MADRID (EP). La economía española creció un 0,6% en el segundo trimestre del año, tasa similar a la del trimestre anterior, gracias al empuje de la inversión, ya que el consumo prácticamente se estancó. Por su parte, la tasa interanual se situó en el 2,5%, tres décimas menos que en el trimestre anterior, según la Contabilidad Nacional Trimestral publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Esta tasa del 2,5% es dos décimas inferior a la inicialmente estimada por Estadística a finales del mes pasado (2,7%). Sí ha coincidido, por el contrario, el dato trimestral que adelantó el INE, del 0,6%.
Debido a la revisión de la Contabilidad Nacional Anual de España, se han revisado las series desde el primer trimestre de 2015. Uno de los datos revisados ha sido el del primer trimestre de este año. Inicialmente se calculó un crecimiento trimestral del 0,7% para el periodo enero-marzo. Una vez revisados los datos, esta tasa se ha rebajado al 0,6%.
De este modo, con la serie revisada en la mano, el PIB mostró tanto en el primer trimestre del año como en el segundo un crecimiento similar, del 0,6%. En cambio, la tasa interanual del primer trimestre se ha revisado una décima al alza, desde el 2,7% al 2,8%. De ahí que la desaceleración en el ritmo interanual del crecimiento económico haya sido de tres décimas en el segundo trimestre, al pasar del 2,8% al 2,5%.
Con el repunte interanual del 2,5% registrado en el segundo trimestre del ejercicio, la economía española acumula 18 trimestres consecutivos de tasas interanuales positivas, mientras que con el avance trimestral del 0,6% se acumulan 19 trimestres consecutivos de alzas.
La demanda nacional aportó 3,3 puntos al crecimiento del PIB interanual en el segundo trimestre, dos décimas más que en el trimestre anterior, en tanto que la demanda externa restó ocho décimas al crecimiento, cinco décimas inferior a la del trimestre anterior.
El PIB a precios corrientes se situó en el segundo trimestre en la cifra trimestral récord de 300.193 millones de euros, superando por primera vez la barrera de los 300.000 millones de euros.
La renta nacional bruta creció un 0,8% respecto al primer trimestre, siete décimas más que en el trimestre precedente, mientras que la renta nacional bruta disponible avanzó un 0,9%, nueve décimas más que entre enero y marzo. En valores interanuales, la renta nacional bruta creció un 3,4%, cuatro décimas menos que en el trimestre anterior. También la renta nacional bruta disponible desaceleró su crecimiento interanual, desde el 3,9% al 3,5%.
Según los datos del INE, el consumo de los hogares desaceleró ocho décimas su crecimiento trimestral entre abril y junio, desde el 0,9% al 0,1%, su menor avance desde el primer trimestre de 2014. Al mismo tiempo, el gasto público moderó siete décimas su crecimiento trimestral, hasta el 0,1%, encadenando seis trimestres de alzas.
Por su parte, el gasto en consumo de las instituciones sin fines de lucro volvió a tasas negativas tras cuatro trimestres en positivo: bajó un 0,3% entre abril y junio, en contraste con el aumento del 1,4% que experimentó en el primer trimestre.
Por el contrario, la inversión aceleró su crecimiento trimestral desde el 1,1% al 3,5%, gracias a la inversión en maquinaria y bienes de equipo, que avanzó un 6,5% en el segundo trimestre, frente al retroceso del 0,1% del trimestre anterior. Al mismo tiempo, la inversión en vivienda y construcción aceleró una décima su avance trimestral, desde el 2,1% al 2,2%.
Entre abril y junio, tanto las exportaciones como las importaciones crecieron a un ritmo menor al del primer trimestre. En concreto, las exportaciones aumentaron un 0,2%, cuatro décimas menos, mientras que las importaciones progresaron un 1%, frente al crecimiento del 1,7% de los tres primeros meses del ejercicio.
En tasa interanual, la economía española creció en el segundo trimestre del año un 2,5%, tres décimas menos que en el trimestre anterior, con una mayor contribución de la demanda nacional y una aportación negativa de la demanda externa.
Los dos principales componentes de la demanda nacional (consumo e inversión) mostraron en el segundo trimestre tasas positivas interanuales, aunque con diferentes tendencias: el consumo aumentó un 2,2%, siete décimas menos que en el trimestre anterior, mientras que la inversión aceleró su avance anual hasta el 7,7%, desde el 3,9% anterior.
Dentro de la partida del consumo, el de los hogares moderó ocho décimas su crecimiento anual, hasta el 2,3%, mientras que el de las instituciones sin fines de lucro avanzó 1,6 puntos menos que en el trimestre anterior, hasta el 2%. Por su parte, el gasto de las administraciones públicas desaceleró su aumento anual cinco décimas, desde el 2,4% al 1,9%.
Por su lado, la inversión registró un crecimiento interanual del 7,7%, porcentaje casi cuatro puntos superior al del trimestre anterior, tras ampliarse el repunte interanual de la inversión en vivienda y construcción 1,3 puntos, hasta el 7%, y dispararse el ritmo de crecimiento de la inversión en maquinaria, bienes de equipo y sistemas de armamento desde el 1,9% al 11,1%.
En el segundo trimestre del año, las exportaciones moderaron su avance interanual desde el 3,4% al 2,3%, mientras que las importaciones lo aceleraron desde el 4,7% al 5,2%.
Desde la óptica de la oferta, sólo la agricultura presentó en el segundo trimestre un mejor comportamiento interanual que en el trimestre anterior. Así, el valor añadido bruto de la agricultura creció un 3,2%, frente al avance del 2,2% registrado en el trimestre anterior.
Por contra, la industria, la construcción y los servicios moderaron sus tasas de crecimiento interanual en el segundo trimestre: la primera desde el 2,6% al 2,5%; la segunda, desde el 7,4% al 7,1%, y los servicios, desde el 2,5% al 2,3%.
En cuanto al empleo, el INE asegura que esta variable, medida en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, creció entre abril y junio un 0,8% respecto al trimestre anterior, tres décimas más que en el trimestre anterior.
En tasa interanual, el empleo registró un avance del 2,5%, una décima menos que en el trimestre anterior, lo que supone la creación neta aproximada de 441.000 empleos equivalentes a tiempo completo en un año.
En el segundo trimestre, sólo la ocupación en la construcción aceleró su ritmo de crecimiento interanual, desde el 8,3% al 8,6%, mientras que la industria moderó su tasa interanual hasta el 2,1%. Los servicios mantuvieron su crecimiento en el 2,2% y la agricultura volvió a destruir empleo y a mayor ritmo que en el trimestre anterior (-1,1% en el segundo trimestre frente al -0,4% del primer trimestre).
El empleo asalariado, por su parte, creció un 3,2% interanual entre abril y junio, lo mismo que en el trimestre anterior.
La productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo se desaceleró tres décimas, hasta el 0,0%, mientras que el crecimiento de la productividad por hora efectivamente trabajada bajó nueve décimas, hasta el -0,4%.
En este contexto, la remuneración de los asalariados pasó del 3,6% al 3,9% por la evolución del número de asalariados y por el aumento en tres décimas de la remuneración media por asalariado (del 0,4% al 0,7%). Así, el crecimiento del coste laboral por unidad de producto (CLU) se situó en el 0,6%, dos décimas menos que la variación experimentada por el deflactor implícito de la economía (0,8%).