Ambas cotizadas están entre las mayores posiciones que tiene el fondo Lazard Recovery Eurozone en busca de beneficiarse de la recuperación económica de la Eurozona
VALÈNCIA (VP). El fondo Lazard Recovery Eurozone busca beneficiarse de la recuperación económica de la zona euro seleccionando las compañías que presentan el mejor potencial de apreciación. En este sentido, Stanislas Coquebert de Neuville y Scander Bentchikou, cogestores de dicho fondo indican que varios factores les hacen ser positivos con la renta variable europea:
Además, los gestores consideran que cuatro motores confirman la mejora de la coyuntura económica de la eurozona:
Teniendo en cuenta estas consideraciones, actualmente el equipo gestor encuentra la mayor parte de las oportunidades de inversión en el mercado francés, alemán, italiano y español.
En España destaca la posición en Telefónica (2,6%), compañía que entró en cartera este ejercicio como “una de las apuestas por el mayor gasto en consumo, al calor de la mejora del mercado laboral en la eurozona”, justifica Stanislas Coquebert de Neuville. En esta línea, también Orange se encuentra entre las principales inversiones del fondo, con una posición del 2,4%.
Los bancos europeos ocupan un lugar destacado entre las principales posiciones del fondo, con representantes como las francesas BNP Paribas y Société Générale y la española Banco Santander. De hecho, la financiera presidida por Ana Patricia Botín es la segunda compañía con más peso dentro de la cartera del Lazard Recovery Eurozone, un 3,8%. La apuesta por los bancos se basa en el apetito por el riesgo y el apalancamiento financiero, “uno de los drivers de la recuperación del mercado europeo”, además, "se han visto favorecidos por la reciente mejora económica, la disminución de riesgos y por un trasfondo de subida de tipos cada vez más probable y que llevará a un aumento de los márgenes del sector" dice Coquebert de Neuville.
Pero es el sector industrial el que cuenta con más representación en el porfolio del Lazard Recovery Eurozone. En este grupo podemos encontrar nombres como las francesas Vinci (2,8%) y Saint-Gobain (2,3%) o la alemana Siemens (4%), de hecho, esta última es la acción con más peso en el fondo.
Haciendo balance mensual, Stanislas Coquebert de Neuville y Scander Bentchikou indican que octubre fue un mes de grandes cambios. Mientras en Europa se sucedían unos datos económicos alentadores, el dólar se apreciaba un 2% frente al euro, el petróleo mantenía su avance iniciado a principios del verano y las materias primas se anotaban nuevos máximos mientras que, paradójicamente, los tipos volvían a caer, impulsados por las declaraciones de tono muy laxo del BCE del 26 de octubre. El índice Euro Stoxx50 avanzó un 2,32%, pero el fondo rindió menos, con un alza del 1,12%. Resultó afectado por estar infraponderado en el sector de utilities y en el de petróleo y gas, que rebotó con la cotización del barril, así como por el recelo de los inversores ante los valores financieros italianos, lo que lastró las cotizaciones de BPM y UBI en el sector bancario, y de Azimut y Anima en el de gestión patrimonial.
Uponor, Worldline, ArcelorMittal y Covestro contribuyeron positivamente durante el mes, pero no lo bastante como para compensar los efectos negativos. Aun así, el fondo lleva acumulada una rentabilidad del 15,77% en el año, frente al 13,20% del índice de referencia, el Euro Stoxx50.