VALÈNCIA. (EP). El pleno de las Corts ha rechazado este jueves, con los votos de Compromís, Podemos y PSPV, devolver al Consell la Ley de Mancomunidades como pedían el PP, que entiende que el texto "ataca a la organización territorial del Estado", y Cs, para quien se trata de una norma que fomenta "exclusivamente el desarrollo de las mancomunidades de ámbito comarcal". Por tanto, la ley seguirá su tramitación parlamentaria.
En su intervención, la consellera de Justicia y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha defendido que la ley pretende renovar y adaptar el régimen jurídico de las mancomunidades a las nuevas necesidades de la sociedad valenciana; satisfacer "de manera eficiente" las demandas y aspiraciones de las comunidades vecinales; impulsar la colaboración con las demás administraciones autonómicas "desde el respeto a la autonomía de cada una de ellas" y contribuir a la solidaridad y vertebración del territorio.
Durante la defensa de su enmienda, el diputado del PP Manuel Pérez Fenoll ha calificado la ley de "bodrio y mangarrufa" al señalar que genera "dudas" sobre su constitucionalidad porque "afecta a materias que competen al Estado".
Además, ha subrayado que se discrimina a las mancomunidades comarcales de las que no lo son y es una ley "torticera que pretende ahondar en el concepto de comarca en detrimento de los derechos individuales, ataca frontalmente el concepto de provincia y busca cargarse a las diputaciones".
Al respecto, el parlamentario del PSPV Alfred Boix ha negado que la norma suponga "un ataque a la organización del Estado" y ha defendido que lo que busca es ofrecer un marco para dar "más garantías y fortalecer" la arquitectura institucional local desde la autonomía local para "dar mayor transparencia, eficacia e igualdad".
En este sentido, ha defendido que el objetivo es fomentar el asociacionismo municipal, por lo que ha enfatizado que se trata de una "oportunidad" para "consolidar el papel de los ayuntamientos" y ha señalado que el verdadero ataque a las diputaciones lo ha llevado a cabo el PPCV "con su nefasta gestión y clientelismo".
Por su parte, Toni Subiela (Cs) ha insistido, durante la presentación de su iniciativa, que su grupo está a favor de las mancomunidades pero en contra del modelo que propone el Consell. "Estamos en contra de legislar mal, no favorecer a la ciudadanía y comarcalizar por imposición", ha remarcado para indicar que este proyecto tiene "fines partidistas" y no benefician a la ciudadanía.
Desde Compromís, Paco García ha defendido que se trata de una ley que "da un paso para la vertebración de la estructura comarcal" y que pretende dotar a las mancomunidades de un régimen jurídico "más completo", ofrecerles más autonomía. Además, ha remarcado que no supone ningún tipo de ataque, sino que "avanza en el modelo descentralizador que señala la Constitución".
Por su parte, el parlamentario de Podemos Antonio Montiel ha indicado que el problema de las mancomunidades es que ahora pueden ser 'monofuncionales' y tener solo como objetivo un servicio, por lo que ha abogado por avanzar para ser "eficaces y eficientes" e intentar ampliar esa monofuncionalidad y tener mancomunidades que abarquen más servicios.
A su juicio, hay que abrir un debate sobre el modelo territorial para no reproducir en las comarcas el problema que hay en las áreas metropolitanas. "No se puede legislar contra la realidad comarcal que forma parte historia de este pueblo", ha subrayado.