La CVMC ficha a una ejecutiva para negociar los contratos de programas de la nueva televisión

VALÈNCIA. Es el primer fichaje de la nueva televisión. La Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació ha contratado a la ejecutiva madrileña Isabel Carrasco para negociar los primeros programas de la nueva televisión autonómica pública valenciana. La elección fue sugerida por miembros del Consejo Rector y se optó por alguien de fuera de la Comunitat Valenciana para que no tuviera vínculos con las empresas locales y así actuar libre de componendas.

Tras unos primeros sondeos en el mercado audiovisual, se optó por la figura de Carrasco que aunaba su experiencia en televisiones autonómicas (estuvo al frente de programación ajena en Telemadrid en el trieno 1993-1996) con su conocimiento del sector audiovisual. Su último puesto de trabajo ha sido en Francia, donde ha estado en Fox International Channels. 

Carrasco tuvo una primera reunión con responsables del gobierno autonómico y del Consejo Rector antes de iniciar las primeras negociaciones. Uno de los aspectos más valorados de la ejecutiva es su discreción, según explicaban fuentes de Presidència. De hecho, en el mes que lleva en València negociando Carrasco ha sido en todo momento austera y reservada. 

La ejecutiva, a la que se le ha fichado con un contrato de prestación de servicios, ha mantenido las primeras reuniones con las productoras que vieron preseleccionados sus proyectos, tanto de animación como de ficción y documentales.

La continuidad de Carrasco en el futuro organigrama no está clara, ya que su función inicial es ir cerrando estos primeros acuerdos. En principio el puesto que ocupa debería ser ocupado por alguien del organigrama de la nueva directora general, Empar Marco, así que no se descarta que su contrato finalice cuando la nueva televisión se ponga en marcha.

Las reuniones, en Burjassot

Según relataron fuentes de la industria audiovisual valenciana, en las primeras reuniones Carrasco se ha mostrado inflexible y está, dicen, “apretando las tuercas” en cuanto a presupuestos. La ejecutiva madrileña se está ajustando al dinero que dispone. Cabe recordar que la nueva televisión contará con 55 millones anuales más los 26,5 millones que se reservaron del año pasado. De los 55 millones iniciales, un tercio estará dedicado a abonar a la plantilla, que se prevé de 500 trabajadores.

En las entrevistas, que se están celebrando en las instalaciones de la antigua RTVV en Burjassot, Carrasco pide rebajas de los presupuestos de hasta el 30%, explicaron algunos de los productores que ya se han reunido con ella. Así, por ejemplo, en el caso de las productoras de animación les está pidiendo un coste de 5.000 euros por minuto, una cifra que los profesionales señalan que está por debajo de los precios habituales que oscilan, según producciones, entre 6.000 y 10.000 euros por minuto.

Esta actitud de exigir tanto está siendo bien vista en Presidència, ya que uno de los caballos de batalla de la nueva televisión será ajustar los costes de cara a que la cadena no tenga un coste oneroso para las arcas públicas. “Entre los proyectos preseleccionados había presupuestos que sí se correspondían con los precios de una autonómica, pero otros eran más altos”, explicaron estas fuentes. La obsesión del Consell es que la televisión no sea vista como un despilfarro.

Hasta la fecha Carrasco ha hablado con varios productores y ha realizado las primeras ofertas pero no será “hasta final de mes”, según las estimaciones de los profesionales del sector, que se comenzarán a firmar los primeros contratos. La intención, explicaron fuentes del Consejo Rector, es que, con los contratos en la mano, las productoras valencianas puedan comenzar a trabajar ya antes de verano y así se pueda disponer de las primeras producciones propias de la nueva televisión lo antes posible.