'vuelta al cole' política

Gobernantes veinteañeros

El panorama político surgido de las pasadas elecciones locales dejó algunas situaciones singulares en la Comunitat Valenciana, donde se encuentra gran parte de los ediles y alcaldes más jóvenes. Los hay de todos los colores y por tanto con todo tipo de opiniones. Ahora, con el inicio del curso político y después de los cien días de gracia que otorga el verano, empieza para ellos la hora de la verdad

20/09/2019 - 

VALÈNCIA. De entre todas las convocatorias electorales, los comicios locales son habitualmente los que mayor porcentaje de participación ciudadana aglutinan. Una señal de que la esfera local es la que más interés suscita. En gran parte, porque la gestión de los ayuntamientos y de los organismos públicos de ámbito municipal es la que más directamente percibimos en el día a día. Además, siempre se ha dicho que en las elecciones locales importa más la persona que la marca. Y es que esa política cotidiana es también la que mayor acceso y participación ofrece a las personas de a pie. Aquellos que no se plantean hacer de eso una profesión, sino que supuestamente se involucran por convicción moral y con el ánimo real de hacer cosas por sus vecinos o por la sociedad, poniendo su granito de arena. 

Es ahí, donde encontramos un abanico más amplio y heterogéneo de personalidades. Unas identidades que con mayor facilidad se plasman en la toma de decisiones políticas y en las gastiones públicas. La lucha contra la homofobia o la transfobia, la defensa de los valores ecofeministas o la regeneración política vienen abanderadas por nuevas generaciones de concejales, en su mayoría muy jóvenes, que ahora tienen la palabra, en ocasiones con opiniones más que llamativas. El panorama se volvió a redibujar el pasado mes de abril con la última voluntad de los votantes depositada en las urnas. Esos nuevos equipos de gobierno surgidos de aquellas elecciones inician ahora el nuevo curso político, después de los cien días de gracia que ha supuesto la temporada estival. Empieza la hora de la verdad.

Alex Waylett es edil en Sagra, acaba de cumplir diecinieve años, es el primer concejal trans de la comarca de la Marina Alta de Alicante. Nacido en este pequeño municipio, Waylett es de padre inglés y de madre castellano-manchega. Pese a esta mezcla, habla perfectamente el valenciano. También su padre, que, asegura, habla mejor el valenciano que el castellano. En Sagra viven unos cuatrocientos habitantes y eso no ha supuesto ningún problema en su aventura política. De pequeño quedaba con sus amigos en la puerta de sus casas y jugaban por la tarde al fútbol. Uno de sus mejores amigos es precisamente el hijo de la alcaldesa, Maite Roselló, la que le llamó para implicarse en el proyecto de Gent per al Canvi, un partido independiente que ha arrebatado el poder al PP en la localidad. «Estuve una semana pensándolo», reconoce al ser preguntado por cómo entró en política. Una opción que, según destaca, tomó «porque siempre se critica desde fuera, cuando realmente hay que ponerse en la piel y verlo todo desde dentro». Le encanta «la posibilidad de ayudar a los vecinos y poder aportar algo nuevo». Ahora lo podrá hacer desde las delegaciones de Fiestas, Juventud, Igualdad de Género y Colectivos. 

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«Desde pequeño supe que era un niño», afirma. De hecho, a los dos años ya se lo dijo a su madre y recuerda que sus muñecas Bratz tenían todas un pene dibujado. Otro momento que recuerda especialmente es cuando tuvo que hacer la comunión. Waylett lo recuerda evocando las palabras que le dijo una amiga: «Tú querías ir de marinero». Pero le tocó ir con el traje de chica. El cambio profundo lo dio en 2016, cuando se rapó una gran melena rubia. «Se lo dije a mis padres y a mi familia». Y no hubo problema ya que «es algo que normalmente se suele saber desde siempre», explica. Los cambios internos en su cuerpo comenzaron en 2017, con las hormonas, y hace un mes se hizo la mastectomía. «Todo está correcto y bien», asegura. Ha pasado unas cinco operaciones, aunque no solo para el cambio de sexo, sino también por practicar deporte: rugby, fútbol, equitación y pilota valenciana. Fue pelotari en el equipo femenino de Beniarbeig y, siendo él jugador, alcanzaron lo más alto de la clasificación siendo campeones. 

* Lea el artículo completo en el número de 59 de la revista Plaza

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