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INFORME 'SITUACIÓN COMUNITAT VALENCIANA' 

Palabra de BBVA Research: el 'Brexit' tendrá un impacto más intenso en la Comunitat Valenciana 

19/10/2016 - 

VALENCIA. Si hace justo un año Alberto Charro, director de la Territorial Este de BBVA, comenzaba la presentación del informe 'Situación Comunitat Valenciana' con un "traemos muy buenas noticias de la Comunitat Valenciana", ayer lo hizo con "buenas noticias" a secas... que no es poco ante lo revuelto que está el patio económico. Junto a él estrenaba cargo Rafael Doménech, que ha pasado de ser economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research a ser el responsable de Análisis Macroeconómico del servicio de estudios del también llamado 'banco azul'. Ambos reconocieron el fuerte crecimiento de la economía valenciana pero eso sí advirtiendo que los vientos de cola ya no soplan tan fuerte como hace doce meses.

"El crecimiento económico se mantiene fuerte y buena parte de culpa lo tiene el tirón de las exportaciones de la Comunitat Valenciana, con crecimientos a doble dígito respecto a la media nacional", advirtió Charro. Sin embargo, más de un nubarrón comienza a acercarse por la costa levantina en forma de 'Brexit' e incertidumbre de la política económica, por ejemplo. Pero aún así, y de momento, el crecimiento de la economía valenciana se mantuvo en torno al 0,7% trimestral entre julio y septiembre, ligando trece trimestres consecutivos con incrementos del PIB. 

Según las previsiones de BBVA Research, el PIB de la CV crecerá un 3,3% este año y un 2,2% el que viene. ¿Los motivos de esta ralentización? El menor impacto de la política monetaria ultralaxa del Banco Central Europeo (BCE), la revisión a la baja sobre las perspectivas sobre el escenario global, la incertidumbre sobre la política económica, el tono menos expansivo de la política fiscal y el 'Brexit'. 

Menor competitividad

Según el informe, tendrá un impacto negativo en la actividad económica, cuyos efectos se producen a través de diversos canales, tanto directos como indirectos. Entre los primeros está la desaceleración de la economía británica y la depreciación de la libra, que resta competitividad a las exportaciones de bienes y servicios valencianos (como los turísticos). Y a todo ello hay que sumarle los efectos indirectos derivados de la desaceleración que pueda producirse en otros países de la Unión Europea (UE).

"Todavía es pronto para conocer los efectos del 'Brexit' pero creemos que podría restar en torno a medio punto porcentual (cinco décimas) al crecimiento en 2017", señaló Doménech; mientras recordó que el Reino Unido "absorbe algo más de una décima parte de las exportaciones valencianas de bienes"-tres puntos por encima de la media española-, lo que le convierte en el tercer socio comercial de la CV. Además, tal y como señaló también, un 20% de las pernoctaciones hoteleras en algún punto de Valencia, Alicante y Castellón durante 2015 correspondió a ciudadanos del Reino Unido, lo que sitúa a la CV como la región peninsular con mayor exposición turística al mercado británico.

Pero la cosa no queda ahí porque no hay que perder de vista la demanda residencial desde el Reino Unidos tras el 'Brexit', dado que la Comunitat Valenciana es el principal destino de ingleses que compran una vivienda en España. Basta decir que el 33% de los británicos que compraron una vivienda el pasado año lo hicieron en la CV representando el 7,8% de las ventas totales en la región. 

Ni que decir tiene que la provincia alicantina se va a ver muy afectada por la salida del Reino Unido de la UE y todavía están por cuantificar. "Tenemos unos recursos limitados para hacer un informe solo de Alicante y llegamos donde llegamos", reconoció el responsable de Análisis Macroeconómico del servicio de estudios de BBVA.

Con las pilas puestas

Pero lo que sí le consta es que "las empresas valencianas se han puesto las pilas y priman más en su crecimiento los factores endógenos que los externos". Pero, mientras tanto, vuelven a crear empleo y BBVA Research estima que se crearán unos 105.000 nuevos puestos de trabajo en la región entre este año y el que viene para concluir con una tasa de desempleo próxima al 18,6%. "Se enlazarán cuatro años de creación neta de empleo, que permitirá recuperar la mitad de los puestos de trabajo destruidos durante la crisis". Pero eso sí, la tasa todavía queda lejos del 8% de 2007.

Doménech volvió a advertir -un año después- de que el endeudamiento y el déficit público siguen siendo superiores a los observados en el promedio regional. Pese a todo, la demanda interna continuará siendo el principal sostén de la actividad económica, aunque se espera una desaceleración del consumo privado como consecuencia de la reducción de la riqueza financiera y del aumento de la incertidumbre económica.

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