VALÈNCIA, (EFE). La Comunitat Valenciana continúa siendo el territorio donde más días de trabajo por habitante se necesitarían para pagar la deuda autonómica (152), casi el triple que en la Comunidad de Madrid, la que menos necesita (52 días).
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) calcula que el nivel de deuda pública sobre el PIB caerá casi 5 puntos porcentuales entre 2017 y 2020, frente a los 7 puntos que prevé el Gobierno, gracias a la aportación de todos los subsectores y en especial de las comunidades autónomas.
De acuerdo con su Observatorio de deuda del primer trimestre, las autonomías serán las responsables de casi el 50 % de la reducción de la deuda pública del 99,4 % del PIB de 2016 al 94,5 % que prevé la AIReF al cierre de 2020.
El escenario central de la AIReF proyecta una senda decreciente de la deuda pública durante la próxima década, que a partir de 2019 presentará un ritmo de disminución próximo a los 2 puntos porcentuales de PIB al año.
La carga de intereses se mantendrá relativamente estable en el entorno del 2 % del PIB, ya que la disminución del nivel de deuda se verá compensada con un aumento gradual de los tipos de interés a los que se financia esa deuda.
Pese a la reducción prevista, el organismo hace hincapié en que el objetivo de deuda pública del 60 % del PIB establecido en la ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera para 2020 no se alcanzará hasta el año 2037.
Dentro del subsector autonómico, solo Canarias, Comunidad de Madrid y País Vasco alcanzarían un nivel cercano al valor de referencia del 13 % del PIB establecido en dicha ley para 2020.
En promedio, los habitantes de una comunidad autónoma necesitarían destinar 86 días de trabajo para amortizar la totalidad de la deuda regional.
Si se toma el resto de deuda (administración central, fondos de la Seguridad Social y corporaciones locales), Extremadura, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia necesitarían destinar aproximadamente un año de trabajo para amortizar la fracción de deuda común que les correspondería.
En lo que respecta a la dependencia de la financiación estatal, Murcia, Comunitat Valenciana, Andalucía, Cantabria, Baleares, Cataluña y Castilla-La Mancha son las que tienen una mayor dependencia, superior al 60 % del total de la deuda autonómica.