MADRID, (EP). El 75 por ciento de las personas muere con dolor emocional por no haber recibido cuidados paliativos, según se ha puesto de manifiesto durante una jornada organizada por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) con motivo de la celebración del Día Mundial de este tipo de asistencia.
Se estima que en España unas 215.000 personas necesitan cuidados paliativos, de las que unas 105.000 requieren atención paliativa especializada con profesionales debidamente formados y cualificados para ello. Unos cuidados que, tal y como ha recordado el presidente de la AECC, Ignacio Muñoz, son un derecho de todas las personas y deben abordarse de una manera integral ya que, sólo así, se conseguirá mejorar la calidad de vida del paciente y de su familia.
Y es que, el dolor que sufren las personas al final de su vida no es sólo físico, sino que también es emocional, social, familiar y espiritual. "El dolor es uno de los síntomas que más acucia cuando una persona está en el final de su vida y que aumenta conforme la enfermedad progresa. De hecho, es lo que más afecta a la calidad de vida y se considera el quinto signo vital", ha argumentado la miembro de la Junta Directiva de SECPAL, Ana Tordable.
Estas declaraciones han sido corroboradas por Daniel Griffin, cuya mujer murió en 2009 tras ocho años y medio de "larga lucha". "Cuidados paliativos fue un apoyo bestial y un gran alivio, tanto para mi mujer, como para mí, porque después de tantos años yo ya tenía un agotamiento inimaginable, estábamos viviendo como en una guerra, con una sensación constante de agobio y hostigamiento. Por fin, y aunque mi mujer al principio no quería, nos ayudaron los profesionales de cuidados intensivos y permitieron a Lola morir dignamente en casa, donde ella quería", ha narrado.
Pero no sólo esta atención es necesaria para los pacientes, sino también para los cuidadores. En este sentido, Griffin ha comentado las necesidades físicas y psicológicas que tenía, que le hacían sentirse "egoísta", y que se diluyeron gracias a la ayuda que recibió por parte de los profesionales. "Hubo momentos en los que ya decía que no podía más y acudí a la ayuda psicológica y me ayudó a sobrellevar esa situación límite. Por ello, es necesario que todas las personas que están pasando por una situación similar reciban esta ayuda porque no es sólo un apoyo físico, sino también psicológico", ha enfatizado.
Sin embargo, en España la mitad de los pacientes no recibe esta atención por falta de recursos en las localidades donde se encuentran y 295 fallecen cada día sin haber tenido esta asistencia. Además, sólo uno de cada cuatro recursos de paliativos cuentan con psicólogos y trabajadores sociales, profesionales "esenciales", junto a los médicos y enfermeras, para conseguir mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familiares.
En este punto, Tordable ha subrayado la importancia de mejorar la formación e información sobre cuidados paliativos entre los profesionales sanitarios, así como la coordinación entre Atención Primaria y especializada. Del mismo modo, prosigue, es necesario aumentar la investigación en ese campo para saber cuáles son los recursos prioritarios que hay que implantar.
"Para ayudar a aliviar el dolor se necesita expandir el conocimiento y que se de a conocer que los cuidados paliativos son un derecho. En España no estamos acostumbrados a hablar de la muerte y es importante ayudar a las familias a preparase y a que sepan cómo ayudar a la persona que está sufriendo. No es un tema fácil y conlleva mucho trabajo por parte de los servicios sanitarios como de las organizaciones sociales", ha zanjado el presidente de la AECC.