MADRID (EP). Atlantia ha presentado formalmente su OPA sobre Abertis, en la que manifiesta expresamente su "voluntad de atender a los intereses estratégicos" que España tiene en los activos de la compañía, esto es, las autopistas de peaje y los satélites de Hispasat. El grupo italiano controlado por la familia Benetton lanza así un 'guiño' al Gobierno español que, desde que hace un mes se anunció la operación, ha aludido en repetidas ocasiones a la capacidad legal con que cuenta para no autorizar la operación atendiendo al "interés general".
En concreto, el Ejecutivo ha recordado que debe autorizar en Consejo de Ministros el traspaso de cada una de las autopistas que Abertis explota como primer operador de vías de pago del país, un total de 1.560 kilómetros, y ha subrayado el carácter estratégico que Hispasat tiene para el Estado, que además controla un 9,2% de este operador a través del CDTI (1,8%) y SEPI (7,41%).
Así, en el folleto de la OPA remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Atlantia expresa su "voluntad de atender a los intereses estratégicos del Reino de España en relación a la gestión, explotación y conservación de las autopistas de peaje y con el eventual destino de la participación de Abertis en Hispasat", abriendo así la puerta a una eventual desinversión de los satélites.
Para ello, asegura que "tendrá en cuenta", la "normativa de concesiones española y el acuerdo del Consejo de Ministros de 1997 que concedió a Hispasat la gestión del segmento espacial de la posición orbital geoestacionaria". También atenderá "al criterio seguido en actuaciones precedentes y a los "intereses de los accionistas de Abertis". En la documentación presentada al supervisor, Atlantia se compromete asimismo a mantener la sede de Abertis en Barcelona y a respetar "su estructura de gestión y gobierno corporativo".
Además, reafirma que mantendrá la actual estrategia de crecimiento "sostenible y rentable" de Abertis a la que, tal como ya avanzó, prevé convertir en plataforma del grupo para Latinoamérica, dado que "propondrá la transferencia de las actividades de Atlantia en Chile y Brasil", países donde el grupo español ya está presente. A pesar de la concesión realizada al Gobierno español, Atlantia reconoce toda la cascada de autorizaciones que debe superar la OPA, a las que además está condicionada. Así, además de al 'visto bueno' de España, debe contar con el beneplácito de las autoridades de Competencia de la UE, de Estados Unidos, Brasil, Chile y Argentina, con las que trabajará "en estrecha colaboración".
En cuanto a la oferta, la firma transalpina mantiene las características y condiciones que ya anunció el pasado 15 de mayo, como es el precio de 16,50 euros por acción, si bien se abre a abonar todo el importe de la operación en efectivo. En su propuesta inicial planteaba atender hasta un 23% de la operación mediante un canje de acciones, una medida que el mercado interpretó que iba dirigida a Criteria, primer accionista de Abertis con el 22,2% de su capital, ante el interés de los Benetton de que se mantuviera en el eventual nuevo grupo fusionado.
En cuanto al precio, Atlantia defiende que tiene la consideración de "precio equitativo", y lo sustenta con un informe de PricewaterhouseCoopers y otro de un experto independiente. La contraprestación arroja, según Atlantia, una prima del 20% respecto a la cotización media del grupo español en los seis meses previos al planteamiento de la operación. En la actualidad, está ligeramente por encima de a la cotización del grupo español, que cerró la sesión de Bolsa de este jueves a 16,420 euros, si bien ha logrado superarla puntualmente.
En cuanto a la financiación de la operación, con su folleto, Atlantia presenta avales por valor de 14.700 millones de euros, sin detallar los bancos que los conceden, para garantizar toda la parte de la oferta que inicialmente se pagaría en metálico. Al precio propuesto, la OPA de Atlantia supondría una operación de 16.341 millones de euros que además daría lugar a uno de los primeros grupos de concesiones de infraestructuras del mundo, que sumaría 14.100 kilómetros de autopistas, además de aeropuertos y la firma española de satélites Hispasat.
Con la presentación del folleto de la OPA a la CNMV, comenzarán a transcurrir los plazos legales de la operación. Una vez que el supervisor autorice la oferta, se abrirá el periodo de aceptación y se dará un máximo de diez días para que el consejo de Abertis y, por ende, su socio de referencia, se pronuncien. En este sentido, Criteria prevé agotar este plazo legal con que cuenta para decidir sobre la operación, con lo que no se pronunciará hasta que se manifieste el máximo órgano de gestión de Abertis, en el que se sienta, según indicaron a Europa Press en fuentes del sector.