El Consell acepta el "chantaje" que supedita el cobro del FLA a  un convenio que beneficia a las farmacéuticas

VALÈNCIA. El pleno del Consell ha aprobado la adhesión al convenio de colaboración entre la Administración General del Estado y la Asociación Nacional Empresarial de la Industria Farmacéutica (Farmaindustria) al ser un paso necesario para cobrar el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). Finalmente, la Comunitat acepta el acuerdo del Gobierno de Mariano Rajoy con las farmacéuticas a pesar de que el conseller de Hacienda, Vicent Soler, calificó la situación como "chantaje" mientras que la consellera de Sanidad, Carmen Montón, reconocía que les ponía "entre la espalda y la pared".

Este acuerdo establece incentivos o medidas compensatorias a esta industria en el caso de que el gasto farmacéutico no crezca al mismo ritmo que el Producto Interior Bruto (PIB), garantizando un crecimiento al menos igual que la tasa del PIB a Farmaindustria. Sin embargo, aceptarlo se hace imprescindible para acceder a la vía de financiación del FLA.

El convenio tiene su origen en un acuerdo entre el Gobierno y Farmaindustria, alcanzado el 29 de diciembre de 2016, al que ya se adhirió la Comunitat Valenciana el 31 de marzo de 2017 para poder acceder a los fondos del FLA de 2017.

La Comunitat Valenciana realizó, en noviembre de 2017, alegaciones al texto del presente convenio que no han sido consideradas por los ministerios de Hacienda y Función Pública; y Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

Entre estas alegaciones está el que, dado que desde el principio se planteó que la adhesión al convenio por parte de las comunidades autónomas fuera voluntaria, es incongruente que, a la vez, se proponga como un requisito a cumplir dentro de los compromisos del programa para acceder al FLA.

También se ha planteado en las alegaciones el hecho de que el convenio excluya medicamentos genéricos, biosimilares y aquellos que no pertenecen a los laboratorios adheridos a Farmaindustria, por lo que desincentiva el uso de estos fármacos. Además, se aludía a que el convenio fomenta el acceso de los medicamentos calificados como "innovadores" sin especificar qué se entiende como tal.