MADRID. El presidente de la asociación de apartamentos turísticos de la Costa Blanca (Aptur), Miguel Ángel Sotillos, sigue en pie de guerra contra aquellos que perjudican según ellos sus intereses. Como viene siendo habitual, ha tocado a los hoteleros y a la Generalitat Valenciana por la regulación de los pisos turísticos que quiere aprobar Turisme. Hasta el punto que el empresario llegó a decir que les quieren quitar del mercado con las nuevas políticas que se están aplicando.
"Parece que no queremos tener regulación, y eso es absolutamente falso. Aptur se crea para defendernos del intrusismo y de los ilegales", comenzaba apuntando Sotillos en declaraciones a este diario durante su visita a la Feria Internacional de Turismo.
Así, continuó diciendo que para él lo que no es normal es que un vecino pueda decir "al que quiere alquilar su piso lo que puede hacer con él". Sin embargo, lo que sí que ve con buenos ojos es que digan "que tengo que cumplir con ciertas normas". Por ello reivindicó la creación de un reglamento por parte de la administración pertinente para "que pueda desalojar a un inquilino cuando no tiene buen comportamiento".
Asimismo, indicó que ellos lo que quieren es alquilar, y para ello creen que solo sería necesaria la licencia de segunda ocupación. Hay que recordar que el cambio introducido con la nueva Ley de Turismo de la Generalitat hacía necesario desde el verano pasado la obtención por parte de los propietarios de una compatibilidad urbanística que tienen que expedir los Ayuntamientos.
Pero no ha sido hasta diciembre, con una disposición adicional, cuando han podido desbloquear en un destino tan importante como Benidorm la obtención de este certificado. Como publicó este diario, el nuevo reglamento chocaba con el Plan General de Ordenación Urbana de muchos de los ayuntamientos de la Comunitat.
Para el empresario, los movimientos que están haciendo significan una prueba de que les quieren fuera del mercado: "Nos quieren fuera del mercado, quieren liquidar la vivienda de alquiler vacacional de la Comunitat Valenciana. Van a hacer daño a las empresas de alquiler y al resto de servicios de la Comunitat que dependen de ella. Si la vivienda no se alquila, la mitad de la Comunitat valenciana se va al carajo", manifestó Sotillos.
No obstante, explica que han tratado de tender puentes con todas las partes porque lo que buscan es el consenso. Sin embargo, creen que cuando lo consiguen, se dan cuenta de que ha habido cierto engaño. Según el empresario, creían que Turisme no había endurecido la norma, pero se enteraron por los medios de comunicación que no pudieron porque los asesores jurídicos no lo permitían.
A última hora de la tarde y tras varias reuniones, las aguas se habían calmado por las dos partes, asegurando Sotillos que las relaciones eran cordiales "aunque con baches en el camino". A continuación, agradeció la implicación de Turisme para arreglar la situación con la disposición adicional.
Preguntado por su relación con Turisme, Sotillos dijo que al menos, lo que habían pedido hasta ahora se había cumplido, en relación a la disposición adicional comentada anteriormente.
Pero no solo iba con la Generalitat, también mencionó a los hoteleros. Para Sotillos, las reclamaciones que están haciendo desde la patronal hotelera Hosbec les recuerdan al problema que están manifestando los taxistas con la competencia de las nuevas tecnologías. "No quieren a nadie en su coto de caza. Todos los turistas tienen que alojarse en hoteles y pagar lo que digan", comentó Sotillos.
En cuanto a las alegaciones a la regulación del alojamiento vacacional, dijo haberlas comentado con la administración autonómica y que podían ser factibles según la respuesta obtenida. "¿Qué es lo que van a hacer al fina? Lo de siempre, lo que digan los de Podemos, Compromís y los hoteleros", reflexionó.