El presidente de Metrovacesa, Ignacio Moreno, y su CEO, Jorge Pérez de Lezo VALÈNCIA. Metrovacesa (MVC) se dejó este martes en el parqué un 2,05% para cerrar en los 7,65 euros, pero eso sí un 60,21% por encima de los 4,775 euros de sus mínimos del pasado 4 de noviembre. Un 'subidón' en toda regla que la ha llevado a avanzar este año un 26,66%, lo que equivale a decir que está a un paso de recuperar el 31% perdido a lo largo de 2020.
La cotizada presidida por Ignacio Moreno no está pasando desapercibida entre los grandes inversores. Y ahí está el caso de Alicia Koplowitz, que a través de su potente sicav Morinvest aumentó su participación en MVC durante el primer trimestre hasta los 1,8 millones de euros. Conviene recordar que la promotora está controlada por Banco Santander (49,36%) y BBVA (20,84%). Los mismos que la relanzaron en julio de 2017 como plataforma para dar salida a su cartera de suelos, al traspasarla terrenos valorados en 1.108 millones de euros.
Siete meses después volvía a cotizar en bolsa a un precio de salida de 16,50 euros por cada acción, cuyo retorno solo fue dirigido a los inversores institucionales. Previamente acometió un 'contrasplit' o agrupación de títulos, en la proporción de de una acción de 7,20 euros de valor nominal por cada 45 de 0,16 euros. Pero, tal y como se observa en el gráfico de Investing, la tendencia al alza es evidente, lo que se ha traducido en un aumento de su capitalización hasta los 1.160 millones de euros. Todo ello sin tener ningún bajista con DNI en su accionariado, o caso de tenerlo no alcanza el mínimo legal del 0,50% a partir del cual hay que 'desnudarse' ante el mercado.
Una MVC que este martes celebró su junta de accionistas, un día antes de rendir cuentas al mercado con la publicación de los resultados correspondientes al primer trimestre del ejercicio en curso. Por lo pronto los accionistas aprobaron el pago de un dividendo de 0,40 euros por acción, que se abonará antes del 20 de mayo. Dicho dividendo es casi un 54% superior a los 0,26 euros anunciado el pasado noviembre, pero la compañía justifica en su saldo neto de caja positivo a 31 de diciembre de 2020 y en el plan de negocio expuesto con motivo de su admisión a bolsa en 2018.
Asimismo la junta también dio el visto bueno a un plan de incentivos a cinco años para el equipo directivo, para lo cual destinará 60,67 millones de euros. El plan de incentivos, que cuenta con tres ciclos independientes y tres fechas de concesión en 2021, 2022 y 2023, a partir del 1 de enero de 2021, incluye la entrega de acciones y está dirigido a dieciocho directivos y empleados, incluido el consejero delegado, Jorge Pérez de Leza, con un objetivo de 650.000 euros en cada uno de los tres ciclos. El número máximo de acciones que los beneficiarios podrán recibir no superará las 745.583, que representan aproximadamente un 0,49% del capital social de MVC.
De las acciones destinadas al plan de incentivos, hasta 243.750 podrán ser entregadas al consejero delegado, quien recibirá en la liquidación correspondiente a cada ciclo del plan un número máximo de 81.250. El plan se determinará con objetivos de generación de caja, lanzamientos de promociones, entregas de proyectos y retorno para el accionista.
Metrovacesa disparó sus 'números rojos' el pasado año hasta los 163,5 millones de euros desde los 4,5 millones que perdió en 2019. Su consejero delegado, Jorge Pérez de Leza, se refirió a 2020 como un año "retador", mientras destacó el incremento en un 21% de las preventas respecto al ejercicio anterior (1.037 unidades). Tras anunciar un "aumento notable" de las unidades que se entregarán en 2021 y los próximos ejercicios, recordó que a 31 de diciembre pasado la cotizada contaba con 3.550 viviendas en desarrollo o completadas, equivalente a 61 promociones. Además apuntó como una "gran ventaja competitiva" su cartera de suelo valorada en 2.679 millones, que permitirá construir en torno a 35.000 viviendas.
El CEO confirmó su estrategia de construir proyectos de viviendas de alquiler para fondos inversores especializados -el llamado modelo 'built to rent'-, de los que MVC tenía en 2020 cinco proyectos en desarrollo en Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca, con un total de 486 unidades, a las que se sumarán otras 550 que empezará a levantar en 2021 en Valencia, Alicante y Sevilla. Testigo de la recuperación de la demanda en el cuarto trimestre de 2020, Pérez de Leza ha marcado a su compañía -una de las que cuenta con la deuda más baja y mayor liquidez del sector- una estrategia basada en la flexibilidad y la prudencia, que les permita estar "preparados para acelerar si la recuperación de la demanda se consolida".
Por último, la junta también ratificó -además de las cuentas y el informe de gestión de 2020-, el nombramiento de Enrique Migoya como consejero dominical por cuatro años, una nueva política de remuneración de los consejeros para los ejercicios 2021, 2022 y 2023 y la reelección de PwC como auditor de cuentas por un periodo de un año.
