VALENCIA. El turismo sanitario se ha convertido en una baza a jugar para todo aquel país y en nuestro caso comunidad autónoma que quiere visitantes con alto poder adquisitivo. En ello está la empresa valenciana Medtravelco, fundada por Inma Meco, enfocada a este tipo de turista.
La empresa la creo hace un año y medio, con toda la web orientada al mercado inglés y dirigido a pacientes en el ámbito dental, la estética y la fertilidad. Este último es el que más llega a la Comunitat al ser la región un referente con el IVI y otras clínicas que ya están muy dirigidas al paciente internacional.
La creación de la empresa surgió al detectar que las clínicas estaban dejando de lado la parte turística y organizativa del viaje de aquellos turistas que vienen a España buscando una asistencia sanitaria específica y decidió emprender esta aventura tras una trayectoria dedicada a la banca.
Meco no solo trabaja a través de su web. También lo hace con facilitadores internacionales en Reino Unido, Suecia y Estados Unidos. ¿Pero por qué enfocarse en gran medida al mercado inglés? "Está cerca, no tenemos problemas de visados y es un paciente que busca otras alternativas a las de su país, tanto por listas de espera como por la legalidad, ya que España es más abierta en cuanto a fertilidad y hay anonimato en la donación de óvulos o de esperma, por ejemplo", explica.
También combinan la estética con vacacional, algo que Benidorm ha sabido captar muy bien. Según Meco, la Comunitat debe aprender mucho de otras autonomías que llevan atrayendo este turismo mucho tiempo y que sí han recibido apoyo de la administración, como en Barcelona o Costa del Sol. "Aquí quien mejor lo está haciendo son hospitales en Benidorm, tanto IMED como Clínica Benidorm, que un 50% de su facturación es en paciente extranjero".
La clave es saber cómo tratar a este paciente, que viene por una motivación, no a tomar el sol, y sin embargo a pesar de desplazarse por salud puede combinarlo con destino. "En fertilidad tú puedes hacer una visita guiada o ir a un restaurante con Estrella Michelin". Evidentemente, la mayoría de estos turistas son de clase media-alta.
Meco reconoce que, a pesar de que dental es una de las especialidades que trabaja, va mucho a precio así que ha optado por dirigir más sus campañas a fertilidad y estética, donde prima más la calidad. "Aunque es más barato que en Reino Unido prefieren irse a Hungría o Bulgaria a hacerse un tratamiento dental".
Aunque el turismo sanitario hace unos años estaba mal visto porque estos turistas iban a la seguridad social, el panorama cambió con una directiva europea que generó un marco que regulaba entre los estados el turismo sanitario y dejaba atrás el descontrol anterior.
La estancia del turista sanitario suele ser mínimo siete días con un tratamiento de estética. En fertilidad también hay de consultas de fin de semana, que suelen repetirse mínimo dos veces. Sobre qué prefieren no hay nada cerrado. Unos se alojan al lado de la clínica, mientras que otros cogen un apartamento porque traen a la familia.
Meco señala que todavía queda mucho por hacer y destaca Turquía, donde tienen un ministerio de Turismo de Salud mientras que aerolíneas hacen un descuento si vuelas por un motivo de salud y los hoteles están preparados para atender las necesidades del paciente. Tailandia e India también se están posicionando en este tipo de turista. "Hay que unificar parte turística y médica y hacer un camino conjunto", señala.