Puig CampanaELCHE. A mediados de diciembre, la Conselleria de Agricultura publicaba la versión preliminar del proyecto de decreto del Consell por el que se declaran como zonas especiales de conservación (ZEC) los lugares de importancia comunitaria (LIC) de Serra de la Safor, Valls de la Marina, Riu Gorgos, Aitana, Serrella i Puigcampana y Serres del Ferrer i Bèrnia, además de aprobación de la norma de gestión de estas ZEC y de la zona de especial protección para las aves (ZEPA) Montañas de la Marina y del estudio ambiental y territorial estratégico. Una información pública a la que se puede alegar hasta mediados de febrero.
A este respecto, primero cabe explicar que los Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) son zonas designadas de interés comunitario por las comunidades autónomas por su potencial contribución a restaurar el hábitat natural, incluyendo los ecosistemas y la biodiversidad de la fauna y flora silvestres. Así, el Consell pretende que estas pasen a ser catalogadas como zonas especiales de conservación, y que son designadas por la Comisión Europea, por lo que se trata de una mayor protección al ser una normativa de mayor rango. Con las ZEC rige ya la obligación de que se desarrollen para ellas medidas de conservación especiales.
Se trata de un proceso iniciado por la entonces Conselleria d’Infraestructures, Territori i Medi Ambient en 2012, para la declaración de los lugares de importancia comunitaria (LIC) atendiendo a la normativa de la Red Natura 2000. Afecta este trámite que ahora está en fase preliminar a los siguientes municipios, con un total de más de 90.000 hectáreas. Son cinco ZEC, una ZEPA y cuatro zonas de conectividad ecológica, los cuales abarcan una superficie global de 59.323 hectáreas, incluyendo en su delimitación un total de 72 municipios, repartidos en cinco comarcas de las provincias de Valencia y Alicante: La Safor, Vall d’Albaida, El Comtat, La Marina Alta y La Marina Baixa.
Así pues, con este decreto se propone la declaración de ZEC de los LIC y se aprueban las normas de gestión que regirán en dichos en espacios, así como en la ZEPA mencionada. En caza Zona Especial de Conservación se delimita cuáles son los hábitats de interés que proteger y cuáles los prioritarios. Por ejemplo en La Safor (provincia de València y Alicante) los prioritarios entre otros los prados calcáreos cársticos o los manantiales petrificantes con formación de tuf. Entre especies de flora y fauna están la nutria, la colmilleja o una especie de libélula, así como una de orquídea o el Thymus.
En Valls de la Marina son también de especial interés zonas subestépicas de gramíneas o matorrales arborescentes de Laurus nobilis. Entre la flora y fauna hay manantiales, robledales o cuevas, así como también la nutria, la colmilleja y el cangrejo de río. En la ZEC de Aitana o Puig Campana son de especial interés las estepas salinas mediterráneas o la vegetación gipsícola ibéricas, y entre su flora y fauna destacable se suma la Zamarrilla del yesar y otras especies como el Agracejo andaluz, Durillo dulce, la Lechetrezna o el Altramuz valenciano. Esta última ZEC es un punto de referencia para la vegetación del sistema prebético. Su altitud, la mayor de la provincia de Alicante, junto con su proximidad al mar han ocasionado la concentración de numerosas especies, algunas de ellas refugiadas del eurosiberiano.
BèrniaPor su parte, en la ZEC del Ferrer i Bèrnia destacan los bosques mediterráneos de Taxus baccata —tejo común— y cuenta con especies de flora y fauna como el Silene de Ifac. En la del río Gorgos están, entre otros, los prados calcáreos cársticos o basófilos del Alysso-Sedion albi como hábitat de interés.
Asimismo, el documento también desarrolla la normativa de gestión de cada una de las zonas, así como la evaluación de su estado actual, siendo la mayoría favorable, aunque con algunos hábitats en un estado desfavorable e inadecuado. Son por ejemplo los matorrales arborescentes de Laurus nobilis en La Safor, así como sus bosques mediterráneos de tejo común. Ambos hábitats prioritarios. En Valls de La Marina son más los que están en situación preocupante, como fresnedas termófilas, robledales ibéricos o prados calcáreos cársticos.
En el río Gorgos están en situación desfavorable los encinares de Quercus ilex y en situación mala las galerías y matorrales ribereños termomediterráneos. En Aitana la mayoría de los hábitats están en buena situación, aunque en el término medio, desfavorable, varios prioritarios, como la vegetación gipsícola o bosques mediterráneos de tejo común. En Ferrer i Bèrnia la situación es muy similar, sendos hábitats prioritarios se encuentran en estado inadecuado, así como los encinares.
En cuanto a las especies de interés comunitario, las herbáceas Teucrium lepicephalum en Aitana, Serrella i Puigcampana y la silene de Ifac en Ferrer i Bèrnia son las que están en estado desfavorable. Sobre las aves, todas están en buen estado, aunque se desconoce y falta información del Búho real.
Para las especies que han mostrado una valoración global favorable, se considera que mantendrán o mejorarán su estado de conservación siempre que los valores actuales de los parámetros de evaluación se mantengan estables o se incrementen. Para las especies que han mostrado una valoración global desfavorable mala o inadecuada, estas alcanzarán el estado favorable una vez los parámetros de evaluación se recuperen hasta alcanzar o superar los valores de referencia o las tendencias que han motivado esta catalogación de estado desfavorable.
Los objetivos de gestión comunes para el conjunto de los hábitats de interés comunitario es actualizar periódicamente la información cartográfica de la superficie y cobertura, y mantener o mejorar la distribución, superficie, cobertura y funciones específicas de cada uno de los hábitats en el momento de entrada en vigor de la Norma de Gestión.
Los objetivos de gestión referentes a las especies son actualizar de forma periódica la información sobre el tamaño poblacional y sus parámetros, mantener o mejorar la población en el momento de entrada en vigor de la normativa, mantener los hábitats de las especies mediante la eliminación de los factores que están afectando al estado de conservación de las especies y crear nuevas zonas de expansión de las especies en el ámbito de la norma mediante la restitución, restauración o creación de hábitats adecuados para las mismas.
Sobre los objetivos de gestión referentes al conjunto del espacio se pretenden redimensionar los anteriores de forma que puedan establecerse prioridades en función de los recursos, el contexto económico, social y territorial. Por último, el programa de actuaciones previsto para la ejecución de esta Norma de Gestión con las declaraciones ZEC se prevé una inversión más de 1,3 millones de euros: 27.840 para proyecto de evaluación de comunidades, 1.304.494 para mejora, restauración y conservación y 6.500 para proyectos de información de los valores naturales para fomentarla conservación y desarrollo sostenible del entorno.
