El director general de Comercio, Natxo Costa, conversa con el conseller De Economía, Rafa Climent, en imagen de archivo.ALICANTE. Se avecinan cambios definitivos en la regulación de los horarios comerciales -y las llamadas Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT) que permiten abrir en domingos y festivos- para Alicante y para el conjunto de la Comunitat. Esas modificaciones se implantarán en dos fases. La primera afectará sólo a la ciudad de Alicante a partir del próximo 15 de junio. En esa fecha, el Consell debe tener aprobada y publicada una autorización provisional para que Plaza Mar 2, Gran Vía y Puerta de Alicante dispongan del mismo régimen de libertad del que ya dispone el comercio asentado en el Centro tradicional, después de que una sentencia judicial haya reconocido su derecho a ser incorporados en la ZGAT vigente. En la práctica, esa autorización supone instaurar una libertad horaria para toda la ciudad, ya que sólo queda fuera de ese régimen una gran superficie comercial: Parque Vistahermosa.
Ahora bien, ese reconocimiento no tendrá duración indefinida. Fuentes del Consell precisaron que sólo estará vigente durante los meses de verano: desde el 15 de junio hasta el 15 de septiembre. Y ahí es donde entra en juego la segunda fase de las modificaciones, con una ambición global.
El director general de Comercio, Natxo Costa, desveló este jueves, tras el transcurso de una reunión con los principales actores del sector, la convocatoria de una próxima reunión del grupo de trabajo creado por la Conselleria de Economía para tratar de alcanzar un pacto autonómico sobre los horarios comerciales. Esa cita se desarrollará el 14 de junio. El Consell acudirá a esa cumbre con una propuesta básica con aspiración de conciliar la actividad del gran y el pequeño comercio que, de acuerdo con los contactos previos, podría generar cierto consenso: libertad horaria para todos pero de carácter estacional, reducida a tres periodos clave en los que se considera acreditado un mayor trasiego de consumidores que justifique las aperturas en domingo. El primero, el verano: entre el 15 de junio y el 15 de septiembre. El segundo, Semana Santa: desde el Domingo de Ramos hasta el lunes de San Vicente. Y el tercero, Navidad: todo el mes de diciembre hasta el primer domingo después de Reyes.
El planteamiento está sujeto a posibles variaciones en las fechas concretas, pero no en la cifra global de domingos y festivos aperturables, fijado entre los 22 y los 30. De alcanzarse un acuerdo, esa regulación quedaría sancionada en la reunión del Observatorio de Comercio prevista para el 19 de junio. Ese nuevo régimen podría incluso ser de aplicación antes de que finalice este próximo verano, una vez cubierta la fase de exposición al público y de presentación de alegaciones (si hay acuerdo, lo esperable sería que no se presentasen).
Comercio se considera avalado por hasta tres sentencias de tres tribunales superiores autonómicos distintos para interpretar, moldear y revisar las zonas ZGAT que no cumplan los requisitos de afluencia turística
¿Qué sucede si no existe pacto? En primer término, no se abrirá el grifo y, como hasta ahora, se seguirá concediendo autorizaciones para abrir en festivo previa declaración de ZGAT sólo en los casos en los que se cumplan los requisitos legales. En esos casos, además, se estará especialmente vigilante a la acreditación de afluencia de turistas y se apostará por el carácter estacional de las autorizaciones. Es más, el Consell baraja ajustar las ZGAT que ya están en vigor -como la de la ciudad de Alicante, aprobada en 2016 como una reformulación casi idéntica a la de 2013- para acoplarlas a esa temporalidad en todos aquellos casos en los que no se cumpla la condición real de afluencia de visitantes.
Fuentes del Gobierno valenciano precisaron que existe reciente jurisprudencia que avala la plena potestad del Consell de acordar, interpretar y moldear las ZGAT ya reconocidas y promovidas por los ayuntamientos (que, como fija la legislación, le corresponde evaluar y sancionar al propio ejecutivo autonómico). Se trata de tres sentencias concretas sobre la materia dictadas por los Tribunales Superiores de Justicia (TSJ) de la Comunitat, de Andalucía y de Extremadura. La más significativa, según las mismas fuentes, es la referida al Ikea de Alfafar (Valencia), conocida este mes de abril, por la que se desestima su pretensión de que su tienda sea reconocida como parte de una ZGAT para poder abrir en festivo.
La compañía sueca alegaba que en Alfafar existe un Bien de Interés Cultural (BIC), uno de las condiciones contempladas en la normativa para reconocer una ZGAT. Sin embargo, el fallo entiende que ese requisito no demuestra que exista afluencia de visitantes, ya que el BIC en cuestión es el edificio del "sindicato arrocero" que, según las mismas fuentes, no tiene actividad los domingos y, en consecuencia, no puede generar el tráfico de visitantes necesarios como para justificar el régimen de apertura en festivos. Esa sentencia llega a reconocer "la competencia exclusiva en materia de turismo y comercio interior» a la Generalitat en lo que constituye todo un espaldarazo a los planes de Economía y Comercio.
