El cartero siempre llama dos veces

ALICANTE. Ocurrió en septiembre de 2016 y ha vuelto a suceder ahora.

Un día más tarde de lo previsto por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), pero el cartero ha terminado llamando a la puerta de las oficinas del Hércules este martes para notificarle el requerimiento de pago de los siete millones de euros que reclama la Comisión Europea al club blanquiazul y que el banco del Consell es el encargado de cobrar en una primera fase.

El Hércules ha sido informado de que cuenta con diez días hábiles para alegar, con independencia de la interposición de un recurso administrativo contra este acto y que tiene hasta el 20 de junio como fecha límite para hacer frente al pago de la citada suma. No obstante, tratará de paralizar ese plazo con la complicidad del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), ante el que se dispone a recurrir el auto del Tribunal General del pasado 22 de marzo en el que se le desestimaba la solicitud de suspensión de la ejecución de la decisión de recuperación en virtud de la que se le reclaman los siete millones de euros. Para la interposición del recurso de casación ante el TJUE el club dispone hasta la tercera semana de mayo, pero no agotará ese plazo dado que, como adelantó Alicante Plaza, en el mismo va a alegar "urgencia" en la adopción de la medida cautelar de suspensión puesto que la ejecución le causa "un perjuicio grave e irreparable".