SANT JOAN D'ALACANT. La directora general de Sector Público y Patrimonio, Isabel Castelló, ha firmado el acta de replanteo con la que se da inicio al derribo de la antigua residencia de tiempo libre Eduard Alted de Sant Joan. La actuación, que comenzará el lunes 8 de marzo, tiene prevista la demolición y la adecuación de la parcela. Se verán afectados un total de seis edificios más las instalaciones deportivas.
Castelló ha visitado el ayuntamiento del municipio y el entorno de la antigua residencia junto al alcalde de la localidad, Jaime Albero (PSOE); la edil de Urbanismo, Eva Delgado (PSOE), y responsables de la obra, y ha incidido en que con esta actuación "se atiende una reivindicación histórica del municipio y de sus vecinos, puesto que su evidente deterioro desde que fuese abandonada en 2006 se había convertido en un problema de seguridad y salubridad".
La Generalitat adquirió por transferencia del Estado el inmueble conocido como 'Residencia de tiempo libre' en San Joan d'Alacant y que se mantuvo en uso hasta el 30 de septiembre de 2006. Desde esa fecha, tal y como ha recordado la responsable de Patrimonio, "el edificio ha permanecido vacío y sin vigilancia y ha sido objeto de numerosos actos vandálicos, lo que ha provocado que su estado actual ya no cumpla con los requisitos mínimos para garantizar la seguridad de los vecinos".
De esta forma, el Consell acordó con el Ayuntamiento el proyecto de demolición de este conjunto de edificios que incluye tanto el derribo de todos los edificios construidos (edificios, estructuras de cubrición, casetas de instalaciones, etc.) como la limpieza y desbroce de la parcela y su posterior vallado perimetral.
Las actuaciones fueron adjudicadas el pasado mes de octubre a la empresa BECSA por un importe total de 462.292,09 euros (IVA incluido) y deberán estar finalizadas en un plazo máximo de seis meses. La actuación consistirá en el derribo de los edificios existentes, la nivelación y explanación de la parcela y la reforma de la valla perimetral, eliminando los puntos de acceso que han surgido con el tiempo.
La parcela de forma irregular tiene un total de 12.844 metros cuadrados de superficie, los inmuebles objeto de demolición son construcciones aisladas en el interior de la parcela. Se trata de dos edificaciones principales, cuatro edificaciones auxiliares, zonas de circulación, zonas verdes, piscina en estado de abandono y una pista de tenis y datan de 1975. La superficie total construida a demoler es de 6.675,18 m². La empresa encargada tratará gran cantidad de los residuos en la propia parcela, reutilizándolos después para la nivelación o el relleno de la piscina.
"Con este derribo no solo eliminamos los problemas de insalubridad e inseguridad, sino que revalorizamos un inmueble de indudable proyección económica y de servicios. Seguiremos trabajando con el Ayuntamiento para diseñar el futuro destino de las instalaciones", ha señalado Isabel Castelló durante su visita a la localidad para la firma del acta.
La empresa adjudicataria deberá ahora proceder al derribo completo de las instalaciones y a la eliminación de todos los elementos que contengan amianto, así como a la nivelación de los terrenos (incluyendo el relleno del vaso de la piscina), que se hará a través del machaqueo de los escombros inertes procedentes de la propia residencia, lo que supone una solución sostenible al problema del tratamiento de gran parte de los residuos.
Igualmente deberá procederse a la tala de todos los elementos vegetales inestables que se hallen en el recinto, así como a la retirada de los árboles y arbustos muertos que se encuentren en el perímetro de esta parcela de más de 11.200 metros cuadrados.
Historia de la residencia
Fue en 2006 cuando la Generalitat Valenciana, gobernada por el Partido Popular, decidió cerrar el inmueble y abandonarlo a su suerte. En 2012 el Ayuntamiento de Manuel Aracil (PP) puso en marcha una operación junto a la Universidad Católica de Murcia que consistía en la cesión del suelo para construir una universidad privada con un coste para los vecinos de Sant Joan de 1.185.000 euros. Esta operación fracasó en 2014, quedando una deuda para el Ayuntamiento en modo de aval que supuso un coste de 1000 euros al mes para las arcas municipales.
En julio de 2015, el gobierno socialista de Jaime Albero devolvió la titularidad a la Generalitat Valenciana e inició la negociación para la condonación en su mayor parte de la deuda que, tras una larga tramitación con la Generalitat, consiguió en 2018. Albero ha destacado “la importancia del inicio del derribo, dando solución así a un problema que se arrastraba desde hace años y que ha supuesto un coste económico importante para el Consistorio”.
Durante los más de cinco años que estuvo en activo el aval, el Ayuntamiento abonó casi 80.000 euros, lo que sumado al coste de la degradación del edificio supone un total de 270.000 euros.
Mientras estuvo el complejo bajo custodia del Ayuntamiento se produjo la degradación del edificio, motivada por la decisión del gobierno de Manuel Aracil (PP) de no mantener la seguridad privada que hasta 2013 pagaba la Generalitat.
Ya en 2019 se inició el proceso de derribo del edificio por parte de la Generalitat, firmándose hoy el acta de replanteo, lo que supone el pistoletazo de salida para el inicio de la obra de derribo, que ya cuenta con licencia por parte del Ayuntamiento.
“La licencia esta concedida por parte del Ayuntamiento y los trabajos en la parcela empezaran este mismo lunes con la limpieza y cribado de los residuos, es una magnifica noticia para nuestro pueblo”, ha declarado Eva Delgado.
Antigua Residencia de tiempo libre Eduardo Alted
La parcela donde se ubica la antigua 'Residencia de tiempo libre Eduardo Alted' constituye una manzana completa y se sitúa en Sant Joan d'Alacant, en la calle San Antonio, 147 junto al polideportivo municipal.
En el interior de la parcela existen dos edificios de tres y cuatro alturas destinados a habitaciones y conectados con otra construcción de menor altura que albergaba los servicios comunes como cocinas, cafetería, recepción, etc. Igualmente, se encuentran diversas edificaciones menores vinculadas a instalaciones, un aparcamiento con estructuras metálicas como cubierta, una piscina y pista de tenis.
