La exposición está organizada originalmente por la Asociación de Amigos del Castillo de MontjuïcALICANTE. Edad Media. La gran flota surca el mar para desembarcar en territorios muy alejados de casa y conquistarlos en su nombre. Unas Joyas de la Corona que después deberían proteger para mantenerlas alejadas de ejércitos enemigos. No, no se trata de la última Targaryen amenazando en Juego de Tronos, ni siquiera de un cuento pirata, sino de Historia. Para entender esta narración deberán adentrarse en la Sala Taberna, mimetizada dentro del alicantino Castillo de Santa Bárbara, "un maravilloso espacio que alberga diferentes grafittis en su magnífica bóveda de cañón que se sitúa cronológicamente en esta misma época", contextualiza la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, María Dolores Padilla. Y es que esta localización que huele a historia alberga desde el viernes, 17 de mayo, la exposición Las fortificaciones de los Antonelli. Siglos XVI-XVII, organizada originalmente por la Asociación de Amigos del Castillo de Montjuïc, en Barcelona.
La muestra está protagonizada por la familia Antonelli, aunque haciendo especial hincapié en el patriarca, Giovani Batista Antonelli, "una insigne saga que realizó importantes obras de ingeniería militar adaptadas al arte de la guerra", explica la edil, "principalmente en cuanto a los avances y al poder destructor de la artillería desde los inicios de la Edad Moderna". La familia, originaria del noroeste de Italia, estuvo al servicio de la monarquía española a partir de la segunda mitad del siglo XVI hasta finales del siglo XVII y construyó fortificaciones con el objetivo de preservar los territorios que España había conquistado en el siglo XV en Europa, Marruecos y, cruzando el interminable Atlántico, América.
"Eran tiempos de expansión y beligerancia por mantener el poder hispano en todo el mundo, por lo que la mejor defensa de las plazas era absolutamente necesaria", justifica Padilla. Un poder que se extendía a lo largo de una gran colección de territorios repartidos por el globo, un paraíso terrenal que llegó a constituir el Imperio español entre los siglos XVI y XIX, tras el descubrimiento de América, momento en el que España conquistó grandes extensiones de terreno. Es por este motivo por el que "la exposición está centrada, principalmente, en el reinado de Felipe II, ese en el que nunca se ponía el sol", aporta el jefe del Departamento de Patrimonio Cultural, José Manuel Pérez.
Esta muestra cultural e histórica está dividida en dos apartados dentro de la misma sala, el primero de ellos dedicado a "temas más mediterráneos y atlánticos, mientras que el otro se orienta más a asuntos caribeños y sudamericanos, con motivo de la expansión de la corona española a las Américas", repasa Pérez. Y recuerda que "aunque a nosotros (los españoles y españolas) el que más nos afecta es Giovani Batista Antonelli, la exposición está dedicada a toda la familia".
María Dolores Padilla, concejala de CulturaLa figura masculina de la que supone el cabeza de este apellido se ha plasmado en un roll up que también habita la sala, un diseño que cuenta con ciertas particularidades, porque "al no disponer de la cara de Giovani, el dibujante del cartel -un ilustrador "magnífico", según lo califica Pérez- la ha cubierto con su gorra de época y con un traje de terciopelo que prácticamente se puede tocar", menciona el jefe del Departamento. Una imagen que nada tiene de casual, en la que se ha cuidado hasta el mínimo detalle, ya que "el plano que se observa en la mesa es precisamente el plano original conservado en el Archivo General de Simancas", expone, el cual fue diseñado por otra figura histórica, aunque como no sabía dibujar "fue Antonelli quien llevó a cabo esta tarea. Es de los mejores planos históricos que tiene el Castillo de Santa Bárbara", considera Pérez.
Esta muestra cultural está compuesta por un total de 70 paneles "que estrenamos nosotros y que ha diseñado expresamente la Asociación de Amigos del Castillo de Montjuïc", revela, una exposición "que hemos preparado con mucho cariño con el fin de mostrar el patrimonio del que nos sentimos orgullosos", añade la concejala. Las imágenes seleccionadas para representar la historia alicantina dentro del contexto de los Antonelli "han sido aquellas que ponían en valor y que, sobre todo, mostraban la mayor extensión de fortificación del Castillo de Santa Bárbara", se enorgullece Padilla.
Es la primera vez que el artista ilicitano Antonio Ródenas realiza una muestra con sus dibujos originales.
