Abertis, UGT y CCOO recurren el mantenimiento de la AP-7 liberalizada y paralizan el proceso

CASTELLÓ. La empresa concesionaria de la AP-7 hasta el próximo día 31, Abertis, y los sindicatos UGT y CCOO han recurrido los cinco pliegos que el Ministerio de Fomento ha sacado a concurso para el mantenimiento de esta autopista y la AP-4 Sevilla-Cádiz una vez ambas queden liberalizadas a partir de Año Nuevo. Los recursos han conllevado la paralización de todos estos procesos. 

El motivo de la disputa es la subrogación de los trabajadores que Fomento pretende llevar a cabo. Y lo más curioso es que en este aspecto incluso se enfrentan la gestora actual y el Ministerio. En este sentido, fuentes sindicales concretan que este choque viene producido porque, tras la firma del Expediente de Regulación de Empleo entre Abertis y los sindicatos que afecta a 136 personas (centrado fundamentalmente en los operarios de los peajes), en la compañía consideran que Fomento se debería subrogar a los 158 empleados restantes (dedicados al mantenimiento), mientras en Fomento señalan que 12 de ellos no son personal a subrogar. Los motivos que aduce son varios, como que algunos son personal fuera de convenio. 

Esto ha motivado el recurso de Abertis. Por su parte, los sindicatos pretenden que la subrogación de los trabajadores, que incluye a aquellos 158 junto a los de las subcontratas, se realice mediante la aplicación del artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores, "más garantista que el convenio de la Construcción al que se acoge Fomento". 

Ya se incumple el primer plazo

Estas disputan se dan en todos los contratos que Fomento ha sacado a concurso para el mantenimiento: los de las provincias de Tarragona, Castellón, Valencia, Alicante y Sevilla. En el caso de la Comunitat suman 41 millones de euros. Y ello ha motivado la paralización de los trámites por parte del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales que depende del Ministerio de Hacienda. Con ello, los plazos para la presentación de las ofertas han sido invalidados y esto derivará en que se postergue, todavía más, la adjudicación de los nuevos contratos. 

De esta manera, y aunque Fomento pretende reducir al máximo la dilación -la nota aclaratoria de la suspensión señala que el nuevo plazo de presentación de ofertas "no será superior a 10 días naturales desde la publicación del levantamiento de la suspensión"-, es inevitable la prolongación de los tiempos. De momento, la presentación de ofertas se debería haber cerrado el pasado lunes día 16 y el primero de los sobres, el que incluirá la documentación administrativa, se debía haber abierto el miércoles 18. 

Ni una cosa ni la otra se ha producido y con ello la adjudicación de los nuevos contratos de mantenimiento se prolongará hasta bien entrado 2020. No en vano, el último sobre, el de la oferta económica, se debía abrir el próximo 6 de febrero e inevitablemente se producirá más tarde. Por todo esto, Fomento ya ha anunciado, como respuesta a lo que publicó este diario, que será la misma concesionaria, Abertis, la que se encargue de la conservación de la autopista hasta la nueva adjudicación.

Menos trabajadores para atender más tráfico

Desde los sindicatos destacan además que los pliegos de Fomento no recogen la subrogación de todos los trabajadores que actualmente desempeñan las labores de conservación y mantenimiento. Así, mientras 275 personas trabajan en la actualidad en las dos autopistas en ello (entre los contratados directamente por Abertis y las subcontratas), en sus pliegos Fomento solo recoge la subrogación de 220. 

Estas 55 personas no incluidas en los contratos para la AP-7 y la AP-4 se quedarían así fuera a pesar del más que previsible aumento del tráfico, que el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Comunitat Valenciana cifra en una duplicación para los turismos, mientras que para los camiones se cuadriplicará. 

Por esta y otras razones desde UGT critican la "improvisación" de Fomento en este asunto, máxime cuando es la segunda ocasión en poco más de un año que debe afrontar, tras la reversión de la AP-1 de Burgos a Armiñón. "El Ministerio está repitiendo los mismos errores" que en aquel caso, señalan las fuentes, que consideran que los procesos se desarrollan "de forma muy caótica".