VALÈNCIA (EP). El síndic de Compromís, Fran Ferri, ha criticado este sábado a la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, por "no dar la cara ni actuar ante el último informe demoledor de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre la corrupción en su partido en la ciudad de València", por lo que considera que la dirigente 'popular' "está demostrando que encabeza un PP corrupto que no tiene manera de regenerarse".
Ferri se ha referido de este modo a un informe de la UCO, de 200 páginas al que ha tenido acceso Europa Press y que forma parte de las diligencia derivadas de la Operación Taula, que apunta a que la intervención del ex vicealcalde de València Alfonso Grau fue "determinante" para desarrollar trabajos de la campaña electoral del PP en la ciudad por un importe "muy superior" al legalmente establecido y "financiarlos de manera irregular mediante el uso de distintas dinámicas de ingresos de fondos".
De este documento también se desprende que una vez más aflora en este procedimiento la irregular forma en la que se sufragó la campaña de 2007 de los 'populares', así como el manejo de grandes cantidades de dinero en efectivo con esa finalidad. Una dinámica adoptada en 2007 que, según la Guardia Civil, fue análoga a la que se siguió en los años 2011 y 2015.
En un comunicado, el portavoz de Compromís en las Corts ha afirmado que la presidenta del PPCV "debería responder ante esta constatación de que su partido ganó elecciones haciendo trampas, un atentado a la democracia".
"La gestión de Bonig al frente del PP en nuestro territorio se ha caracterizado por no expulsar a los imputados por corrupción, que siguen en el grupo municipal de València y se les premia participando en la interparlamentaria de su partido, no es capaz de regenerar el PP, como hemos podido comprobar también en el PP de la provincia de Valencia", ha lamentado.
Para Ferri, "este currículum inhabilita a Bonig para seguir al frente de un partido que tenga como objetivo regenerarse", dado que "con ella la corrupción y la incapacidad siguen siendo las señas de identidad del PP".
La Audiencia Provincial expone las trampas del partido para financiar las campañas de 2007 y 2011. En esta última no se ha podido demostrar el origen de los fondos
Los magistrados ven acreditada la "mecánica fraudulenta" para la financiación de la campaña: de un lado, el desvío de fondos de la Fundación Turismo Valencia y del Centro de Estrategias y Desarrollo; de otro, un total de 1,6 millones de aportaciones "clandestinas" de empresas, algunas de ellas contratistas del Ayuntamiento