ELCHE. El Ayuntamiento sigue moviendo ficha en el ámbito de patrimonio, uno de los más candentes a día de hoy. En la nueva reunión de la Mesa de Patrimonio, el equipo de gobierno ha dado cuenta de las últimas medidas adoptadas. La más importante de ellas, la de extender la tutela arqueológica a la totalidad del núcleo histórico tradicional, vía modificación de un artículo del actual Plan General. Una decisión que se corresponde, según el edil del área José Manuel Sánchez, con una reivindicación que se ha venido pidiendo en los últimos tiempos.
En otras palabras, extender la tutela arqueológica que había en la Vila Murada, las Clarisas y el palacio de Jorge Juan, al resto del núcleo histórico tradicional, desde el Parque Municipal hasta el sur del Raval, y desde Filet de Fora hasta la ladera oeste del río. Esto supone que a partir de la entrada en vigor de esta modificación, que se espera que sea durante 2018, se establece la obligatoriedad de que el promotor de una obra o de otro tipo de intervención que implique remoción de tierras, públicas o privadas, debe aportar ante la Conselleria competente un estudio arqueológico suscrito por técnicos sobre los efectos que las mismas pudieran causar en los restos de esta naturaleza y las medidas preventivas a adoptar en su defecto.
Por lo tanto, a partir de su entrada, hará falta ese estudio tanto para una simple zanja como para una parcela en la que se vaya a construir una vivienda: el Ayuntamiento no va a conceder ninguna licencia o permiso si no se ha obtenido previamente el permiso de la citada Conselleria en dicho núcleo histórico tradicional. Una decisión que en el caso del Mercado Central, podría haber ahorrado varios quebraderos de cabeza o polémicas, como reconoce el concejal.
Precisamente, sobre el Mercado Central, las Sánchez informa de que las catas que se están realizando en la zona actual finalizarán antes de navidad. Tras la vuelta de las vacaciones se retomará el trabajo en la calle Ànimes y posteriormente en la parte sur del inmueble, que serán las de mayor duración, aproximadamente unos meses. Esto supone que el global de esta tercera fase de las excavaciones arqueológicas no acabará hasta finales de abril o mayo. Después empezarían de nuevo los trámites para informar a Conselleria y que esta dilucide la importancia de los restos hallados, y por tanto, la viabilidad o no del nuevo Mercado Central.
En otro orden de acontecimientos, además del inmueble de Nuevos Riegos el Progreso, también tiene una licencia de demolición el edificio de la Banca Peral, pero en su caso, Sánchez señala que tiene protección estructural y a la propiedad se la ha concedido la licencia con la condición de que debe mantener la fachada del edificio tal y como está, así como la escalera del mismo.