Para el analista de XTB todavía queda recorrido alcista en bolsa -y mucho-, mientras los bajistas no "son invitados gratos en la fiesta que se está viviendo dentro del mercado"
MADRID. Puede parecer un discurso repetitivo pero cuando el mercado da la razón a los optimistas, tampoco hay mucho más que decir. Bien es cierto que por parte del bando pesimista, en este tipo de circunstancias todas las voces entonan un diálogo repleto de excusas y argumentos en las que no se llegan a encontrar los motivos por los que el mercado sube, repitiéndose frases dirigidas hacia la incomprensión del movimiento. En la situación contraria, cuando el mercado torna el verde intenso en un rojo que perdura durante unas cuantas jornadas, cualquier noticia o evento es condición necesaria y suficiente para justificar dicha caída.
Pero en la situación actual los bajistas lo están pasando mal, realmente mal, el festival alcista parece no tener fin y no son invitados gratos en la fiesta que se está viviendo dentro del mercado. Por el contrario los alcistas están sumidos en la efervescencia de la misma.
Analizando dicha situación, lo que todo inversor debe determinar son los momentos históricos y puntuales en los cuales el mercado entra en pánico y en una espiral bajista, enfrentándolo a las fases alcistas que ha tenido el mismo. La respuesta es sencilla, los momentos negativos se pueden enumerar y cuantificar, por el contrario sería mucho más tedioso realizar el mismo análisis de los momentos positivos, simplificándolo en un estudio tendencial.
Las correcciones del mercado se han dado de la siguiente manera desde el crack tecnológico de 1970. En 1973 se produce el embargo petrolero a la OPEP, después se produce el crack de 1987, la 'burbuja tecnológica' en el 2000 y la última crisis financiera mundial en 2007. La realidad es que el último tren que podía dirigirse hacia el camino que deseaban los bajistas, ha ido en la dirección opuesta, este no era otro que las elecciones estadounidenses. Teniendo en cuenta que los índices de referencia de dicha economía han subido entre un 12 y un 15% desde que Trump se hiciera con el poder de La Casa Blanca, poco motivo hay para celebrar absolutamente nada, de este lado.
Aun así, la memoria histórica sigue pesando y la posibilidad de repetirse una situación similar a la de 1937 en la que la FED se precipitó en el ajuste monetario, y el mercado reaccionó recortando de manera ostensible. Debemos tener en cuenta que la situación, salvando las distancias, podría llegar a ser similar pero la realidad es que la FED ha aprendido de los errores del pasado.
Toda excusa parece buena para los cortos, pero el mercado siempre da la razón a las posiciones alcistas.
Jorge López es analista de XTB