VALENCIA. Miércoles 13 de enero de 2016. Las acciones de Bankia (BKIA) cierran en bolsa en los 1,01 euros tras avanzar un 2,22%. Fue la última vez que el banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri acababa el día por encima de la cota psicológica del euro. Desde entonces es una 'penny stock' más aunque cada vez está más cerca de quitarse dicha etiqueta.
De hecho ayer llegó a marcar un máximo intradía en los 0,986 euros a media sesión aunque finalmente cerró en los 0,958 euros después de revalorizarse un 0,52%. Pero conviene tener en cuenta que solo en lo que va de diciembre se anota un avance de casi un 14% y, además, con la particularidad que solo ha cerrado en negativo en dos de las ocho jornadas celebradas este mes. Basta echar un vistazo al gráfico adjunto para darse cuenta de la reacción alcista de BKIA.
Así se explica que su capitalización haya ascendido hasta las proximidades de los 11.000 millones de euros y sus pérdidas anuales se hayan reducido hasta el 10,5%, cuando no hace mucho alcanzaban el 20%. La recuperación del sector bancario -alentado por el último mensaje de Draghi de que comprará menos deuda en lo que es todo un guiño a que el QE va llegando a su fin y con ello los tipos cero- está animando la cotización de Bankia.
Sin embargo, los bajistas no están por la labor de que las acciones de BKIA sigan subiendo. Sin ir más lejos, minutos después del cierre de ayer la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) actualizaba las posiciones cortas de las dos últimas semanas. Y en el caso del banco domiciliado en Valencia -pero dirigido desde Madrid- arrojaron el dato más alto desde hace justo un año: el 1,64% del capital está en manos de los bajistas de turno. Solo en las dos últimas semanas los 'cortos' se han incrementado en un 23,3%, dado que el pasado 25 de noviembre -penúltima comunicación del supervisor- totalizaban el 1,33%.
Solo el hedge fund británico Marshall Wace, un viejo conocido de la banca mediana española cotizada en bolsa y que la tiene tomada con el Popular, figura con nombre propio por aquello de igualar -o superar en este caso- el 0,50% a partir del cual está obligado a desvelar su nombre al mercado. A fecha 8 de diciembre, dicho fondo de alto riesgo tenía en cartera el 0,51% del capital de Bankia.
Mientras sigue el culebrón de las 'tarjetas black' donde el cruce de acusaciones entre unos y otros es una constante, la Comisión Europea volvía a apremiar al Gobierno español a que complete las privatizaciones de Bankia y Banco Mare Nostrum (BMN). Aunque el Ejecutivo de Mariano Rajoy lejos de dejarse presionar por Bruselas hace diez días aprobaba alargar en dos años el límite para privatizar a ambas entidades, hasta finales de 2019 y marzo de 2020 respectivamente.
Precisamente ambos bancos nacionalizados son los que aparecen en las quinielas sobre una posible fusión. Una operación que tendrá que decidir en primer lugar el FROB para ser validada posteriormente por Bruselas. La misma operación que mantiene divididos a los banqueros y analistas donde los primeros discrepan y los segundos 'bendicen' el matrimonio como publicó este diario hace dos semanas.