VALÈNCIA. Bankia (BKIA) y CaixaBank (CABK) cerraron este viernes a la baja en bolsa, con caídas de un 4,76% y 2,18% respectivamente. Fuentes de mercado consultadas por este diario achacaron sendos descensos a dos aspectos -además de recogidas parciales de beneficios tras la subida que venían encadenando en las últimas fechas-: unas previsiones demasiado optimistas y la ecuación de canje.
Y precisamente esto último fue el propio Gonzalo Gortázar, el hombre fuerte de la nueva entidad, quien reconoció que tuvo que ver sobre las acciones de ambas entidades. Un "pequeño ajuste técnico" a su juicio, además del mal tono de la bolsa, fue lo que esgrimió ante los periodistas en el inicio de la rueda de prensa con motivo de la presentación del nuevo CABK.
Dicho ajuste se produjo al adecuarse la acción a la ecuación de canje fijado en 0,6845 acciones de CABK por cada una de BKIA, que se emitirán de forma ordinaria. De este modo, los titulares de la entidad presidida actualmente por Jordi Gual contarán con el 74,2% del capital del nuevo banco, mientras que sus 'colegas' de la que dirige José Ignacio Goirigolzarri tendrán el 25,8% restante.
Sin embargo, el CEO de CABK recomendó comparar de forma relativa la marcha bursátil de las dos entidades respecto al resto de la banca española. Y no le falta razón porque este 2020 está siendo especialmente negativo para las cotizaciones del sector, que ya venían cayendo en los últimos tiempos principalmente por la política de tipos negativos del Banco Central Europeo (BCE).
Para poner en contexto el mal tono del sector bancario en bolsa en lo que va de ejercicio basta decir que el Banco Sabadell (-66,56%) es la tercera cotizada más castigada de todo el Mercado Continuo -nutrido de 130 valores-, mientras que el que menos baja es BKIA (-18,91%) y la caída anual de CABK es del 27%. Y es que no es solo la política monetaria ultralaxa del BCE sino también la cada vez mayor competencia de la banca de 'agentes externos', la excesiva regulación y, entre otros aspectos por si faltaba alguno, el coronavirus.
Pero como bien argumentaron tanto Gortázar como Goirigolzarri, desde que se comunicara a la CNMV en la noche del 3 de septiembre las intenciones de fusionarse, ambas han cogido carrerrilla ascendente. Bankia se ha disparado un 32,4%, mientras que CaixaBank lo ha hecho un 11,2%. El Ibex 35 ha cedido un 1,1% en el mismo periodo de tiempo.
Subidas que hubieran sido de mayor calado -39,1% y 13,7% respectivamente- descontando los descensos de ayer, que han reducido hasta los 1.244 millones de euros la diferencia por capitalización bursátil que le sacan a BBVA. Así, la suma de CABK (16.293 millones) y BKIA (4.211 millones) alcanza los 16.293 millones frente a los 15.049 millones del llamado 'banco azul'. Por delante solo tienen al intratable Banco Santander (28.174 millones), que cede en el parqué este año un 54,55%.
Pero la bolsa ve la hoja de ruta del nuevo banco demasiado optimista, muy especiamente en el ahorro anual por las sinergias derivadas de la fusión (770 millones de euros), los ingresos de 290 millones al año y la mejora del beneficio por acción (28%). Los analistas de Bank of America (BoFA) no tardaron en pronunciarse al respecto. al manifestar que el objetivo de generar sinergias de ingresos de 290 millones de euros anuales en un horizonte de cinco años resulta "ambicioso, dada la experiencia de otras transacciones".
Cierto es que tanto las sinergias resultantes de la operación en costes (770 millones) como los costes de reestructuración de 2.200 millones presentados, sí están "en línea con sus expectativas". Pero no menos es que a los expertos del banco americano les "preocupa la fuerza del balance general de la entidad combinada", que tienen en cuenta "el alto nivel de activos dudosos netos, el crédito por impuestos diferidos, las pérdidas fiscales arrastradas y el doble apalancamiento de la compañía de seguros de CaixaBank".
Además, los expertos del BoFA que los cerca de 24.000 millones de euros en préstamos con moratorias así como el riesgo en las líneas de crédito con el Instituto Oficial de Créditos (ICO) "sugieren presión en el futuro en el capital y las ganancias". De ahí que recomienden "infraponderar" ambas entidades; mientras han calculado que el beneficio por acción esperado proforma para 2022 de CABK podría mejorar hasta los 0,22 euros, un 12% más respecto su estimación previa a la transacción, y su valor liquidativo por acción (NAV) crecerá un 5%, hasta los 3,6 euros.
Cuanto menos, tal y como comprobó este diario ayer de la base de datos pública de la CNMV, ni Bankia ni CaixaBank tenían ningún bajista con nombre y apellidos. O lo que es lo mismo: con una participación igual o superior al 0,5% a partir del cual hay que declararla para que el mercado lo sepa.
Durante el fin de semana del 12 al 14 de noviembre, los clientes de Bankia no podrán usar Bizum