendiendo a los fundamentales y con total independencia. Formar parte de un equipo muy reconocido a nivel nacional era toda una oportunidad. Me ofrecieron un plan de formación muy interesante y la oportunidad de -si cumplía con sus expectativas- ser gestor de fondos. Y la verdad que fue una decisión correcta, ya que la confianza que la gestora depositó en mí desde el primer día me hizo tener la fortaleza para invertir con total independencia y aprender de mis aciertos y errores.

-¿Y también bien respaldado?
-Así es y siempre, en los buenos y malos momentos de mercado, y eso es algo que sin duda facilita tu trabajo. Asimismo, estar en Zaragoza te permite estar alejado del ruido de mercado, fomentando un pensamiento independiente, que es fundamental para realizar una correcta selección de valores. Considero que trabajo codo con codo con unos compañeros que están entre los mejores profesionales del sector, y formar parte de un gran equipo te permite poner tus ideas de inversión a prueba y mejorar día a día. Todo ello es lo que me sigue atrayendo, es necesario compartir los valores de la entidad para dar lo máximo de ti.

-¿Cuál es su filosofía de inversión?
-No me gustan las etiquetas tan de moda hoy en día. Mi filosofía de inversión es pagar menos de lo que para mi valen las compañías. Pero eso no es solamente hacer un screening -técnica de rastrear acciones- y pagar un múltiplo bajo porque hay mucho más detrás de ello. Hay que hacer muy bien los números, leer las memorias de las empresas, estudiar las cuentas de pérdidas y ganancias, los balances, el estado de generación de caja... Hay que analizar la compañía como un todo para intentar ver si hay algún tipo de manipulación contable, reconocimiento agresivo de ingresos... con el fin de salir mejor en la foto. 


-¿Y dentro de ese análisis qué es lo que más le gusta?
-Sobre todo me gusta analizar la generación de caja libre de la compañía pero también estudiar las barreras de entrada en la industria, sus competidores, clientes... Busco identificar negocios con ventajas competitivas y que visualice operando en un futuro lejano como lo hacen ahora o más fortalecidos. Siempre intentando hallar un nivel de beneficios normalizado, que me permita saber cuánto vale realmente la compañía.

-Y todo ello con la cabeza fría imagino...
-Sí y teniendo mucha paciencia a la espera de que el valor aflore. Además me gustaría resaltar que este es un trabajo que va contigo a todas horas del día y no se limita a un horario laboral, ya que te tiene que apasionar. Asimismo también me atrae mucho la psicología de las inversiones y cómo está estructurado nuestro cerebro y nos influye a la hora de invertir. Hay que huir de las emociones para no cometer errores invirtiendo.

-¿Qué le supuso haber sido reconocido por la prestigiosa consultora Citywire con la calificación ‘A’ antes de cumplir los 30 años?
-El obtener ese reconocimiento internacional me supuso ver que estaba en el camino adecuado, que estaba haciendo las cosas bien. Me enseñó que todas las horas de estudio, formación, análisis de compañías tenían su recompensa. Obviamente me ayudó a tener más visibilidad y acceder a mayores responsabilidades en la gestión. Y también me demostró que no hace falta estar gestionando desde Londres o Madrid para hacer las cosas bien.

-¿Suele conciliar bien el sueño cuando los mercados acusan fuertes descensos?  
-Jajaja (vuelve a sonreír). La verdad es que más de una noche no descanso bien. Este es un trabajo que te lo llevas a casa, como comentaba antes, y no por falta de confianza en tus inversiones, sino porque tienes la confianza de todos los partícipes del fondo (incluyendo familiares, amigos y mis ahorros). Pero lo cierto es que cuando los mercados caen sin discriminar tienes que tener un salvavidas para poder salir a flote, que no es otro que tener los deberes bien hechos, los números contrastados y confianza en tus ideas de inversión y por qué no si el mercado está de rebajas sacar la lista de la compra y aumentar pesos en las compañías que más te gustan.


-Por cierto, ¿qué le sedujo de las ‘small caps’ o compañías de baja capitalización?  
-Las pequeñas compañías suelen ser negocios de nicho y menos seguidas por el mercado lo que te da más oportunidades de encontrar 'perlas de inversión' y con ello poder obtener a largo plazo mayores rentabilidades. Varias de ellas están gestionadas por sus fundadores y me gusta acompañarlas en su ciclo de crecimiento; muchas se vuelven medianas o grandes compañías en ese proceso y otras son adquiridas con prima sobre su precio actual. Tienes un mayor acceso y una relación más cercana con los equipos directivos. De ahí que puedas hacer un modelo de valoración mucho más acertado y preciso que en una 'big cap' con distintas divisiones y operando en geografías diversas sujetas a distintos drivers. En definitiva, es una tipología de activo donde realmente puedes sacar a relucir tus dotes como analista.

-¿Por qué al fondo que gestiona (Ibercaja Small Caps) se le atragantó el pasado ejercicio tras unos años positivos?
-Hay que decir que en 2018 hubo una auténtica sangría en el universo de pequeñas y medianas compañías, que es donde yo invierto. Los inversores tuvieron miedo que estuviésemos al final del ciclo económico y los primero que se quitaron de sus carteras fueron a esas acciones por considerarlas más ilíquidas. Las compañías que publicaban por debajo de expectativas caían estrepitosamente y las que publicaban buenos resultados apenas subían o incluso llegaban a bajar pasados unos días. Considero que en muchos casos fue más por el tipo de activo que por fundamentales; mientras que en un gran número de valores los precios de cotización quedaron desligados de sus fundamentales.

-Entre tanta 'escabechina' algunas oportunidades de compra habría...
-Cierto es, porque nos dio la oportunidad de invertir en empresas que nos gustan a precios más bajos. Es verdad que sufríamos mientras invertíamos porque seguían cayendo, pero estábamos de rebajas y había que aprovecharlo. Es muy difícil comprar en el punto más bajo y en ocasiones el mercado tarda en darte la razón, pero la estrategia aplicada está funcionando desde principios de año donde el Ibercaja Small Caps se revaloriza un 8,13%.

-¿Qué ve en Neinor Homes para ser la compañía con más peso en la cartera del Ibercaja Small Caps, una de las acciones con más presión bajista?
-Podemos empezar por algo que recoge la pregunta: la presión bajista. Me gusta ser contrarian, no ir con el mercado ya que es la forma de encontrar grandes oportunidades de inversión. Neinor defraudó con el guidance en su salida a bolsa; mientras que las preocupaciones sobre la macroeconomía y situación política española no han ayudado. Hemos dejado atrás unos años donde nadie compraba casa, lo que me gusta llamar la 'década perdida del ladrillo español'. Ahora las familias se han decidido a comprar, tienen trabajo o no temen perderlo, y los tipos están bajos. Todo ello mientras Neinor Homes está cumpliendo con el guidance reciente.


-¿Suele rebalancear mucho la cartera?
-La verdad es que no, salvo que las acciones que tengo en cartera hayan alcanzado mi precio objetivo o hayan perdido mi confianza. Estudiar una compañía al detalle conlleva mucho tiempo y en muchas ocasiones también que el valor cristalice. Invertimos pensando en el largo plazo, de ahí que nuestras apuestas permanezcan en cartera y no sean rotadas a menudo.

-¿Cómo ve el patio financiero desde su atalaya?
-Vamos a tener un año movido, que tenemos que aprovechar para invertir a largo plazo. La gestión activa tiene que ser más importante que nunca. En las pequeñas compañías se han abierto oportunidades realmente interesantes en las últimas correcciones. Y veo que estamos en un momento muy dirigido por las estrategias de inversión pasiva, los algoritmos, las estrategias de volatilidad que exageran los movimientos de mercado. Aquí la gestión activa y con alma van a salir reforzada. Las gestoras de fondos tienen que ofrecer un gran producto porque el cliente cada vez es más exigente y no se va a conformar con cualquier cosa.

-¿Llegará a buen puerto la ‘desconexión’ del Reino Unido de la Unión Europea (UE) o atisba un ‘hard Brexit’?
-Es muy complicado saber que resultado se va a obtener, pero a mí me cuesta pensar que Reino Unido quiera un 'hard Brexit. Seguramente estén tensando la cuerda para obtener otro acuerdos más beneficioso para ellos en sus negociaciones con la UE. Y, desde luego, que todo esto en el corto plazo no es bueno para los mercados por la volatilidad y falta de confianza que genera. Sin embargo, a largo quién sabe porque igual es hasta bueno para avanzar hacia una Unión Europea más fuerte. Las opciones sobre la mesa ahora son de un 'hard brexit', un acuerdo con algún cambio que el Parlamento británico decida continuar en la UE desoyendo al pueblo -la soberanía reside en el parlamento y los referéndum son consultivos- o convocar otro referéndum con más opciones y explicando las consecuencias de cada una al pueblo inglés.

-Por último, ¿subirá este año los tipos el Banco Central Europeo (BCE) por primera vez desde 2011?
-En nuestra opinión no veremos subidas de tipos del BCE como mínimo hasta el año que viene. La inflación no acaba de repuntar, la economía europea se está ralentizando y el BCE está tomando un tono más dovish en su discurso. Dicho todo esto, no podemos saber a ciencia cierta las decisiones que van a tomar los políticos. Mi recomendación sería invertir en compañías con un balance saneado, buena generación de caja y que no estén caras. Es mejor dedicar el tiempo en análisis para encontrar estas compañías que intentar saber qué van a hacer y cuando los bancos centrales.

Noticias relacionadas

next
x