MADRID. En el día de hoy vamos a echarle un vistazo a uno de los principales componentes del sector salud en el panorama internacional como es Grifols.
La compañía del sector salud con presencia internacional mantiene una tendencia alcista de largo plazo pero se está viendo afectado -como todo el mercado- por las caídas derivadas de la incertidumbre del coronavirus y el petróleo.
Esta es la imagen de largo plazo de la compañía:
Se puede ver una clara tendencia alcista del valor si bien las últimas semanas ha corregido ligeramente dada esta incertidumbre. Es obvio que un gráfico de ese calibre pone de manifiesto una buena gestión de la compañía elevando el valor para el accionista de forma prácticamente constante salvo por las caídas de la crisis de 2008.
Atendiendo a los resultados fundamentales de la compañía en el corto plazo, año 2019, podemos comprobar que ha existido un crecimiento interesante en las principales variables económicas. En concreto, las ventas crecían hasta los 5.100 millones de euros en 2019, a doble dígito respecto 2018. El beneficio crecía en torno al 14,2% y el Ebitda un 17,3%. En términos netos, la compañía ganó el pasado ejercicio 625 millones de euros como beneficio neto, mejorando las expectativas del consenso de mercado en torno a los 616 millones.
No obstante, el principal problema de Grifols en el corto plazo son las necesidades operativas de fondos que hacen referencia a las inversiones necesarias para el negocio operativo. El problema radica en que está en un ratio elevado y teniendo en cuenta el nivel de apalancamiento de Grifols (4,5 veces Ebitda) puede suponer un problema en el corto plazo para encontrar la financiación necesaria y no incrementar el ratio de apalancamiento.
Si bien en términos de crecimiento la compañía sigue en una senda positiva para la misma, el principal riesgo se sitúa en el endeudamiento y la alta necesidad de fondos operativos para el correcto funcionamiento del negocio. No obstante, el equipo directivo de la compañía trasladaba el férreo objetivo de continuar creciendo en ventas y beneficio, y a la vez intentar reducir el nivel de apalancamiento que actualmente mantiene.
En el corto plazo esta es la imagen de Grifols:
Actualmente la cotización se encuentra afectada por la incertidumbre mundial por el coronavirus y por las caídas generalizadas del mercado.
Los siguientes niveles a observar en el corto plazo son la zona de los 26,5 euros por acción como siguiente soporte. En caso de una recuperación generalizada en el corto plazo podríamos volver a ver la acción recuperar los 30 euros por acción, que coincide con la estimación del precio del consenso de mercado.
Ignacio Serrats es analista de XTB