VALÈNCIA. El director de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y desde 2013 asesor del Ministerio de Hacienda en materia de financiación autonómica, Ángel de la Fuente, es uno de los expertos que rechazan que las Comunidades Autónomas que han estado y están mal financiadas se beneficien de una quita –o transferencia estatal– que reduzca la deuda que tienen con el Estado. Se trata, como viene reclamando el Gobierno valenciano, de compensar la parte de la deuda provocada por la insuficiencia de recursos del sistema de financiación autonómica.
La negativa de este gurú de la financiación autonómica a una quita choca con su postura de hace 17 años, cuando en un informe señaló y cifró la deficiente financiación que había sufrido la Comunitat Valenciana –entre otras– ya en los años noventa, así como la necesidad de compensar el endeudamiento en que había incurrido por este motivo.
En aquel informe de diciembre del año 2000, titulado "Una propuesta de financiación territorial", De la Fuente proponía por parte del Estado "un único pago extraordinario que serviría para compensar a las regiones con menores dotaciones por habitante de capital público sanitario y educativo y para enjugar los déficits acumulados de financiación básica en relación con el promedio nacional".
No lo llamó "quita" porque no era una quita, ya que la deuda de las CCAA no era con el Estado, pero el resultado es el mismo, una transferencia del Estado a ciertas CCAA para las cuales "la compensación propuesta permitiría reducir la deuda autonómica acumulada en al menos un cincuenta por ciento y en algunos casos supondría su completa amortización".
La Comunitat Valenciana sería la más beneficiada en términos absolutos y una de las que recibiría una cantidad –5.454 millones de euros– por encima de la deuda que tenía la Generalitat en 1999, que era de 3.773 millones de euros. El documento publicado por Fedea incluía un cuadro con las aportaciones que recibirían, por orden de más a menos, la Comunitat Valenciana, Madrid, Cataluña, Andalucía, Baleares, Murcia, Asturias, Castilla-La Mancha, Extremadura, Cantabria y La Rioja. La tabla, en millones de pesetas, es la siguiente:
Como se aprecia en el enunciado, De la Fuente se refiere a las cifras como "volumen de deuda autonómica a asumir por el Estado en compensación por deficiencias en dotaciones". Y eso es lo que reclama ahora la Generalitat Valenciana, que el Estado asuma parte de su deuda, llámesele quita, compensación o mutualización. La propuesta del director de Fedea cayó en saco roto y el sistema de financiación autonómica aprobado en 2002 no contempló ninguna compensación.
Ángel de la Fuente participó, a propuesta del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la comisión de expertos que elaboró el año pasado una propuesta de nuevo modelo de financiación autonómica. El representante valenciano, Francisco Pérez –director del Ivie– emitió un voto particular reclamando una quita o compensación a la parte de la deuda provocada por la infrafinanciación, petición que la mayoría de los expertos rechazaba por el "riesgo moral" que a su juicio supone la condonación de deuda.
De la Fuente también emitió un voto particular con el catedrático de Hacienda Pública de la Universidad de Alcalá de Henares Manuel Lagares –también asesor del Ministerio– en el que se sumaban al rechazo a la quita pero asumían que "esta situación podría llegar a producirse", por lo que daban una serie de recomendaciones, entre ellas, que una quita de la deuda autonómica "debería realizarse de forma escalonada y condicionarse al cumplimiento por parte de las comunidades beneficiarias de una serie de objetivos previamente acordados de consolidación fiscal y cumplimiento presupuestario".
Militantes de Madrid, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla y León, Galicia y Extremadura reclaman un sistema justo y multilateral