Aspecto que presentaban las calles del casco antiguo.ALICANTE. Los efectos de la huelga de celo de los trabajadores del servicio de limpieza de Alicante ya son visibles. Al menos, en la zona del casco antiguo en el que los operarios no han hecho las horas de más que hacían y, por tanto, los las bolsas de basura sen han quedado en zonas de depósito hasta media mañana, cuando un equipo de refuerzo las ha retirado. En el resto de barrios de la ciudad, el servicio se ha cumplido con normalidad.
Esta pasada noche, tampoco no han salido toda la flota. Los sindicatos consideran que muchos de los vehículos no están para prestar servicio y por lo tanto, no han salido esta noche de sus instalaciones, en el polígono industrial del Pla de la Vallonga. El servicio se ha prestado con normalidad, a excepción del casco antiguo, en el que los restos se han quedado acumulados y se han recogido horas más tarde. Y, además, muchos de los residuos recogidos, posteriormente no ha sido descargados en las instalaciones de la empresaria concesionaria, UTE Alicante (formada por FCC, Ferrovial y Cívica) porque los empleados al completar su jornada, la han dejado en los camiones, según ha explicado el presidente del comité de empresa, Antonio Martín Pujante, del CSIF.
Pujante ha anunciado que van explicar esta situación a partir del lunes a los colectivos vecinales. Entre ellos, los motivos que les han llevado a realizar esta huelga de celo: la escasez de personal en plantilla, que requeriría un centenar de efectivos más y ha dado lugar a una sobrecarga de trabajo que ha causado numerosos accidentes y bajas laborales. Y a ello se añade la necesidad de renovar la flota de vehículos. Según el comité de empresa, el 50% de la actual flota de vehículos del servicio no ha sido renovada", lo que "está ocasionando constantes averías que implican pérdidas de tiempo y retrasos de los cuales se hace responsables a los trabajadores cuando estos no tienen ninguna culpa
Acumulación de basura en el casco antiguo.
