VALÈNCIA. Tras siete meses de letargo parlamentario, Les Corts retoman estos días su actividad con normalidad. La semana pasada le tocó a los consellers del Ejecutivo valenciano, quienes comparecieron para explicar su hoja de ruta para los próximos cuatro años. Y este jueves tendrá lugar la primera sesión de control de la legislatura del Botànic II al president de la Generalitat, Ximo Puig.
Una cita que, a pesar de estar prevista en el calendario desde hace semanas, pilló a los noveles a pie cambiado. El grupo parlamentario Vox registró este lunes fuera de plazo la pregunta de control al jefe del Consell. Un retraso que obligará a la Mesa de Les Corts este martes a reunirse para dirimir si les permiten intervenir para hacerlo o no.
Esto es porque según el artículo 173.2 del reglamento del Parlamento valenciano, los partidos deben presentar las preguntas al president 48 horas antes del inicio del pleno. Teniendo en cuenta que la sesión comenzará el miércoles a las 10.30 de la mañana, la cuestión debería haber sido registrada este lunes antes de dicha hora. Sin embargo, los diputados del partido de Santiago Abascal se demoraron en torno a treinta minutos en hacerlo.
No es el único motivo por el que la Mesa debe decidir si la tramita o no: la pregunta fue registrada con un error de forma. El escrito iba firmado por el portavoz adjunto del grupo José María Llanos, cuando la normativa de la cámara establece que deben ser registradas con la rúbrica del síndic o síndica del grupo -en este caso, Ana Vega-.
En cualquier caso, el president de la Generalitat sí se enfrentará a las preguntas del resto de partidos con representación en la cámara. En concreto, Unides Podem le cuestionará sobre las consecuencias que puede tener las elecciones del 10 de noviembre en la Comunitat Valenciana.
El PPCV, por su parte, inquirirá Puig sobre la situación financiera de la autonomía y Ciudadanos quiere saber "en qué consellerias y de qué forma repercutirá en el Consell los recortes presupuestarios de más de 450 millones de euros anunciados por el Ministerio de Hacienda".
Los socialistas, que anunciaron la semana pasada que cambiarían de estrategia en esta legislatura y sí preguntarían al jefe del Consell en las sesiones de control, finalmente no lo harán.