VALÈNCIA. La Conselleria de Hacienda ya tiene perfilado un plan B para compensar los inconvenientes que le ha supuesto el retraso sobrevenido en la reforma de su sede central en València. Tal y como avanzó este periódico, la ruptura del contrato con Acciona, la constructora ejecutaba los trabajos que deberían haber finalizado antes del verano, retrasará varios meses la finalización de la obra e impedirá el regreso de más de cien funcionarios del departamento que dirige Vicent Soler que tuvieron que ser reubicados en diferentes dependencias de la Generalitat, en principio de manera temporal.
La Conselleria de Hacienda ya está preparando una nueva licitación, pero los técnicos aún tienen que calcular el importe de los trabajos pendientes, para los que se calcula que harán falta al menos otros cuatro meses más solo para rematar primera fase –la que afecta al Palacio de l’Almirall–. Ese tiempo, sumado al proceso administrativo para adjudicar el nuevo contrato, dilatará tanto el proceso que el departamento ya ha comenzado a pensar en posibles alternativas.
Una de ellas implica reactivar la ansiada recuperación del Palau de los Boïl d'Arenós, el edificio en el que actualmente se encuentra la sede de la Bolsa de Valencia. Se trata de una idea que siempre ha rondado por la mente del conseller Soler y en la que se ha trabajado prácticamente desde toda la pasada legislatura, pero existen condicionantes que dificultan que pueda llevarse a cabo.
El inmueble, un recinto palaciego declarado Monumento Histórico Artístico, es propiedad de la Generalitat, pero lo tiene cedido a Bolsas y Mercados de España (BME) de forma gratuita hasta el año 2025. Fuentes de BME consultadas por este periódico reconocen que la negociación que mantienen desde hace meses con la Generalitat para su salida del edificio continúa en marcha, pero sin que se haya concretado nada.
El deseo de Hacienda es trasladar al edificio en el que actualmente se encuentra la Bolsa de Valencia al conocido como banco público de la Generalitat, la denominación no oficial con la que se conoce al Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) desde que parte de sus funciones se desgajaron del seno de la Generalitat para comenzar a operar como una entidad de derecho público.
El director del IVF, Manuel Illueca, reconoce que las necesidades de espacio del IVF van a ir a más en el futuro e incluso reconoce que tanto por sus características estructurales como por su carácter "emblemático”, el edificio de la Bolsa de Valencia cumple los requisitos que se desean para ubicar el organismo. De esa manera podría compartir ubicación con el personal de la Sociedad de Garantías Recíprocas (SGR), que actualmente paga un alquiler por un entresuelo en la plaza Porta de la Mar.
La mudanza del IVF dejaría libre el espacio que ahora se ubica el IVF en la plaza de Nápoles y Sicilia, a escasos metros de los edificios en los que se ubican la mayoría de dependencias de la Conselleria de Hacienda, incluido el Palau de l'Almirall. Se trata de un edificio de varias plantas que, de quedar disponible, permitiría reagrupar allí al personal de todas las direcciones generales que ahora está desperdigado con motivo de la reforma de los edificios de la calle Palau.
El contratiempo que ha supuesto el retraso en la reforma de la sede de la Conselleria de Hacienda implica que el traslado de funcionarios que iba a ser temporal se alargue sine die, con las incomodidades que ello implica.
Las obras en el Palau de l'Almirall obligaron a reubicar la dirección general de Presupuestos en el inmueble conocido como la Cigüeña, en Amadeu de Saboya. Por su parte, el personal de la Intervención y el de la Dirección General de Tecnologías de la Información trabaja desde entonces en la Ciudad Administrativa 9 d'Octubre.
Aunque no se ha tenido que trasladar con motivo de las obras en la calle Palau, la operación para recuperar el edificio de la Bolsa de Valencia y liberar su sede actual en la Plaza de Nápoles y Sicilia también permitiría albergar a la Dirección General de Tributos y Juego, que actualmente está en un edificio del PROP en la calle Gregori Gea.
Con ello, la práctica totalidad de altos cargos y funcionarios de la Conselleria de Hacienda se reagruparía en el entorno del edificio histórico de Hacienda, ya que la Secretaría Autonómica de Modelo Económico y Financiación, al frente de la cual está María José Mira, está ubicada a escasos metros de donde ahora está instalado el IVF.