VALÈNCIA. La Unió de Periodistes congregó este viernes a cerca de 200 profesionales en la Plaza de la Virgen para protestar por la ola de despidos en los medios de comunicación que se produce, además, después de los numerosos ERTE aplicados en las empresas periodísticas durante la pandemia.
La presidenta de la organización, Noa de la Torre, reivindicó "un plan de ayudas específico" que garantice "la pluralidad informativa" en un sector "tan esencial" y "tan golpeado", un mensaje que ya le transmitió al propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en una reunión mantenida esta misma semana.
Una inyección económica dirigida a fortalecer el sistema mediático valenciano pero que debe, tal y como refleja el manifiesto redactado por esta organización, estar "necesariamente ligada al mantenimiento de los puestos de trabajo". "El dinero no puede servir para despedir periodistas", afirmó De la Torre en su lectura del texto de la Unió.
Una reflexión que cobra especial sentido al conocerse los últimos despidos en medios valencianos y medios nacionales con delegaciones en la Comunitat Valenciana, entre ellos los diarios Información, El Mundo y Levante, los tres afectados por expedientes de regulación de empleo. Precisamente, tres medios que habían salido bien parados en el reparto de publicidad institucional de 2019 hecho público este mes de diciembre.
Es decir, el espaldarazo económico del Gobierno valenciano del pasado año -y posiblemente de este último ejercicio aunque todavía no se conocen datos oficiales-, no solo no ha servido para que estos medios refuercen sus plantillas, sino que han terminado el año con despidos masivos.
En esta línea, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, mostró el apoyo del Ejecutivo valenciano a la protesta convocada por la Unió de Periodistes y consideró que estos despidos suponen "una merma democrática".
Oltra, que durante la rueda de prensa del pleno del Consell de este viernes llevó en la solapa una chapa con la frase "Sin periodistas no hay periodismo", lamentó que cuando se ejecutan estos despidos se produce "un goteo democrático", como si "gota a gota" se estuviera "perdiendo calidad democrática".
Preguntada sobre si el Consell podría dar alguna ayuda directa para intentar paliar la situación de este sector, Oltra subrayó que, no solo en las ayudas directas, sino en la propia regulación de la promoción institucional se podría "tener en cuenta a las empresas y grupos que mantienen e incluso amplían sus plantillas".
Luis Carandell pasó muchos años fuera de España trabajando como corresponsal. A su regreso, se sentía extranjero, pero también atropellado por las contradicciones de la España del desarrollismo. Así se le ocurrió la sección Celtiberia Show, en la que peinaba la prensa y recibía cartas con ideas de los lectores. Han pasado muchos años y ha habido todavía más cambios en este país, sin embargo, con la revolución neoconservadora a veces parece que Celtiberia sean las noticias de mañana