VALÈNCIA. La decisión fue objeto de debate interno pero, una vez tomada, Compromís está plenamente dispuesto a sacarle partido. Tal y como adelantó Valencia Plaza, el rechazo de la coalición en el Congreso de los Diputados a la nueva Ley del Cupo Vasco para el periodo 2017-2021 y la modificación del Concierto Económico que se votará este jueves le sitúa en una posición diferenciada, ya no solo del PP, sino también de sus socios del Botánico, PSPV-PSOE y Podemos, que planean votar a favor alineados con los populares. Conviene recordar que esta cuestión ha implicado ciertas dudas en Compromís dado que el Bloc, la pata mayoritaria de la coalición, siempre ha mantenido buenas relaciones con el PNV, principal beneficiado de esta iniciativa legislativa.
No obstante, hasta tres referentes de Compromís defendieron este martes la posición de su partido ante la citada ley, que mejorará la situación económica del País Vasco que a día de hoy es ya la más privilegiada de España. De esta manera, la vicepresidenta del Consell y coportavoz de la formación valencianista, Mónica Oltra, se lamentó por el pacto entre PP y PNV: "No puede ser que el dinero vaya a los que más tienen en vez de a los que más lo necesitan".
En esta línea, la dirigente de Compromís instó a abordar el problema "de manera global" y no a través de "parches". "Rajoy ahora vuelve a arreglarle el tema al País Vasco, que son la comunidad mejor financiada de España", afirmó, para preguntarse por qué los peores financiados como los valencianos tenían que "seguir esperando" mientras hay "más dinero para los mejor financiados". "Queremos que nuestros hijos tengan las mismas oportunidades que un niño que vive en el resto de España", sentenció.
También se pronunció sobre esta cuestión el portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, quien defendió que la financiación de todas las comunidades autónomas debería estar recogida en la Constitución y no solo la de los territorios forales de País Vasco y Navarra, con el fin de evitar el "mercadeo" del gobierno de turno. Además, el parlamentario insistió que su rechazo no se produce por estar en contra del régimen foral, sino porque el Gobierno de Rajoy debería, a su juicio, empezar a resolver el problema de financiación de autonomías que estén "mucho peor financiadas" que la vasca, como es el caso de la valenciana. "Los derechos son de los ciudadanos, no de los territorios, y no podemos estar al albur de que el Gobierno pueda mercadear con ellos para asegurarse, en el caso del PNV, su apoyo a los PGE de 2018 que son los que permitirán a Rajoy seguir un año más en Moncloa", concluyó Baldoví.
El tercer referente de Compromís que tomó la palabra este martes para pronunciarse sobre el Cupo vasco fue el síndic en Les Corts, Fran Ferri, quien remarcó que Euskadi no tiene "los graves problemas" que tienen los valencianos en materia de financiación y reclamó la "urgencia" con la que se está reformando esta cuestión para abordar la remodelación del sistema "que tanto perjudica a la Comunitat". "No podemos permitir que los valencianos sean moneda de cambio y que los recursos, tiempo y voluntad que deberían ir a reformar ese sistema de financiación vayan a asegurar tener unos presupuestos y tirar hacia adelante ciertas políticas", zanjó.
Una posición, la de Compromís, que curiosamente en este caso coincide con la de Ciudadanos. La propia portavoz de la formación naranja, Mari Carmen Sánchez, aseguró no entender a quienes reclaman una financiación justa y luego votan a favor del Cupo. Por su parte, la secretaria general del PPCV, Eva Ortiz, se limitó a recordar que esta cuestión viene reflejada en la Constitución y, por otro lado, insistió en que PSPV y Compromís negociaran con el Gobierno los nuevos presupuestos.
Por su parte, el portavoz de Podem, Antonio Estañ, cuya formación en el Congreso respaldará el Cupo vasco, subrayó que manifestarse en contra de esta medida "no va a garantizar una financiación justa para los valencianos". Otras fuentes de la formación morada consultadas por este diario subrayaron que el Cupo es una "demanda legítima" de la ciudadanía vasca y recalcaron que respaldarlo no significaba que este partido no fuera a "seguir peleando por la reforma del sistema de financiación".
En cuanto al PSOE, este martes confirmó que apoyará "sin complejos" el proyecto de Ley del Cupo Vasco por ser "un hecho diferencial constitucional reconocido". El diputado valenciano Ciprià Císcar intervino en la reunión del grupo parlamentario del Congreso para exigir la revisión del modelo que rige para el resto de comunidades para terminar con las desigualdades entre territorios.
En esta línea se manifestó el líder del PSPV y presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien preguntado por la postura de Compromís de votar en contra de la ley deslizó un mensaje de cierto malestar: "En estos momentos es fundamental que se aborde esta fase final de negociación de la financiación autonómica. No tendría ningún sentido que se aprobara el Cupo vasco y no se aprobara el nuevo sistema de financiación, no tendría ningún sentido", remarcó, una opinión similar a la reflejada también este martes desde el Gobierno de la andaluza Susana Díaz, que opinó que debería replantearse la financiación de todas las CCC "al mismo tiempo".
Por otro lado, el portavoz socialista, Manolo Mata, respondió sobre una posible negociación de los PGE de 2018 tal y como pide el PPCV. Así, el síndic señaló que el PSPV dirá a sus diputados que aprueben las cuentas de Rajoy "si ponen 20.000 millones para el déficit histórico, si las inversiones son idénticas a las de la media nacional y además contemplan un sistema de financiación que equipare a los valencianos con el resto de territorios de España". Una reivindicación que, atendiendo a la postura de los populares en los últimos años, se antoja complicada de conseguir.