VALÈNCIA. 'Los vientos de cola soplan con menos fuerza sobre las exportaciones de la Comunitat Valenciana'. Así titulaba este diario el pasado 21 de febrero y de ahí que en la presentación de ayer del informe 'Situación Comunitat Valenciana' le preguntara a Rafael Doménech, responsable de Análisis Económico de BBVA Research, si van a seguir soplando con menos fuerza esos vientos de cola. "Nuestro escenario base para 2020 y 2021 contempla que deberían comportarse mejor las exportaciones de la Comunitat Valenciana en la medida de que haya menores tensiones comerciales e incertidumbre. Pero sí van a crecer a un mayor ritmo que en 2019 pero manteniendo mucha prudencia por el efecto del coronavirus', respondió a Valencia Plaza.
Doménech, que estuvo acompañado por David Conde, director Territorial Este de BBVA, y Carlos Rodríguez, director Regional Este de Banca de Empresas y Corporaciones en BBVA, se mostró optimista sobre el crecimiento de la economía de la Comunitat Valenciana. Hasta el punto de que estima que el PIB supere a finales de 2021 el nivel precrisis en un 6%. Esta predicción al alza se produce después de que la economía valenciana haya mantenido una subida ligeramente por encima de la media nacional en 2019, aunque se desaceleró hasta un crecimiento del 0,3%. Al final del año se estabilizó en un 1,9% anual, una décima por debajo del conjunto de España.
Asimismo el observatorio estima que la ralentización continúe este año con una subida del 1,5% en el PIB de la Comunitat Valenciana, que podría llegar al 2% en 2021 "si no se materializan algunos de los riesgos. Estamos en las antípodas del periodo de desequilibrio, pero queda mucho por hacer", defendió Domenech; mientras que de cara al futuro advirtió de la importancia que tendrán los cambios que el nuevo Gobierno PSOE-Unidas Podemos introduzca el mercado laboral y las pensiones.
Además, manifestó que la inversión en maquinaria y equipo podría acelerarse en la Comunitat ante los bajos costes de financiación, la reducción de algunas incertidumbres y la recuperación de la demanda europea, junto a un mejor comportamiento de las exportaciones. De ahí que si se cumple este escenario podrían crearse de 50.000 a 55.000 empleos en la Comunitat en 2020 y 2021, con lo que el paro rondaría el 12,8% y estaría solo a ocho décimas del nivel de 2008, aún lejos del mínimo precrisis de cerca del 8% en 2007.
Los primeros datos de 2020 apuntan a una ligera mejora del mercado laboral, con la estimación de que el crecimiento del primer trimestre podría situarse en el 0,5% y por encima de la media nacional. Para conseguirlo, BBVA Research aboga porque la Comunitat impulse la formación laboral de los colectivos con más dificultades, los jóvenes y los parados de larga duración, aunque destaca que hay "menos restricciones de capital humano" que en el resto de España.
Otras 'recetas' que la entidad reclama al Gobierno valenciano (PSPV, Compromís y Unides Podem) son una mayor licitación de obra pública, pues cayó un 1,9% en 2019 tras tres años de crecimiento, y cambios en la política fiscal con un reflejo en los presupuestos autonómicos. En este sentido, BBVA Research estima que es "improbable" que la Comunitat cumpla el objetivo de déficit del -0,2% establecido para 2020, ante la falta de medidas de ajuste que compensen la desviación del año pasado. En todo caso, reconoce que la Generalitat continuó con la senda expansiva de gasto, "aunque a un ritmo algo más moderado".
En clave europea, la Comunitat se vería favorecida por la salida del Reino Unido de la Unión Europea, "sin desequilibrios en los mercados", por su mayor exposición al mercado británico en exportaciones, turismo y sector inmobiliario. La posible reducción de las tensiones comerciales EEUU-China también facilitaría la recuperación de los flujos globales, a la espera del impacto del brote del nuevo coronavirus. Además, y como "riesgo adicional", el estudio alerta de la decisión de Ford de transferir la producción de dos de sus motores desde la planta valenciana de Almussafes a Norteamérica a partir de 2022, lo que podría impactar directamente en la industria automotriz regional.
Con todo, BBVA Research cree que la economía valenciana está "mejor preparada" para afrontar un entorno de menor crecimiento que en otros episodios, debido al menor endeudamiento de empresas y familias o a la liquidez del sistema financiero; mientras que como balance de 2019 destacó una desaceleración de la demanda interna por el menor gasto de los hogares valencianos, si bien la Comunitat logró posicionarse a la cabeza del consumo privado tras Madrid. Otros puntos favorables son la subida de las exportaciones y los récords en viajeros, pernoctaciones y gasto, principalmente por la demanda turística nacional.
Todo ello después de que el mercado laboral valenciano se desacelara el pasado año, sobre todo en la segunda mitad, aunque la Comunitat fue la tercera región más dinámica tras Madrid y Murcia. Eso sí, BBVA Research recuerda que la mejora se concentra en áreas urbanas y las capitales de provincia de Alicante y Valencia.