Baldoví: "Estaría encantado de que Sáenz de Santamaría me llamara para negociar presupuestos"

VALENCIA. Compromís conformó en las últimas elecciones generales una alianza electoral junto a Podemos y Esquerra Unida que le permitió lograr cuatro diputados en el Congreso. Un resultado importante que, no obstante, no fue suficiente para lograr su objetivo final de conformar un grupo propio en la Cámara Baja.

El hombre fuerte de la coalición en Madrid es Joan Baldoví (Sueca, 1958), quien ejerce la tarea de portavoz de la coalición en el Parlamento. No son pocos en su formación los que aseguran que su mayor cualidad es su capacidad para transmitir honestidad y sinceridad. Un don quizá innato o tal vez adquirido en su trayectoria municipalista, que culminó logrando la Alcaldía de su localidad natal entre 2007 y 2011.

Baldoví, miembro destacado del Bloc y antes de Unitat del Poble Valencià, deja la puerta abierta en la entrevista concedida a Valencia Plaza a negociar cuestiones de presupuestos con el PP de Mariano Rajoy. "Hay muchas cosas pendientes de solucionar para los valencianos y Compromís se sentará con quien haga falta para ello", sentencia.

-¿A usted le han llamado desde el Gobierno de España para negociar los presupuestos?
-Hace unas tres semanas me llamó Soraya Sáenz de Santamaría y me dijo que teníamos que tomar un café. Lo que pasa es que cuando el PNV se puso más a tiro, creo que decidieron centrarse en ello y de momento no ha habido más comunicaciones.

-El PNV ha puesto sobre la mesa la 'agenda vasca'. Piden unos 1.500 millones de euros en concepto de deuda histórica por el cupo, el AVE, inversiones para infraestructuras... ¿Ve posible que Compromís pudiera pactar algo similar con el PP?
-Lo veo complicado porque la gente no solo nos ha votado por nuestra agenda valenciana, sino por más cosas. Habrá que ver los presupuestos primero pero las noticias que me llegan no son muy tranquilizadoras. Veo difícil que nos vuelvan a llamar porque para el PP es más cómodo acabar negociando con el PNV y tener ese territorio pacificado en contraste con Cataluña. Ahora bien, yo le dije a la vicepresidenta que Compromís tiene tantas ganas de solventar cosas que nos sentaríamos a hablar con quien hiciera falta.

-Pero en el caso de los presupuestos, aunque el PP tuviera el respaldo de Ciudadanos, Coalición Canaria y el PNV, aún les faltaría un voto para aprobarlos dado que el PSOE ha dicho que no los va a apoyar. ¿Para esa votación puntual se podría negociar a cambio de contrapartidas valencianas?
-Insisto, veo difícil que los diputados de Compromís puedan respaldar los presupuestos de Mariano Rajoy o abstenerse. Pero habrá que verlos primero. Es cierto que hay un cambio significativo en estas cuentas: en las anteriores se puso el acento en los gastos y en estas se pone sobre los ingresos. Es decir, no se recorta, aunque evidentemente no se recupera lo que habíamos perdido.

-¿No cree que Compromís en casos como este debería ser tan pragmático como el PNV?
-Unos presupuestos no son solo lo que puedas recuperar. A veces es cierto que me da cierto coraje no poder negociar para tener el peso que realmente nos merecemos. No obstante, nosotros estamos intentando junto a otros diputados valencianos del resto de partidos hablar para crear, por así decirlo, un frente de presión para que las cuentas no sean las que hemos tenido en los últimos años. Ha habido un par de reuniones informales entre algunos de nosotros y hemos hablado sobre temas que pueden afectar de los presupuestos. Es interesante abrir ese camino.

-¿También con diputados del PP?
-Sí, he hablado con varios de ellos también. A ver, no quiero colgarme ninguna medalla, hemos hablado todos para tratar de que los próximos presupuestos sean más justos con el peso que tiene la Comunitat Valenciana en el conjunto de la economía española.

-Pero por lo que dice, no es muy optimista...
-Bueno, digamos que me han llegado algunos comentarios que apuntan a que en el apartado de inversiones no debemos esperar algo muy diferente a las cuentas de años anteriores.

-El ministro de Fomento estuvo la semana pasada en Valencia con buenas palabras y promesas...
-Sí, pero esta película, ¿cuántas veces la hemos visto? Es cierto que es un ministerio complicado y con muchas presiones territoriales. Todavía está aterrizando así que ya veremos. Lo que veo positivo es que por primera vez en muchos años sí que noto un consenso de la sociedad valenciana. Ves a los empresarios juntos reivindicando, las distintas asociaciones están implicadas... parece que tenemos objetivos comunes que compartimos y eso es muy importante para solucionar los problemas. De hecho, creo que en Madrid se empieza a visualizar. El otro día, por ejemplo, le decía al ministro de Cultura en comisión que el Palau de les Arts recibe mucho menos que el Teatro Real, el Liceo o el Teatro de la Maestranza de Sevilla. Lo cierto es que le vi días después y me comentó: "Me acuerdo de lo que me dijiste". Bueno, ya veremos, pero es un comienzo. Este lunes comparece el ministro de Fomento y le voy a hacer otras reivindicaciones en la misma línea: que inviertan, que den fechas y las cumplan. Espero que empiecen a entender que lo que es bueno para Valencia es bueno para España. 

-No obstante, el problema es que hay un conflicto ideológico. Si falta un voto y se puede negociar... ¿Se hará? ¿O hay una consigna en Compromís de no respaldar a Rajoy haga lo que haga? ¿Está descartado eso?
-Yo no descarto nada y yo soy pragmático. Así que si el PP nos llama a negociar nosotros iremos. A ver, nosotros dijimos en su momento que no íbamos a apoyar un gobierno de Rajoy, porque consideramos que hubiera sido una estafa para nuestros votantes. Pero ya se lo dije a la vicepresidenta, si nos llamara estaría encantado de ir y ver qué nos puede proponer y ofrecer el PP.

-¿Cree que realmente Rajoy está preparando las elecciones tal y como insinuó días atrás?
-Pienso que dio un aviso a navegantes sobre todo al PSOE respecto a los presupuestos. Fue una manera de recordarles el lío que tienen, sin fecha para el congreso, sin aspirantes claros... una forma de decirles: os voy a pillar desprevenidos. Y si no hay respaldo de los socialistas, pues podría ser una excusa perfecta para convocar: os digo una cosa, se les nota en la cara que no les hace ninguna gracia perder votaciones tal y como está ocurriendo ahora. 

-No solo el PSOE. Aparte del PP, no hay muchos partidos que puedan estar muy tranquilos si se repiten elecciones...
-Sí, probablemente el único o más beneficiado de unas nuevas elecciones sería el PP. Más aún viendo la situación en Ciudadanos, en Podemos.. De hecho, en comparación con estos partidos, ahora en Compromís el nivel de conflicto es relativamente bajo.

-¿Cómo debe ser la estrategia del Gobierno valenciano con Madrid? ¿Redoblar el perfil reivindicativo y hacerlo más agresivo o intentar buscar un tono más colaborativo?
-La verdad es que la queja no está surtiendo mucho efecto, pero también es cierto que sin la queja el problema valenciano no estaría encima de la mesa y estamos hablando de financiación, de Corredor Mediterráneo... todo esto es el pan de los valencianos. Hay que combinar las dos vías y hacer, como está ocurriendo, que exista implicación de empresarios y de la sociedad civil en general. Está muy bien por ejemplo que el otro día votáramos en el CPFF alineados con Cataluña y Baleares y expresáramos nuestro desacuerdo. Pero también apuesto por vías más discretas para intentar revertir determinadas cosas.

-¿Ve a los diputados valencianos de distintos partidos votando en bloque en el Congreso por alguna cuestión importante para la Comunitat?
-No lo veo, pero la verdad es que estaría bien que pudiera ocurrir alguna vez y dar un toque de atención. 

-¿Qué opina de la situación del PPCV en los nombramientos del Gobierno de España, donde no hay ningún valenciano?
-La verdad es que me preocupa nuestro peso allí. A mí me habría gustado que, por ejemplo, el secretario de Estado de Hacienda hubiera sido Juan Carlos Moragues, y hubiera querido que Susana Camarero siguiera en Sanidad. Lo que quiero decir es que soy partidario de que haya valencianos en el Gobierno aunque sean del PP.  No es lo mismo que haya una ministra gallega que un ministro valenciano.  No es lo mismo que haya un secretario de Estado de Hacienda como Beteta, que no tiene ninguna sensibilidad especial hacia nosotros, que lo fuera Moragues, que sí podría tenerla porque conoce perfectamente nuestros problemas.

-¿Cómo ve la situación que se está generando con Gent de Compromís y cuál sería la solución?
-Habrá que llegar a una solución en la que todos estemos cómodos. Compromís siempre ha sido capaz de llegar a acuerdos y, visto lo visto, el Gobierno valenciano es uno de los más estables de España en mi opinión. Hay gente que en Compromís se encuentra cómoda con la figura del adherido y otros que prefieren otra cosa. Se ha nombrado una comisión para ello con personas muy razonables y estoy seguro de que se hallará una fórmula satisfactoria.