Uno de los autobuses de la red municipal de transporte público de Alicante.ALICANTE. Los tres grupos del eje progresista que ejercen funciones de oposición en el Ayuntamiento de Alicante, PSOE, Unides Podem EU y Compromís, han reaccionado este martes al desarrollo de la Mesa de Contratación en la que se ha valorado las propuestas presentadas al concurso por la prestación del servicio público de transporte en autobús para expresar su confianza en que el inicio de la nueva concesión -que, previsiblemente, quedará en manos de la UTE MIA, formada por empresas del Grupo Vectalia- suponga una mejora en el funcionamiento del sistema, aunque han vuelto a reiterar sus críticas por el retraso en la renovación del servicio y por el modelo de concesión elegido para su prestación.
Así, en primer término, el concejal del PSOE, Manuel Martínez, ha considerado que la opción de que Vectalia siga otros diez años con la contrata de transporte urbano "significa que se ha elegido la oferta menos mala". "El grupo municipal socialista espera que la licitación de esta contrata signifique a corto plazo una sustancial mejora del servicio de bus entre los barrios, verdadero talón de Aquiles del actual servicio".
En segundo lugar, el portavoz municipal de Unides Podem EU, Xavier López, ha señalado que "el modelo que ha exigido siempre Unidas Podemos respecto a la contrata de autobús es un modelo de gestión cien por cien pública". "Si en Madrid, Barcelona o València funcionan empresas municipales con gestión directa, que además de ofrecer un buen servicio resultan mucho más baratas para las arcas de los ayuntamientos, no llegamos a comprender por qué en Alicante siempre se tiene que hacer negocio con los servicios públicos", se ha cuestionado.
Así, ha considerado que "desde luego, esta contrata no responde a las necesidades que tiene la gente trabajadora y el conjunto de la ciudadanía en general, y nosotros lo que decimos es que hace falta una empresa metropolitana participada además por la Generalitat, porque el servicio actual ni nos conecta con el resto de poblaciones de la comarca ni atiende a lo que son las exigencias de una ciudad del siglo XXI".
En tercer término, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha criticado que "el pliego de condiciones no responde a las expectativas de lo que tiene que ser la movilidad de una ciudad del siglo XXI conectando como pedíamos una ronda circular con frecuencias y que vertebrara la ciudad, y siendo útil, lo que significa ayudar a la ciudadanía en su día a día". Así, ha considerado que "debería conectar con los polígonos industriales, con los centros de trabajo, con la gente que estudia". "Eso es lo que necesitamos para que el autobús sea una alternativa potente al coche en una ciudad que tiene que cambiar del modelo cochista por el que apuesta la derecha a un modelo de movilidad sostenible que tiene que ir por otro lado", ha concluido.
