VALÈNCIA. El presupuesto de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) incluye 40 millones de euros de fondos procedentes del plan de recuperación europeo que a día de hoy no puede gestionar. La entidad que dirige Andrés García Reche, que ha confiado el 80% de todo su presupuesto a la llegada de estos recursos, no está acreditada como organismo gestor de fondos europeos, pero ha solicitado que se le reconozca como ente gestor con la expectativa de ser reconocido a tiempo de poder conceder las ayudas financiadas con cargo a ese fondo.
Según explican fuentes de la AVI a preguntas de este periódico, la acreditación como ente gestor es una de sus grandes aspiraciones desde su creación en 2017, ya que su función fundamental es subvencionar proyectos innovadores en la Comunitat, muchos de los cuales están alienados con los objetivos que promueve la UE.
Sin embargo, la AVI aún carece de esa acreditación. En su momento, la Conselleria de Hacienda no pudo tramitarla porque el presupuesto del programa operativo 2014-20 ya estaba asignado y, además, la agencia todavía no disponía de estructura propia.
El plan de recuperación europeo REACT-EU contempla el reparto de 55.000 millones de euros para ayudar a superar la crisis mediante la financiación de proyectos transformadores en áreas como la digitalización o la transición verde.
Se trata de dinero nuevo que se añade al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y el Fondo Social Europeo (FSE) para el mismo período 2014-2020, ya que el objetivo es que estén disponibles rápidamente a fin de satisfacer las necesidades de la economía real en la superación de la crisis por el coronavirus.
En concreto, España dispondrá de 12.436 millones de euros y el Gobierno ha anunciado el reparto de 10.000 millones de euros entre las Comunidades Autónomas que llegarán mediante la reprogramación del programa operativo en vigor.
La condicionalidad de la UE incluye que la mayoría de estos fondos se tienen que ejecutar ya en 2021. Los proyectos que se certifiquen hasta junio son financiados al 100% por la UE, mientras que de ahí en adelante deben ser cofinanciados.
La revisión del marco financiero 2014-20 de la UE para destinar recursos nuevos ha abierto una nueva oportunidad para que la AVI pueda conceder ayudas con cargo a los fondos de cohesión, por lo que la entidad ha vuelto a solicitar su acreditación. Al respecto, las mismas fuentes señalan que existe el compromiso de la Conselleria de Hacienda de hacer "todo lo posible" para obtenerla.
"Se nos ha trasladado que no va a haber problema y vamos a disponer de capacidad para gestionar los fondos europeos. Hay margen de tiempo para que se nos acredite, ya que la justificación de los fondos es posterior y las acciones se pueden poner en marcha sin ser centro gestor", explican desde la AVI.
En este momento, los órganos dependientes de la Generalitat que participan en el programa operativo Feder, y que por tanto pueden dar ayudas con cargo al mismo, son la Dirección General de Universidad, Investigación y Ciencia; la Dirección General de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones; la Dirección General del Cambio Climático y Calidad Ambiental; la Dirección General de Administración Local; y la Dirección General de Investigación, Innovación, Tecnología y Calidad.
En el sector público, la única entidad acreditada actualmente para gestionar Feder es el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), dependiente de la Conselleria de Economía.
La gran mayoría de los 50 millones del presupuesto de la AVI de 2021 salen de los fondos de cohesión. La Conselleria de Innovación, Universidades y Ciencia, departamento al que está adscrita, aporta 9,9 millones de euros, pero el resto son del FSE y, sobre todo, del Feder.
Del primero salen 5,5 millones de euros para formación para personal investigador en fase predoctoral.
Por lo que se refiere a los 34,6 millones procedentes del Feder, la AVI ha previsto destinar 17 millones al Programa de Proyectos de I+D en colaboración entre Organismos de Investigación de la Comunitat; 5,6 millones a infraestructura y equipamiento científico tecnológico en las universidades valencianas y centros de investigación; y 3,2 millones a proyectos de I+D en colaboración entre Organismos de Investigación de la Comunitat, entre otras líneas.