Salvador Puigdengolas y Sergio Gordillo. VALÈNCIA. El encarecimiento en el coste de la energía y en las materias primas hace mella en el sector de la industria valenciana. Se trata de uno los principales retos a los que se enfrenta el sector, que teme por la disminución de los márgenes de las empresas en el corto plazo, lo que implica una menor capacidad de inversión, limita la producción y disminuye el nivel de competitividad en el mercado internacional.
Esta preocupación queda reflejada en el estudio del VII Observatorio Industrial, realizado por primera vez desde el inicio de la pandemia por el Colegio de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana (COIICV) junto con Improven. La mitad de los encuestados -el 85% representa a empresas valencianas- se muestran pesimistas en este sentido, mientras que un tercio expresa su inquietud por la situación del empleo en los próximos doce meses.
De este modo, la industria se enfrenta al reto de reducir costes y de generar valor, a la par que disminuye el margen. En este sentido, el socio director de Improven, Sergio Gordillo, advierte que, aunque la crisis sanitaria “está terminando”, comienza “una pandemia más económica” en la que, según vaticina, “habrá una criba de compañías que no tengan la capacidad de seguir invirtiendo”.
Esta situación se ve agravada por el hecho de que el 90% del entramado empresarial español está constituido por pymes, por lo que el tamaño se convierte en otro factor que influye en la capacidad de autofinanciación de las entidades, dado que las más grandes cuentan con mayor credibilidad a la hora de recibir préstamos de terceros y, en la misma medida, tienen una menor probabilidad de endeudamiento.
Así pues, los datos reflejan el descontento con respecto a la política de costes energéticos llevada a cabo por la Administración, que, según advirtió el socio director de Improven, la opinión de los encuestados “sería más crítica” si se hubiera realizado antes de la subida de la tarifa eléctrica. A ello se suma la reivindicación por parte de las empresas de reducir los trámites administrativos, que ralentizan su crecimiento.
A su vez, para generar valor, los miembros del gremio abogan por la potenciación de la transferencia tecnológica de universidades y centros de investigación a empresas privadas, dado que la innovación es un aliciente para “retener y atraer talento”. Del mismo modo, los datos instan a las empresas a invertir en la formación del personal y en reforzar los niveles de transparencia, pues un 66% asegura no tener conocimientos sobre la internacionalización de su compañía y un 63% reconoce no estar informado sobre los factores financieros de la entidad.
Además, una de las claves que Gordillo y Salvador Puidengolas, decano del COIICV, reiteraron a lo largo de la presentación, es la necesidad de incentivar el componente del Corredor Mediterráneo y, sobre todo, de conectar la red ferroviaria con el Puerto de Valencia para paliar la deficiencia logística en gastos y costes, lo que a su vez permitiría una reducción del tiempo de los plazos de entrega y una mejora en la política de sostenibilidad medioambiental.
