ALICANTE. La empresa Harinas Cloquell S.L., actualmente en manos de la familia Bufort, ha ampliado su objeto social para convertirse en urbanizadora, al tiempo que ha llevado a cabo una ampliación de capital por valor de 3 millones de euros. Dos movimientos que parecen encaminados a poner en marcha de forma inminente el plan parcial de Benalúa Sur, reactivado tras 16 años de bloqueo desde que el antiguo urbanizador renunciase a los trabajos.
Según publica el Borme, la harinera ha ampliado su objeto social a "la ejecución directa, o gestión mediante los correspondientes contratos de obras o servicios, de obras de urbanización e infrasestructuras, requeridas por la legislación urbanística vigente para dotar a toda clase de suelos de la condición jurídica de solar". Asimismo, ha inyectado 3.046.469 euros de capital, de manera que el resultante suscrito se eleva a 4.428.769 euros.
Como ha venido contando Alicante Plaza, la reactivación de esta actuación urbanística contempla terminar los trabajos de parcelación y urbanización que dejó pendientes la anterior adjudicataria (Nuevo Sector Benalúa Sur SL), y edificar 600 viviendas repartidas en 11 torres de hasta 7 alturas. Ahora, a través de una Agrupación de Interés Urbanístico (AIU) constituida por los propietarios del sector, entre los que se cuenta la empresa harinera.
Al mismo tiempo, Harinas Cloquell ha absorbido a la empresa que, en 2007, se encargó de construir, en UTE con Elecnor SA, el polígono industrial de Riodel, en la vecina localidad de Mutxamel: Actuación Industrial Riodel SL, también controlada por la familia Bufort. La fusión por absorción se aprobó en las respectivas juntas de las dos sociedades el pasado 29 de septiembre, según ha publicado el Borme. El administrador único de ambas sociedades es Antonio Bufort.
El Ayuntamiento desbloqueó el PAI de Benalúa Sur en la junta de gobierno del pasado 5 de diciembre, después de 17 años de vicisitudes. La más significativa, la retirada de la condición de agente urbanizador a su primer adjudicatario, el grupo Prasa, que se acordó durante el pasado mandato (todavía con el PP en la Alcaldía), por el incumplimiento en los plazos de ejecución. Ahora, la AIU Nuevo Sector Benalúa Sur 2, constituida por los propietarios del terreno afectado, retomará los trabajos de urbanización al mismo tiempo que se empiezan a construir los edificios proyectados.
Entre los propietarios de suelo se cuenta la antigua harinera de la familia Cloquell, que en 2013 pasó a manos de la 'competencia', la familia Bufort, junto con el terreno del que era propietaria en la zona del ámbito del plan parcial. Asimismo, también poseen suelo en la zona Tossal Acción Territorial, Urbal Programas Urbanos SL, Huerta del Mar SL, Profu SA y Compañía Inmobiliaria Amandi SA.
Antonio Bufort, biznieto del fundador de Harinas Bufort (Francisco Bufort Alemany), compró Harinas Cloquell en septiembre de 2013, cuando los propietarios tenían decidido echar el cierre. Ambas fábricas se alzan, una junto a la otra, en la carretera de Elche, en el acceso sur a la capital alicantina (y dentro del ámbito del PAI). En la actualidad, la actividad de estas dos empresas históricas, fundadas a principios del siglo pasado, se mantiene aunque afectada por la crisis de precios y la fuerte competencia en el sector que han forzado las grandes superficies comerciales.
El plan parcial de Benalúa Sur contempla la construcción de alrededor de 600 viviendas distribuidas en 11 torres de un máximo de 7 alturas (planta baja más seis) sobre un área de 75.000 metros cuadrados en la que se encuadra el nuevo colegio público de Benalúa, ya en funcionamiento, tres zonas verdes de que suman 12.000 metros y otra zona dotacional de 3.000 metros más. Además, se garantiza el encaje de las antiguas chimeneas industriales como elementos protegidos. Los trabajos de urbanización pendientes (el 62,39% que no llegó a ejecutar Prasa) deben desarrollarse en un máximo de 15 meses, por lo que deberían estar finalizadas en el verano de 2018. La AIU pretende simultanear las obras de la fase de urbanización con la construcción de algunos de las torres de edificios previstas, tal como contó este diario.
Según el anuncio de aprobación del nuevo Plan Parcial Benalúa Sur, publicado hace una semana en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV), los nuevos urbanizadores deben seleccionar a un contratista, que bien podría ser la harinera reconvertida en urbanizadora, para abordar las obras en un plazo de cuatro meses. El plan debe incluir como carga de urbanización una partida de 100.000 euros para llevar a cabo la rehabilitación de las chimeneas industriales, catalogadas como elementos protegidos incluidas en el sector.