Emilio SarachoVALÈNCIA (VP). Las posiciones cortas en Banco Popular alcanzaron un 11,75% del capital de la entidad a fecha 17 de febrero, sobrepasando el 9,88% registrado hace dos semanas y registrando un nuevo máximo desde junio de 2010, momento en el que comienzan los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Y, para más inri, y son siete los 'cortos' con nombre y apellido en el capital del banco.
Los bajistas habían reducido sus posiciones cortas hace un mes, antes de conocer los resultados de cierre del ejercicio de la entidad. Sin embargo, una vez que se publicaron las cuentas del banco, los 'cortos' volvieron a actuar, elevando sus posiciones hasta superar el 11,7%, dato que se conoce coincidiendo con la llegada de Emilio Saracho a la presidencia.
Actualmente, las entidades que más apuestas a la baja tienen sobre Popular son AQR Capital Management LLC, que a 15 de febrero tenía declaradas posiciones bajistas sobre el 2,88% del capital, y Marshall Wace LLP, que el 13 de febrero declaró posiciones cortas sobre el 2,61% del capital. Samlyn Capital LLC notificó el 9 de febrero posiciones bajistas sobre el 1,3% del banco, mientras que BlackRock Investment Management declaró el 0,6%. Las posiciones cortas de Lansdowne Partners (UK) LLP, PDT Partners, LLC y Oxford Asset Management se situaron en el 0,59%, 0,51% y 0,49%, respectivamente.
El vicepresidente de la entidad Roberto Higuera ha señalado este lunes durante la junta extraordinaria de accionistas de la entidad que el nuevo equipo gestor del banco, encabezado por Emilio Saracho, ha de trabajar para elevar el valor de las acciones y evitar nuevos ataques bajistas. "Cuando les demos motivos para pensar que el banco va remontar, los 'cortos' saldrán corriendo y la acción pegará un rebote", ha destacado Higuera. Los títulos del banco han cerrado la sesión de este lunes con una caída del 0,59% hasta los 0,839 euros.
Desde el año 2010, la CNMV exige que se le comunique toda posición corta sobre cualquier cotizada española que exceda al 0,2% del capital social y hace públicas las que superen el 0,5% del capital. La toma de posiciones cortas es una operativa bursátil que utilizan los inversores cuando prevén que el mercado va a bajar o está sujeto a mucha volatilidad.
En líneas generales, consiste en pedir prestadas acciones de una entidad a cambio de un alquiler con la intención de venderlas y posteriormente recomprarlas más baratas. El precio obtenido por la venta de los títulos compensaría con creces el alquiler y la posterior compra.
