VALÈNCIA. El conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España (Carcaixent, 1974), se reunió días atrás con Valencia Plaza para analizar cuestiones relacionadas con el departamento que dirige y la nueva estrategia a seguir ante los cambios que el coronavirus ha provocado en el día a día, con especial incidencia en la movilidad.
No obstante, también abordó la gestión del Gobierno en esta crisis sanitaria y la posibilidad de que las tensiones en el Congreso puedan trasladarse al Consell del Botànic. "Yo hago una valoración positiva de la actuación que ha tenido el Gobierno de España, la Generalitat y muchos ayuntamientos, pero es evidente que se han cometido errores", subraya.
-¿Cómo cree que está siendo la gestión del Gobierno en esta crisis sanitaria?
-Yo creo que lo primero que tenemos que saber es que es una crisis sin precedentes y una realidad para la que nadie estaba suficientemente preparado ni se tenía todas las respuestas. Es muy fácil juzgar y criticar determinadas decisiones a toro pasado. Yo creo que el Gobierno de España, la Generalitat y muchos ayuntamientos se han enfrentado a decisiones que eran imposibles de pensar hace sólo unos meses. Yo hago una valoración positiva de la actuación que ha tenido el Gobierno de España, la Generalitat y muchos ayuntamiento, aunque es evidente que hay que ser muy humildes.
-¿Se han cometido errores?
-Es evidente que se han cometido errores y que no se han explicado muchas cosas a todos los niveles y a todas las administraciones. Yo creo que la clave de esto es ser humildes, reconocer los errores y hacer pedagogía de la dificultad que tiene muchas veces tomar decisiones y tener que volver un poco atrás. Entiendo el malestar en un momento de tanta tensión, pero yo creo que se está haciendo un buen trabajo a nivel global.
-Desde la oposición se ha cargado contra el Gobierno por tomar decisiones sin un diálogo previo. En cambio, en la Comunitat la comunicación ha sido más fluida. ¿Cree que eso ha ayudado a aliviar tensiones?
-Es verdad que yo veo en la Comunitat Valenciana una isla en positivo. A pesar de las diferencias ideológicas y las normales críticas, hay menos tensión en la sociedad valenciana y en los políticos de la Comunitat Valenciana, que a lo mejor en el Gobierno de España y en el Congreso de los Diputados. Espero que eso continúe. Es verdad que las decisiones que tenemos que tomar nosotros aquí no son las mismas que tiene que tomar el Gobierno de España, pero yo creo que tenemos que ser conscientes de que tenemos que estar juntos. No es momento de pensar en las próximas elecciones ni de buscar votos, sino de estar a la altura de las circunstancias desde el Gobierno, por supuesto, pero también desde la oposición.
-¿Cree que el cambio de posición de Compromís no apoyando el estado de alarma puede poner poner en peligro las relaciones en el Botànic?
-No. Compromís tiene que dar a sus votantes y a sus ciudadanos las explicaciones oportunas de su voto, que lo está haciendo. Ellos tienen sus razones, pero no creo que eso vaya afectar ni que haya afectado. Todos los partidos del Botànic somos conscientes de la responsabilidad que tenemos por delante. Es normal que este tipo de cosas pasen porque es la posición de un partido y no es la exposición de una institución. Y, en ese marco de normalidad y comprensión en un gobierno de coalición, considero que es una cuestión totalmente normal.
-Desde el Consell primero se planteó el paso de la desescalada por áreas de salud y luego por provincias. También se dijo en un principio que se iba a pedir pasar a Fase 2 y luego no se hizo. ¿No le parece demasiado vaivén?
-La crisis y la evolución de la pandemia es muy dinámica, casi diaria. Tenemos que ser conscientes de que las estrategias van cambiando en función de cómo evoluciona. Es verdad que si desde el punto de vista sanitario vemos que es mejor ser cautos y no pasar a la otra fase, ese ejercicio de responsabilidad es positivo. Igual que defendimos que estábamos preparados para pasar a la Fase 1. En este momento se ha hecho un ejercicio de reflexión, se ha hablado con los especialistas y han pensado que lo más razonable era ser cautos en este momento. Es mejor ir despacio que correr demasiado y tener que retroceder.
-Pero al final se crean unas expectativas a la ciudadanía que luego no se cumplen y generan pérdida de confianza en la clase política.
-Pido disculpas por estos cambios que se producen porque la situación es dinámica. Ya nos gustaría tener una hoja de ruta inalterable y saber el calendario de todos los pasos y poder decir con certeza que este día va a pasar esto, pero la realidad no nos permite ser así, sino que nos obliga a adaptarnos. Por eso me parece fundamental ser humildes. Yo creo que este no es momento de sacar pecho de nada. Es momento de ser humildes, pedir comprensión a los ciudadanos y avanzar con prudencia, porque lo primero es salvar vidas y no ganar unas elecciones.
-Con el rechazo de pase a la Fase 1 hace unas semanas hubo bastantes críticas al Ministerio de Sanidad por desconocer los criterios técnicos de esta decisión. ¿Ha habido falta de transparencia?
-Creo que este tema está resuelto. Ha habido múltiples reuniones. La gobernanza está funcionando mejor entre el Gobierno de España y las distintas autonomías. Siempre hay tensiones, es normal, porque estamos en un momento de mucha tensión y mucha responsabilidad por parte de todos. Igual que el Ministerio de Sanidad tiene presiones de muchas comunidades autónomas, también nosotros tenemos presiones de los ciudadanos y de los sectores económicos. Y, por tanto, la racionalidad en todo esto la tienen que poner los especialistas, que son los que nos tienen que decir en base a los datos y a esos criterios.
-¿Es más propicia la propagación del virus en la Comunitat Valenciana que en el País Vasco, donde el Gobierno ha dado vía libre al ejecutivo autonómico para regular la movilidad entre provincias?
-El País Vasco tiene, porque así lo ha decidido el Gobierno de España, una mayor flexibilidad a la hora de decidir dentro de su territorio ese marco de movilidad. Aquí, el propio presidente, Ximo Puig, también pidió que la Generalitat pudiera tener esa flexibilidad para decidir. El president ya ha dicho que también sería bueno incrementar esa gobernanza conjunta entre el Ministerio y la Generalitat para tener más capacidad de decisión en la desescalada.