José Mourinho, entrenador del Manchester UnitedVALÈNCIA. "Turbias, muy turbias, bajan las aguas por Old Trafford". Así comenzaba el artículo que abría la sección de bolsa de Valencia Plaza el pasado 5 de octubre. Y la cosa ha ido a peor, dado que las acciones del Manchester United (ManU) cerraron el viernes pasado en los 17,29 dólares -conviene recordar que cotiza en Wall Street- tras dejarse en el camino un 1,93%. Sin embargo, y lo importante, es que durante la sesión tocó los 17,15 'billetes verdes' -mínimo del verano de 2017- sobre los que se movía cuando el club inglés anunció el fichaje del mediático José Mourinho el 27 de mayo de 2016.
Pero la cosa no queda ahí porque desde que el pasado 31 de agosto el ManU estableciera su máximo histórico en los 26,20 dólares ha perdido un 34% de su capitalización. La mala marcha del club en la Premier League -donde a pesar de la victoria del pasado sábado sigue fuera de los puestos europeos y eliminado a las primeras de cambio de la Capital One Cup- tiene mucho que ver en el mal tono bursátil.
Cierto es que sus últimos resultados empresariales completos de un ejercicio tampoco están acompañando, más bien todo lo contrario, porque en septiembre anunció unas pérdidas de 21,3 millones de dólares -cerca de 19 millones de euros- al cierre de su año fiscal, que acabó el pasado 30 de junio. Unos 'números rojos' que contrastan con las ganancias de casi 31 millones de dólares doce meses antes -algo más de 27 millones de euros-. Todo ello con una caída del 16% de sus ventas.
La fuerte corrección bajista del equipo controlado por la familia Brazer desde 2005 ha provocado una caída en picado de su capitalización hasta los 2.800 millones de dólares -al cambio algo menos de 2.500 millones de euros-, lo que le sitúa a la altura de Laboratorios Almirall en el Mercado Continuo español.
Sin embargo, el ManU se revaloriza todavía un 23,50% -tomando el cierre del pasado viernes- respecto a los 14 'billetes verdes' a los que debutó en Wall Street el 10 de agosto de 2012. En el folleto informativo registrado por los 'Red Devils' ante la CNMV estadounidense, el club residente en el 'Teatro de los sueños' reconocía que planeaba "destinar todos los fondos captados a través de su oferta a reducir su endeudamiento".
Según los datos aportados entonces, la deuda del Manchester United ascendía a 31 de marzo de aquel año a 423,2 millones de libras frente a los más de 600 millones de la actualidad. Cierto es que el club apunta hacia un nuevo ejercicio récord de ingresos "apuntalando nuestro plan estratégico a largo plazo para crear un crecimiento sostenible en todas las áreas del club" como advertía hace un par de semanas Ed Woodward, vicepresidente de los 'diablos rojos'.
