Génova toma nota del descontrol en el PPCV para actuar tras las elecciones madrileñas

VALÈNCIA. Los últimos acontecimientos acaecidos en el PPCV han conseguido que, al menos por unos instantes, la dirección nacional del partido que preside Pablo Casado desvíe la vista fuera del plano fijo de las elecciones madrileñas y la dirija a la Comunitat Valenciana.

Las tres candidaturas inicialmente presentadas al congreso provincial de Castellón -finalmente aglutinadas en torno a Marta Barrachina, la apuesta de Madrid- o el paso adelante dado por el alcalde de Ayora, José Vicente Anaya, para postularse como nuevo líder del PPCV, han captado la atención del secretario general del partido, Teodoro García Egea, y le han convencido, así lo afirman distintas fuentes de la formación popular, para actuar a corto plazo en la Comunitat Valenciana.

"Así no podemos seguir. Estamos dando nuestra peor imagen en el peor momento del Botànic", comentaba un alto cargo del partido a este diario, en referencia a los últimos movimientos internos.

La cuestión, a día de hoy, es la siguiente: en la dirección nacional consideran que el ciclo de Isabel Bonig como líder regional está agotado. Fuentes populares aseguran que se han puesto sobre la mesa diversas fórmulas para una salida pactada con la presidenta que podrían incluir su continuidad como portavoz en Les Corts y un puesto en las futuras listas al Congreso de los Diputados. 

Esta vía se ajusta perfectamente al deseo de García Egea de situar como relevo en el liderazgo al presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, dado que al no ser diputado no podría ejercer de síndic en el hemiciclo. Así, Bonig, parlamentaria con experiencia, podría continuar con la oposición en Les Corts mientras Mazón se va asentando como actor principal del PPCV frente al socialista Ximo Puig.

Ahora bien, la presidenta regional no está por la labor. Firme defensora de las primarias vigentes desde hace pocos años en el PP, ha reiterado públicamente su deseo de presentarse a la reelección y que la militancia decida quién debe liderar el partido. Una circunstancia que incomoda a Génova que, por un lado, quiere evitar en lo posible los procesos con varias candidaturas y, por otro, no quiere someter a su favorito para el puesto, Carlos Mazón, a una prueba de esas características. Una postura que, tal y como indican fuentes próximas a Bonig, resulta paradójica cuando el propio Pablo Casado se convirtió precisamente en presidente del PP gracias a unas primarias en las que no partía como favorito.

En cualquier caso, la tensión se va elevando en las últimas semanas. El paso adelante dado por el alcalde de Ayora, José Vicente Anaya, para postularse como aspirante a liderar el PPCV ha causado fuerte revuelo especialmente en Valencia. El presidente provincial, Vicente Mompó, amagó este jueves con destituirlo de su cargo en la dirección del partido al considerar que su prioridad sería ahora la campaña y no sus tareas orgánicas. Finalmente, con la promesa de Anaya de dejar el cargo cuando se convocara el congreso, no llegó la sangre al río, aunque el malestar flotaba en el ambiente al conocerse movimientos del alcalde de Ayora para atraerse a apoyos cercanos a Mompó, cuyo nombramiento fue en su día impuesto por Génova.

Sin embargo, fuentes populares aseguran que fue la propia dirección nacional del partido quien se ocupó de frenar 'in extremis' la destitución de Anaya, pese a que existe malestar con su paso adelante cuando el congreso ni siquiera está convocado. ¿El motivo? La prioridad sigue siendo para Casado y García Egea no generar ningún conflicto hasta que pasen las elecciones madrileñas. De hecho, dirigentes del PP admiten que el proceso para el congreso provincial de Castellón ya había causado nervios en Génova por temor a que se trasladase a la opinión pública un escenario de conflicto en el partido.

Ahora bien, una vez pasen estos comicios y, especialmente, si Isabel Díaz Ayuso consigue el éxito que esperan en la dirección nacional, las fuentes consultadas sí apuntan a que podría abordarse la situación en la Comunitat. Así, el propio Pablo Casado planea acudir al congreso provincial de Castellón para asistir a la proclamación de la nueva presidenta, Marta Barrachina, y en la siguientes semanas, sí se estudian dar más pasos en lo que se refiere al próximo cónclave del PPCV. Especialmente, tras el clima de descontrol que viene generándose en los últimos tiempos en la formación popular de la Comunitat Valenciana.