CASTELLÓ. Si por algo se han caracterizado las encuestas culturales en la última década ha sido por cómo han mantenido siempre su mirada fija en la crisis financiera que se desató en 2008. El estallido fue tal que las secuelas que dejó marcaron un antes y un después en la sociedad. Desde entonces, las artes escénicas, el audiovisual y la música han ido dando pequeños pasos hacia adelante, y muchas veces hacía atrás, para lograr volver a los niveles de consumo que se manejaban en su época más “dorada”. Sin embargo, todavía no nos hemos recuperado. Así lo garantiza el Anuario SGAE 2019 que refleja periódicamente los niveles de consumo cultural en España: “Diez años después, la mayor parte de los indicadores mejoran, aunque todavía no alcanzan las cifras anteriores al ‘boom’, pero podemos hablar de que el sector cultural experimenta estabilidad”, subrayaba el presidente de la Fundación SGAE, Juan Ramón Arnaiz.
En el caso de la Comunitat Valenciana no resulta sorprendente si decimos que es la música en vivo la que suscita mayor interés entre los ciudadanos. Más de 2.500.000 millones de personas asistieron a algún concierto y macrofestival en 2018, siendo la cuarta autonomía con más usuarios. Pero además, la Comunitat Valenciana se ha colocado en la tercera posición del ránking de autonomías que más dinero recaudaron en este tipo de citas, un puesto que hasta ahora ostentaba Andalucía. Sin embargo, la cultura del directo no es la única a la que los valencianos miran. También el teatro mantiene su crecida. ¿Pero, sabían que somos los que más televisión consumen de toda España? Este dato, que quizá algunos desconocían, nos lleva a desgranar el estudio de la SGAE, sector por sector, para conocer los verdaderos 'crushes' de los valencianos.
El interés por las artes escénicas es cada vez mayor desde 2016, año en que el que se frena el tremendo descenso de espectadores y actuaciones que estaba habiendo desde el estallido de la crisis. En cuanto a la Comunitat Valenciana, en solo un año la oferta ha crecido 2,1 puntos, la asistencia un 3,2 y la recaudación un 2,4. Una crecida que es porcentualmente mayor que los ascensos estatales. Además, continúa siendo el teatro la niña bonita de las escénicas, al aglutinar el 95,5% de la oferta, el 94% de la asistencia y el 92,6% de recaudación; es así la tercera autonomía del ránking, por detrás de Madrid y Cataluña. El número total de espectadores fue de 1.486.354.
En cuanto a la danza, han habido un 5% de espectadores más y se han alcanzado los 59.985 espectáculos. Sin embargo, esta disciplina continúa ingresando solo el 5,4% del total, como ya hacía en 2017. Por otro lado, la ópera y la zarzuela acumulan las mayores subidas respecto a 2017: en un año la asistencia ha subido 5,2 puntos y la recaudación 3,2.
Música clásica
Antes de entrar en materia con los grandes festivales, hace falta señalar que la Comunitat Valenciana también resalta en otros géneros que se consumen fuera de este tipo de citas. En concreto, es aquí mismo donde más conciertos de música clásica se realizan del todo el país. De las 15.776 funciones celebradas en 2018, el 16% (2.519) fueron en la Comunitat Valenciana, situándose por delante de Madrid (2.261), Andalucía (1.936) y Cataluña (1.849). No obstante, no son los valencianos los que más música clásica consumen, sino los madrileños que con el 19,4% sobre el total, aglutinan 200.000 espectadores más. Y consecuentemente tampoco es aquí donde más se recauda. Con un 5,4% del total, la Comunitat Valenciana se coloca en la cuarta posición, por detrás de Madrid, Cataluña y el País Vasco.
Música popular
Donde sigue dominando la Comunitat es en la esfera de los grandes festivales. El top 10 de 2018 deja de nuevo al Arenal Sound de Burriana como la cita más multitudinaria, alcanzando los 300.000 usuarios. Algo que podría repetirse esta temporada, puesto que el lunes pasado agotó 50.000 pases solo en un par de horas. Tras él, se sitúan el Medusa Sunbeach Festival (2º con otros 300.000), el Rototom Sunsplash (6º con 208.000) y el FIB (7º con 170.000).
A términos generales estas cifras vienen a decir algo que ya sucede desde hace un par de años, y es que la creciente recaudación de los conciertos de música popular se infla con los beneficios de los macrofestivales. Solo en la Comunitat Valenciana, el año pasado se recaudó un 4,3% más que en 2017, pero si incluimos lo obtenido por estas macrocitas el impulso es de más de un 12,2%. Además, el anuario apunta que la evolución es positiva en todos los indicadores. Sube en número de conciertos (+2,7) y en asistencia (+2,9).
Por lo que hace a la música que oyen los valencianos en conciertos, los grandes éxitos son el pop rock -como sucede de igual modo en el resto de España- con un 79,2%, la electrónica que ocupa el 5,7% y la música jazz (4,1%). "Rosalía ha sido la artista a través de la que pueden explicarse los más destacados movimientos en la industria musical en España. Empezando por la ambición de una generación de jóvenes artistas crecidos en la aldea global, que consumen similares productos culturales que un chaval de Chicago, Yokohama o Estocolmo y que desconocen las limitaciones impuestas por las fronteras", apuntaba en el anuario Luis J. Meléndez, redactor jefe de Mondo Sonoro.
Música grabada
Sigue siendo el mercado digital la válvula de escape de la música grabada. Mientras la música en streaming ha visto aumentados sus ingresos un 437,5% respecto a 2008, el formato físico ha perdido un 71,8%. Además dentro de él sigue destacando el CD, aunque la tendencia por el vinilo continua al alza, ya que en 2018 subió casi un 5% más. Así pues los álbumes más vendidos fueron Prometo de Pablo Alborán; La cruz del mapa de Manuel Carrasco; Camino, fuego, libertad de Pablo López; Geometría del Rayo de Manolo García; y El mal querer de Rosalía.
Cine
El cine, que acumula perdidas en picado desde 2008, ha sorprendido en la Comunitat Valenciana. Al contrario de lo que ocurre con los totales españoles, el número de sesiones ha aumentado (+0,5), también la asistencia (+2,8) y la recaudación (+2,3). Mientras que en la media nacional han habido perdidas en todos los indicadores. Las sesiones bajan un 1,1 y las entradas y recaudaciones un 2,5, pese a que se proyectasen 82 películas más que en 2017. El problema parece ser que, aunque la piratería continúa descendiendo, la frecuencia de asistencia baja y, en consecuencia, la recaudación se ve mermada. El año pasado se obteniendo únicamente 14,9 millones de euros.
Por lo que hace a los cines valencianos, de nuevo a la contra, la recaudación sí creció (+2,3). En Alicante y Valencia, un mismo espectador se compró entre dos y tres entradas en un mismo año, y en Castellón entre una y dos. Además, el precio medio de la entrada en 2018 se situó en 5,74 euros y el gasto medio anual fue de 12,39 euros. Igualmente, por lo que hace a las mismas infraestructuras, las CCAA que aglutinan mayor número de cines son Cataluña, Andalucia y la Comunitat Valenciana, que cuenta con 101 salas (tres más que el año anterior). Aunque de estas solo diez pertenecen a Castellón; Alicante abarca 43 y València 48.
No se puede hablar del audiovisual sin pasar también por el vídeo. El mercado físico se complementa, y en muchas ocasiones sustituye, cada vez más por el streaming. "Las fronteras del cine se han abierto. Queda atrás ese tiempo en el que tan solo llegaba un 4% de la producción cinematográfica mundial a través de nuestras carteleras", constata el anuario. Es por eso que pese a que el mercado del DVD y Blu-ray ha perdido mucho fuelle, en 2018 el 40,2% de la población declaró haber visto algún archivo audiovisual en la última semana, una práctica que ha aumentado en 12 puntos porcentuales en tan solo cuatro años.
Televisión
En cuanto a la televisión la cosa cambia. La media del consumo tradicional vuelve a bajar, por sexto año consecutivo, hasta los 216 minutos diarios por persona. Incluso la Comunitat Valenciana, autonomía que se mantiene en cabeza de consumo, pierde cinco minutos en relación a 2017. Aun así, alcanza una media de 241 minutos, veinte más que a nivel nacional. Además, nuestra autonomía es la que más novedades presentó el año pasado con la apertura de À Punt TV, canal que abarca el 1,3% de audiencia. Ahora bien, el "trono" sigue siendo como no para Telecinco, Antena 3 y La 1. Aunque los verdaderos agitadores de los hogares fueron- y son- las plataformas de pago Netflix, HBO y Amazon Prime Video.
El consumo de podcast aumenta cada vez más y España está entre los primeros países de la lista. Sin embargo, en este caso la Comunitat Valenciana se desinfla y se sitúa tres minutos por debajo de la media. Los valencianos escuchan unos 96 minutos diarios de radio -pierde dos en un año-, mientras que a nivel nacional se alcanzan los 99 minutos por persona. Así, únicamente consumimos más radio que Galicia, el resto de autonomías se sitúan por encima. Igualmente, sigue siendo la franja matutina la que más atrae a los oyentes: entre las 8:00 y las 11:00, y de lunes a domingo.
Por último, los videojuegos experimentan una mutación de soportes parecido al de la música. Y es que el mercado físico ha registrado un 40,6% menos en la última década, mientras que el digital subió un 43,5% respecto al 2017 y casi triplicó la cifra de 2014. Solo hay que pararse a mirar fenómenos como el Fortnite para apreciar este cambio de escenarios. Además, a la gente le sigue gustando consumir videojuegos, solo hay que compararlo con otros sectores para entender que mientras solo un 4,5% de personas compran música y un 38,7% va al cine, el 56,8% restante lo ocupan los videojuegos. El sector ingresó 1.530 millones de euros en España en 2018.