¡Aloha! el retorno de las camisas hawaianas

VALÈNCIA. La historia de las primeras camisas hawaianas sigue sin estar del todo clara. La tradición local va desde una anécdota de un grupo de chicos de colegios privados que tenían camisas confeccionadas por sastres del centro de Honolulu hasta una historia sobre el actor de Hollywood John Barrymore pidiendo a Dolores Miyamoto, esposa del sastre Musa-Shiya de Honolulu, una camisa a medida con un estampado inspirado en los kimonos japoneses.

De todos modos, la existencia de la camisa hawaiana también conocida como camisa aloha, se puede remontar a la unión de distintas influencias culturales. Su silueta es de estilo occidental -similar a una 'palaka', camisa de trabajo de algodón que usaban en las plataciones e inspiradas en las de los marineros occidentales-, el tejido, en cambio, es japonés de crepé 'kabe' como la empleada en los kimonos femeninos y estaban cosidas por sastres chinos y japoneses que habían emigrado a Hawai. La camisa hawaiana es el reflejo de la diversidad étnica de Hawai. 

La prenda favorita de turistas, surfistas y algún presidente 

En 1920 los primeros turistas que llegaban a la isla se enamoraron de estas originales camisas y buscaron sastrerías locales para comprarlas por encargo. Los comerciantes se dieron cuenta de la demanda y fabricaron camisas listas para vender, los turistas se las llevaban a sus paises como souvenir de la isla. Después de la guerra, la demanda de indumentaria isleña en Hawai aumentó y con ello la fabricación y las ventas se multiplicaron. De los años 40 hasta los 50 se considera la época dorada de la camisa aloha debido al gran aumento del turismo en Hawai y a su popularización gracias a estrellas como Bing Crosby, Frank Sinatra, Montgomery Clift y, sobre todo, Elvis Presley. La camisa incluso llegó a la Casa Blanca con los presidentes Harry Truman o Eisenhower o, más recientemente, con Obama.

Los surfistas de todo el mundo se aficionaron rápidamente a estas camisas con estampados inspirados en el mar y la naturaleza y, poco a poco, las camisas hawaianas se popularizaron como una prenda de uso casual en muchos lugares durante las décadas de los 80 y 90. 
 Con su masificación y producción barata y en serie en Occidente, comenzó el declive de las camisas aloha que acabaron asociándose a padres barrigudos, turistas con bermudas y un estilo desfasado. Sin embargo, todos sabemos que en moda todo vuelve y las camisas hawaianas lo han hecho convertidas de nuevo en objeto de deseo.

Las camisas hawaianas que conquistaron el cine  

Además del turismo y los surfistas, la influencia del cine fue una de las principales causas de la popularización de las camisas hawaianas. En 1961 Elvis Presley lucía camisas hawaianas en su película más exitosa, Blue Hawai. El protagonismo de las camisas aloha en la gran pantalla no se queda aquí, hay personajes míticos del cine asociados a ellas como, por ejemplo, Nicolas Cage en Arizona baby, un ladrón al que le gusta el estampado tropical, casi tanto como a Al Pacino en Scarface de 1983.  Pero quizá algunas de las camisas hawaianas más copiadas de la historia sean, tras las de Elvis, las que llevaba Tom Selleck en la exitosa serie de la década de los 80, Magnum. Un joven Leonardo DiCaprio presumía también de camisa tropical en varias escenas de la película Romeo y Julieta. Con menos atractivo vestía su camisa aloha el detective de mascotas Ace Ventura protagonizado por Jim Carrey.

También hay algún ejemplo de moda hawaiana en su versión femenina, es el caso de Julia Roberts y sus amigas en Novia a la fuga.  La tendencia Hawai es un recurso frecuente en el vestuario de muchas películas, seguro que el cine continuará dándonos más ejemplos.

Este verano la moda grita aloha

Las camisas hawaianas han pasado de ser propias de turistas de otra época y la prenda con la que tu padre te avergonzaba cada verano, a convertirse en una tendencia que puede encontrarse en las tiendas de moda rápida y también en las firmas más exclusivas. Atrás quedaron los días en los que una camisa hawaiana era algo pasado de moda y sinónimo de verano casposo. Esta temporada es una de las grandes tendencias y su estampado lleno de palmeras, hibiscus, olas y playas, inunda todo tipo de prendas. Los motivos hawaianos son las nuevas flores. La moda masculina y femenina este año sueña con paisajes paradisíacos y atardeceres en Waikiki.

El calor aumenta y las ventas de camisas aloha se disparan. En el último año las búsquedas de 'camisas hawaianas' subieron un 25% según Hitwise -empresa especialista en comportamiento online-. Basta un paseo por las tiendas para darse cuenta que el estampado tropical y las camisas hawaianas están por todas partes. En su versión más contundente con colores vivos o en tonos más discretos. Hawai está presente también en vestidos, faldas y pantalones cortos.

Sobre la pasarela hemos visto los exclusivos diseños aloha de Prada, Louis Vuitton o Balenciaga. También la versión nacional de la mano de Juan Vidal que en su colección para esta primavera-verano, imaginó mujeres con elegantes y vaporosos vestidos estampados con hojas de palmera, hibiscus y hasta volantes de rafia estilo Hula. 

Pero además de viajar en primera a Hawai, la moda también nos permite comprar un billete low cost gracias a las propuestas de Zara, Mango o Asos, por citar algunos de los muchos ejemplos. El vuelo no les resultará tan placentero pero llegarán igualmente a las playas de Honolulu.

Quizás la apuesta más cercana a aquellos turistas y surfistas del pasado visionarios de la moda,  sea hacerse con una camisa hawaiana en una tienda especializada en ropa vintage, como la valenciana 'Santo Spirito Vintage' que cuenta con una amplia selección.

Camisas hawaianas: manual de uso

Las camisas hawaianas se caracterizan por sus colores llamativos, por eso, para combinarlas correctamente solo hay que tener en cuenta un par de detalles. Lo más fácil es elegir el color de los pantalones en función del tono del fondo de la camisa. Por ejemplo, unos pantalones azul marino o jeans con una camisa cuyo fondo es azul marino. Otra forma algo más arriesgada de combinarlas es buscando que el color de los pantalones combine con el color de algún detalle predominante en el estampado. Por ejemplo, un pantalón caqui como el color de las hojas del estampado.

Siempre habrá que huir de mezclarla con  pantalones de colores  muy llamativos como amarillo o rojo porque para colores, mejor los del estampado de la camisa.

Las opciones para vestirla varían desde el estilo más 80s al más retro. Abierta encima de una camiseta lisa -blanca a ser posible- o abotonada como una camisa clásica para aquellas que no sean oversized. 

Y ya vestidos con su estampado hawaiano, mientras pisan asfalto,  estarán listos para preguntarse en un suspiro como en aquella canción: “¿Cuándo podré ir a Hawai? ¡Ay!”