ALICANTE. La Conselleria de Medio Ambiente da otro aviso a la Autoridad Portuaria de Alicante y le conmina a poner en marcha las medidas antigraneles fijadas en la autorización de emisiones a la atmósfera que concedida el pasado mes de marzo. El secretario autonómico, Julià Álvaro, y el director general de Calidad Ambiental, Joan Piquer, trasladaron personalmente este jueves al presidente y al director general del Puerto, Juan Antonio Gisbert y Carlos Eleno, la preocupación de la conselleria sobre la formación de al menos dos nubes de polvo registradas a lo largo del último mes y medio. Dos episodios que llevaron a la Autoridad Portuaria a poner en marcha el protocolo de prevención y a suspender la actividad de carga y descarga de materiales que se estaba llevando a cabo en los muelles de Poniente.
Según explicó el propio Álvaro a través de su blog personal, en esa reunión confirmó a los responsables del Puerto la apertura de un expediente informativo para evaluar lo sucedido, mientras que Gisbert y Eleno le detallaron que todas las medidas de prevención comprometidas en el permiso autonómico estarían en funcionamiento antes de que concluyese agosto, como publicó este diario.
El 'número 2' de la conselleria reitera la necesidad de desarrollar la carga y descarga a cubierto
Álvaro reconoció que algunas de ellas se habían retrasado por cuestiones burocráticas y, según apuntó en ese post de su blog, se volvió a marcar el camino a seguir hasta organizar el movimiento de graneles en naves cerradas. "Reiteramos la necesidad de que tengan a punto la contratación de la construcción de naves en depresión y la conveniencia de buscar, entre todos, la vía más fácil para conseguirlas", explicó. "Los directivos del Puerto nos aseguraron su implicación. Y todos estamos de acuerdo en que, de una manera u otra, acabaremos en ellas", añadió.
De acuerdo con el permiso concedido por Medio Ambiente, el Puerto quedaba obligado a habilitar un primer paquete de medidas antigraneles, entre los que se incluía la instalación de una red de medidores sobre la calidad del aire en el entorno del recinto portuario. Sólo tras el análisis de resultados captados en esa red de control durante un plazo de un año, se concretaría si resultaba necesario ampliar ese sistema preventivo mediante la construcción de las naves cerradas.
Entre tanto, la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alicante ha vuelto a poner en marcha una segunda campaña de captación de datos sobre la emisión de partículas a la atmósfera que se desarrollará durante los meses de verano.